Por Horacio Duque

La audiencia convocada por la Corte Constitucional sobre el referendo promovido por el gobierno de Alvaro Uribe ha demostrado su debil aceptación entre los colombianos, que cada día son mas escepticos frente a esta mal intencionada consulta con alcances de plebiscito napoleonico.
El evento mostró que los argumentos del Presidente, de los otros funcionarios gubernamentales y los defensores fletados en los gremios y otras entidades de dudoso origen ciudadano, son endebles y contradictorios.
No convencen y, por lo contrario, dan fuerza a quienes desde el campo de la abstención activa hemos impugnado este mamotreto confuso y mal intencionado.
Llama la atención que uno de los amigos del referendo, el exministro De La Calle, hubiese aprovechado la ocasión para exponer sólidos argumentos en oposición a la ampliación del periodo de los actuales alcaldes y gobernadores, quiza la más politiquera de las medidas incluida en el texto de la ley 796. Esta salida es el sintoma de los malos tiempos que le esperan a la trampa uribista El saldo neto de la confrontación de opiniones en la Corte permite señalar con claridad que: - Hay una contradicción entre lo que se prometió en campaña presidencial, incluida revocatoria de los actuales congresistas, y el texto que se aprobó por la aplanadora uribista del Congreso, utilizando procedimientos ilegales e inconstitucionales, como lo indicó el Procurador en su concepto sobre el referendo.
Alvaro Uribe transformó su fementido radicalismo de derecha contra la politiqueria y la amenaza de la revocatoria en la campaña del año anterior, por la desmesura del elogio de la insitución parlamentaria, hoy promocionada como "admirable" por el Ministro Londoño, quien se hunde en un mar de contradicciones, traiciones (Parody, Vargas Lleras y Hector Eli) y amenazas (Cordoba y Elejalde) de censura, lo que a la postre terminara con su artifical y ridiculo protagonismo.
- El referendo favorece los intereses antinacionales de la comunidad financiera internacional, acreedora de la monumental deuda externa colombiana, porque se pretende hacer aprobar por el pueblo el criminal Ajuste Fiscal del Fondo Monetario Internacional, el cual profundiza el modelo neoliberal causante del hambre y miseria de millones de colombianos, como lo expuso con claridad el Presidente de la CUT Fabio Arias Giraldo, en representación de millones de trabajadores.
- Con la ley 796 se pretende reorganizar el sistema político de dominación de los grupos financieros y hacendados asociados con el paramilitarismo, para profundizar un ejercicio autoritario, fascista y napoleonico del poder, como con claridad lo expuso el Senador Carlos Gaviria.
El referendo borra las minorias políticas, favorece el clientelismo de las maquinarias bipartidistas y apuntala los poderosos caciques regionales de la politiqueria, tan inclinados a los sitemas violentos de dominación política en asocio con los criminales grupos de la autodefensa que comanda Carlos Castaño, ampliamente favorecidos por la estrategia de Seguridad Democrática, que acentua la alianza estructural entre militares y paramilitares en las zonas de rehabilitación y en los nuevos batallones de soldados profesionales y aquellos localizados en zonas de alta montaña.
- Es falsa la lucha contra la corrupción que se pretende cristalizar en el referendo con el voto publico, la eliminación de las suplencias y la muerte política de los ladrones de "cuello blanco". Ya se ha señalado hasta el cansancio que basta con aplicar las normas vigentes del Código Penal y del Estatuto Anticorrucpión para dar castigo ejemplar a los bandidos que acumulan escandalosas fortunas con el fraude del patrimonio público.
Los auxilios parlamentarios y las partidas regionales, autorizadas a los parlamentarios recientemente por el Presidente, el Ministro Junguito y el Jefe de Planeación en el Plan de Desarrollo "Hacia un Estado Comunitario", que con toda probabilidad terminaran en los bolsillos de los jefes de las empresas electorales bipartidistas, ponen en evidencia la farsa de la retorica presidencial contra la corrupción.
- Las preguntas contendidas en el texto del referendo son manipuladoras e impiden la libre expresión del ciudadano. Todas inducen la respuesta favorable al gobierno.
- Lo mas aconsejable es la abstención activa para derrotar este esperpento antidemocrático y neoliberal porque sus consencuencias aumentan la ruina y desesperación de las grandes mayorias nacionales.
Se queda, pues, sin audiencia nacional el referendo de Uribe Velez. Es lo que se concluye de la Audiencia en la Corte.