(Bolpress.com).-

El presidente de Bolivia, Gonzalo Sánchez de Lozada, es el más impopular de latinoamérica.Vive uno de los momentos más críticos de su gobierno. Sólo tiene un nueve por ciento de respaldo de la población, según un artículo publicado en La Tercera de Chile.
Las manifestaciones en contra se repiten desde que asumió el gobierno en agosto de 2002, debido a que su administración no ha podido encontrar el rumbo necesario para impulsar la economía de Bolivia y tampoco resolver las constantes demandas de los sectores sociales.
A esto se suma el elevado número de muertos más de sesenta, desde el inicio de su gestión, como consecuencia de enfrentamientos entre furezas del orden y principalmente campesinos de varias regiones del país.
"Estamos frente a una situación muy delicada. hemos pasado de una alta conflictividad social a una alta violencia", dijo el analista político, Jorge Lazarte, entrevistado por el diario chileno.
Sólo el presidente de Perú, Alejandro Toledo, en el último tiempo ha afrontado un clima de tensión tan elevado, como el que se presenta en el país, y el apoyo que recibe de la población se traduce en el más bajo de la región latinoamericana, pues el mandatario de Brasil, Luiz Ignácio Lula da Silva, posee en 45 por ciento y Álvaro Uribe, presidente de Colombia cuenta con un 70 por ciento.
Las protestas en Bolivia se iniciaron en rechazo a la exportación del gas a mercados estadounidenses por un puerto chileno, unificándose alrededor de esta demanda todos los sectores sociales del país, campesinos, cocaleros, trabajadores sindicalizados, estudiantes y vecinos.
Actualmente las medidas de presión que estos sectores implementan, como es el bloqueo de caminos y el bloqueo económico persiste en las regiones del Altiplano y el norte paceño, bajo la dirección de la recientemente creada Dirección Única de Movilizaciones, la misma que en estos días definirá nuevas medidas en defensa del gas.