FORO INTERNACIONAL CAMPESINO E INDÍGENA
Señor Presidente Luiz Ignacio Lula da Silva
Palacio de Planalto Brasilia
Cancún, 12 de septiembre de 2003

La Vía Campesina Internacional, organización que aglutina a unos 60 millones de personas del campo en el mundo entero, quiere expresar la más profunda preocupación por el acoso militar del cual está siendo objeto el Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra de Brasil, cuya sede en Sao Paulo ha sido cercada por la policía desde hace varios días y que, además, arroja ya el saldo del arresto de cinco dirigentes de los 11 amenazados con mandato de prisión, que se suman a decenas de trabajadores y trabajadoras sin tierra encarcelados en el país en este año.

Para nuestra organización que sustenta su propuesta en la justicia social, los derechos humanos y la soberanía alimentaria, donde las personas del campo puedan vivir con dignidad, la propuesta de una reforma agraria integral, como la reivindicada por el Movimiento Sin Tierra, es una condición indispensable para garantizar el propio mantenimiento del campo como entidad social, que está siendo amenazado por la avidez de las corporaciones transnacionales y los grandes capitales.

Es también motivo de nuestra preocupación que estas acciones antidemocráticas, que ponen en entredicho el sustento democrático y de derecho con los cuales se identifica su país, se expresen ahora que usted, un luchador por los derechos de los trabajadores, gobierna el país.

Para nuestra membresía de los cinco continentes, reunida en Cancún (México) hoy 12 de septiembre de 2003, es inadmisible que en su país y bajo su gobierno, se esté agudizando la tendencia a la criminalización de movimientos sociales, que actúan en pos de la obtención de los derechos humanos integrales para las personas del campo.

Esperamos tener una respuesta que explique a los y las campesinas del mundo el por qué en Brasil y bajo su gobierno se ha agudizado la arremetida contra los trabajadores rurales sin tierra, al punto que en lo que va del año se registran ya cuarenta y seis trabajadores rurales asesinados en su país, mientras continúa campeando la impunidad por casos similares registrados anteriormente.

Agradecemos su atención y reiteramos nuestra expectativa de un inmediato restablecimiento de los derechos de los trabajadores rurales y la vigencia de los derechos humanos en su país. Confiamos en que se erradicará la impunidad que pesa sobre los crímenes cometidos contra los trabajadores sin tierra y que Brasil impulsará una reforma agraria integral que permita restablecer los derechos económicos y sociales en el campo.

Del Señor Presidente muy Atentamente
Coordinación Internacional Vía Campesina