27 de agosto del 2003

BOGOTA (Reuters) --
Los familiares de un grupo de políticos y militares secuestrados por la principal guerrilla de Colombia pidieron el martes al gobierno un acuerdo que permita su liberación, después de que un jefe rebelde amenazó con ejecutar a los rehenes ante una eventual operación de rescate.

"Es realmente angustioso ver las imágenes en televisión, demuestra una tristeza infinita, la impotencia de sentirse inermes, casi que han perdido la esperanza de volver a la libertad", dijo el ex senador Jaime Lozada, esposo de Gloria de Lozada, quien lleva dos años secuestrada.

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) retienen a más de 60 personas entre dirigentes políticos y militares, a quienes buscan intercambiar por unos 5.000 rebeldes encarcelados en las hacinadas prisiones estatales.

En el grupo de rehenes en poder de la guerrilla se encuentran la ex candidata presidencial, Ingrid Betancourt, un ex gobernador, un ex ministro, 12 diputados regionales, tres estadounidenses, cinco ex legisladores y alrededor de 50 efectivos de las Fuerzas Armadas capturados durante combates.

La situación de los rehenes volvió al primer plano de la atención de los colombianos luego de que el lunes en la noche un canal de televisión mostró un reportaje en el que aparecieron 32 de los rehenes que las FARC buscan canjear.

El gobierno del presidente Alvaro Uribe dice que está dispuesto a negociar un acuerdo humanitario con la condición de que en el mismo se involucren a miles de civiles secuestrados por la guerrilla, y no sólo a los políticos y los militares.

Uribe teme que al acceder a negociar con las FARC un acuerdo en las condiciones que los rebeldes imponen, se deje abierta la posibilidad de convertir el secuestro en un mecanismo permanente de presión.

Drámaticas imágenes

Colombia es considerada como la capital mundial del secuestro con cerca de 3.000 casos al año, la mayoría cometidos por la guerrilla que lo utiliza para financiar parte de su levantamiento en armas en medio de un conflicto interno de casi cuatro décadas y que deja miles de muertos al año.

En el reportaje de televisión, los secuestrados aparecieron clamando al gobierno por un acuerdo humanitario que les permita recuperar su libertad y regresar al lado de sus familias.

Los rehenes, en medio de un campamento de la selva, rodeados por gallinas y ruidos de animales exóticos, fueron grabados junto al jefe militar de las FARC, Jorge Briceño, conocido como "El Mono Jojoy".

"Como militares que son ustedes, saben bien que cuando uno tiene prisioneros la misión es preservar la vida de ellos, pero la segunda misión es que si no hay condiciones, hay que eliminarlos", advirtió el líder rebelde al referirse a una eventual operación de rescate.

A comienzos de mayo las FARC asesinaron a balazos al gobernador del departamento de Antioquia, Guillermo Gaviria, al ex ministro de Defensa, Gilberto Echeverri, y a ocho militares durante una fallida operación de rescate en las selvas del noroeste del país.

Pese a ese revés, el gobierno ha advertido que no renunciará a la posibilidad de rescatar a los rehenes.