2 de enero de 2003
Venezuela: los remezones de una revolución verdadera
Rebelión
Jaime Ortiz Bustamante no es venezolano, pero después de 27 años viviendo en ese país parece que lo fuera. En 1973 era director de la Cineteca de la Universidad Técnica del Estado y allí fue detenido días después del golpe. Llegó ese mismo año a vivir su exilio en Venezuela. En sus antecedentes figura haber sido profesor de los cursos de Estado Mayor y Comando de la Guardia Nacional en los años 80, hasta donde llegó en su condición de profesor titular de la Universidad de Carabobo, donde actualmente se desempeña. Buscábamos un testimonio directo, que nos pudiera describir "en colores" el rostro cotidiano del conflicto venezolano, del paro petrolero y sus perspectivas. Ortiz llegó a Santiago por sus propios medios y tiene un nutrido programa de entrevistas y charlas. "Aquí se están tragando todo un montaje comunicacional -comenta- y es un deber moral restablecer la verdad sobre el proceso que vive Venezuela".
- ¿Cuál es la perspectiva real que tiene un referéndum para que se vaya Chávez?
"Lo que pasa es que Chávez responde que según la Constitución el referéndum revocatorio se puede hacer en agosto del 2003, cuando cumpla la mitad de su mandato. Chávez acepta un referéndum revocatorio, pero para llamar a todo el país a elecciones, de todos los gobernadores, de todos los diputados, de todos los alcaldes. Y con un agregado: 'si yo gano, no me voy a quedar los tres años que me faltan, porque voy a ir por seis de nuevo. La oposición quiso usar la figura del referéndum revocatorio con la complicidad del Consejo Electoral, pero el Tribunal Supremo de Justicia los paró". - ¿Esto acentúa el camino de la ingobernabilidad?
"Todos los días insisten abiertamente en que el paro sigue 'hasta que se vaya Chávez'. Ya no hablan del adelanto de las elecciones. Derrotados en la vía electoral, derrotados en el plano militar, lo que les queda es provocar la crisis petrolera para que EE.UU. intervenga. Todos los días andan buscando muertos, generando el clima de ingobernabilidad. Lo que se está moviendo es estrictamente una clase media con dinero, acomodada. Pero como tienen el control de los medios de comunicación, proyectan eso como si fuera la realidad de todo el país. Ellos no van a cruzar ni el centro ni el sur de la ciudad, porque ahí les va a ir muy mal. En ese país hay un 80% de pobreza, y no todos están con Chávez, pero tiene una absoluta mayoría. Y tampoco toda la clase media está contra Chávez. Por eso se acaba de formar el movimiento Clase Media en Positivo. Y están surgiendo también nuevos empresarios, porque el Estado venezolano tiene dinero para hacer obras, pero no con los empresarios de Fedecámara o esos empresarios corruptos. Por eso, esta respuesta furibunda y golpista".
La CTV y los empresarios
- Pero aparece una oposición con gran inserción popular y cuesta entender que la CTV sea de derecha. ¿Quién es quién, realmente?
"La Central de Trabajadores de Venezuela siempre fue un apéndice de Acción Democrática. Ellos siempre estuvieron muy relacionados con los empresarios. Esa alianza, que era subterránea, cristalizó ahora". -¿Cómo se eligen, cuáles son los sectores más influyentes?
"Ellos han sido muy fuertes en el petróleo y en la administración pública, que allá es muy grande y está organizada en federaciones sindicales por rama -de la salud, la enseñanza, etc. Lo que ocurre es que copiaron un sistema de sindicalismo con mafias, con dirigentes que contratan espalderos y sicarios. Para ingresar a una empresa como PDVSA, tienes que pagarles a ellos. Es un estilo de sindicalismo donde se compran los votos o se consiguen con un bate en la mano. Esto empieza en el tiempo de Rómulo Betancourt, que se dio cuenta de que el PC venezolano tenía una importante presencia entre los trabajadores, y los comenzó a arrinconar hasta obligarlos a irse a la guerrilla. Entonces, ellos aprovecharon ese espacio para apropiarse de los sindicatos a la fuerza. Fue una guerra sucia. Había mucho dinero para corromper. Te portabas bien con los dirigentes de ADECO y conseguías un cargo en el gobierno, los contratos colectivos los vendían, llegaban grupos armados y se robaban las urnas y las actas. Por eso nunca fueron legitimadas las actas de votación ante el Consejo Electoral. Los comunistas crearon una central sindical, la CUTV, pero los correteaban de las grandes empresas y quedaron reducidos a su mínima expresión". -¿Y por qué no se ha renovado esa dirigencia? Ahora hay una legislación y un marco diferente.
"Vayamos por parte. La actual CTV está muy desacreditada en la base, allí hay un proceso interno de lucha ideológica. Te voy a poner un ejemplo: la CTV tiene Fetrasalud, y no pudo parar la salud; tiene muchas organizaciones en la zona de oriente, donde están empresas básicas del Estado como el! acero, la electricidad, y no han podido tampoco paralizar eso, porque ya han perdido el respeto. Perfectamente el gobierno podría crear otra central sindical, con elecciones libres. Pero eso está en discusión, porque la pregunta es si valdrá la pena crear una nueva división o dar la lucha desde adentro de la CTV".
Desgaste opositor
- ¿En qué graficaría que el país no está paralizado, que no atraviesa una crisis de fondo?
"El transporte público funciona normalmente, incluyendo a los transportistas privados que inicialmente se habían plegado al paro. El comercio funciona en un 90%, con excepción de los barrios ricos. Los servicios básicos de luz, agua, teléfonos, funcionan regularmente. También los hospitales. En la educación los profesores van a clases, pero con la campaña del terror mucha gente ha optado por no enviar a los niños a la escuela. El paro, en los hechos, está estrictamente centrado en el petróleo. Pretenden provocar un estado de endeudamiento de Petróleos de Venezuela con EE.UU., que es el principal comprador, impedir que lleguen los barcos hasta allá y con eso provocar que EE.UU. se reserve el derecho de ir a buscar su petróleo a Venezuela, porque no se está cumpliendo con los contratos. Esa era la gran movida, pero también ya les falló, porque no pudieron paralizar completamente la empresa, y porque de acuerdo a un decreto de la Presidencia entraron a actuar como primeros protagonistas los ministerios de Defensa y de Energía y Minas".
FF.AA. con otra impronta
-Usted llegó a hacer clases en la Guardia Nacional antes del gobierno de Chávez. ¿Cómo ocurrió eso?
"Esa es una institución a donde van profesores de distintas universidades a desarrollar cátedras en Economía, Ciencias Sociales y la política contingente. Eso es clave para comprender el papel que los militares tienen en la sociedad venezolana, y que ya desde antes de Chávez era radicalmente distinto al que conocemos acá. Cuando hice esa experiencia con ellos, el coronel que era el relacionador público del instituto me pidió que llevara cortometrajes que cuestionaran la realidad venezolana. Yo iba asustado, pero la sorpresa fue que lo recibieron con mucha tranquilidad y la discusión fue riquísima. Había cerca de 200 oficiales, todos viendo la pantalla y haciendo sus anotaciones. Después todos levantaban la mano para opinar. Incluso ahí fue donde escuché las primeras diatribas contra Pinochet en una institución armada. Las FF.AA. tienen una formación ética y profesional bastante elevada. De capitán hacia arriba ellos siguen una segunda carrera, de modo que todos además son comunicador social, médico, abogado, ingeniero, etc. Eso permite que un general sea ministro de Infraestructura o del Petróleo. Incluso, conozco a dos que son físicos nucleares. Tú hablas con ellos en el plano profesional, entonces ya no son unas Fuerzas Armadas meramente represivas, sino también desarrolladas en el plano educativo y cultural. Esa es una gran diferencia con los demás ejércitos de América Latina".
No disparar contra el pueblo
"El ejército venezolano tiene un origen muy humilde. Allí hay gente del pueblo, campesinos, hijos de obreros, que se mezclan con hijos de pequeños empresarios y comerciantes. En toda esa gente hay un principio ético muy acentuado: no utilizar las armas contra su pueblo. Después de la época de la guerrilla en los años 60, esto ha sido en general así". -¿Qué tan real es el liderazgo de Chávez sobre las FF.AA.?
"Por análisis y por comprobación directa, ese liderazgo es absolutamente real. En el último golpe, los que actuaron eran generales sin mando de tropa. Los que tenían mando de tropas -desde coronel hacia abajo- se agrupan rápidamente y rescatan a Chávez en medio de un gran apoyo popular. Allá las dos cosas van parejas. Esta famosa Plaza de Altamira, todos estos generales sin mando que dieron el golpe -son más de cien- se salen de las FF.AA. Adentro queda un componente militar que está por el respeto a la Constitución, que es una especie de llave maestra para poner orden en un país que históricamente nunca lo ha tenido, donde nunca se ha respetado la ley y los tribunales han sido siempre corruptos. Y esa Constitución, aprobada con el 80 % de los votos válidos, es la que encarna el orden. A esto se suma que nunca al interior de las FF.AA venezolanas hubo una discusión muy abierta, y allí siempre se habló mucho sobre los problemas cívicos, del Estado y los ciudadanos. Ha surgido también un grupo de oficiales más avanzados, que están en una posición verdaderamente revolucionaria y se dan cuenta de que Chávez ha iniciado un proceso de transformación del país a partir de la honestidad, de la mejor gestión del Estado, de la democratización de la educación, del desarrollo del sistema hospitalario, la creación de puestos de trabajo. Para todos aparece como un hombre sencillo y de un alto valor moral, que no lo han comprado los ricos. La historia empieza así, pero en el camino aparecen estas fuerzas reaccionarias, las mafias sindicales y las cúpulas empresariales, que controlan los medios de ! comunicación y pasan por encima de la Constitución y se sientan en la ley. Pero ahora se está imponiendo el peso de la ley. Cuando salió la famosa 'bicha', que ha sido distribuida por millones a toda la sociedad, los primeros que la habían leído eran los militares. Eso les permitió devolver a Chávez al poder porque tenían los elementos legales para hacerlo".
Rodeados por el pueblo
"La gente de Chávez se ha parado frente a los cuarteles y ha entrado a conversar con todos, incluyendo a los oficiales. Y las respuestas de ellos son muy categóricas: 'nosotros defendemos la Constitución, y jamás vamos a disparar contra el pueblo'. Poco después del alzamiento de Chávez el año 92 hubo otro, y entonces vi un hecho en Maracaibo. Cuando falla también ese intento, sale un montón de gente a la carretera y venía un grupo de tanques, entonces el oficial ordena disparar contra ellos. Pero la gente comienza a gritar '!eh, yo te conozco, tú eres Pedro y eres de mi barrio. Entonces los mismos soldados le dicen al oficial que cómo van a disparar. Allá las cosas se resuelven al modo del trópico, le dicen 'no sea huevón, chico. No ve que ése es mi primo. ¡Te vas al coño de tu madre, aquí no dispara nadie.!' El oficial tuvo que irse y al final no pasó nada. Eso, Chávez lo tiene muy claro y frente a la nueva asonada golpista llamó a salir a la calle y defender la revolución. Y la gente se ha parado en las puertas de las empresas productoras y refinadoras de petróleo, en los muelles de salida y junto a los tanques llenaderos, como los que acá encuentras en Concón. Este domingo (23) Chávez va a hablar desde el llenadero que está en mi estado, en Yagua".
La base popular
-¿Qué papel juegan los círculos bolivarianos?
"Ellos difunden el ideario, la Constitución y la labor del gobierno. Se mueven en torno al desarrollo social, organizando juntas de vecinos, centros de madres, enseñándole a la gente sus derechos. Yo diría que tienen un fuerte sello socio-cultural. Ahora están concentrados en la lucha por el abastecimiento y contra la delincuencia. Han ido creando una red de organizaciones sociales. Ellos mismos son una red, y acuérdate que las redes no son verticales, y cada círculo se mueve en el espacio territorial que le corresponde. Puede ser en la comunidad educativa, en el sindicato, en una empresa del Estado o en una calle. Ellos se definen patriotas y bolivarianos. Algunos hablan ya abiertamente de ser revolucionarios. Para la última manifestación juntaron más de tres millones de personas en Caracas, es algo así como una reacción eléctrica. Ahora se están incorporando a los consejos locales de planificación popular en todos los barrios. Ahí los vecinos se juntan y establecen las necesidades, por ejemplo, de biblioteca, pavimentación, instalaciones y equipamientos de salud, y las ordenan según prioridades e inician el proceso ante el alcalde, la gobernación y el ministerio que corresponda".
Nueva economía
- ¿De qué manera se refleja esta concepción en el plano económico?
"Por ejemplo, ya existen el Banco del Pueblo, el Banco de la Mujer y el Banco Industrial, donde la gente que quiere colocar un negocio de barrio o iniciar una pequeña o mediana empresa tiene acceso al crédito. Eso también comienza a crear nuevos puestos de trabajo. Por años, en Venezuela se han descuidando los otros aspectos del desarrollo que no tienen que ver con el petróleo. Chávez está dando un fuerte impulso a la diversificación de la economía, para irse alejando del esquema de país monoproductor. Gran parte de los recursos están apuntados hacia la pequeña y mediana empresa. Los pequeños campesinos están trancados porque cuando van a los mercados con sus productos, simplemente les compran a los precios que quieren; entonces, se está creando una nueva economía donde el camino entre el productor directo y los consumidores sea más corto. Y el ejército, junto con otros sectores, está levantando megamercados, con lo que se saltan la especulación de los intermediarios. Ganan más los productores y compran más barato los consumidores. Se está dando una lucha fuerte contra la inflación y por la distribución democrática de los alimentos".
Nuevo cristianismo
- ¿Y quién es realmente Hugo Chávez, en qué se inspira?
"Chávez se nutre fundamentalmente del pensamiento de Bolívar, pero también recoge elementos de la socialdemocracia, de la teología de la liberación y del marxismo. En Venezuela nadie duda de su condición de cristiano. En una mano levanta la 'bicha' con el texto de la Constitución, y en la otra un crucifijo. Y no es demagogia, la gente sabe que es verdad. Hay un nuevo cristianismo en Venezuela, aunque la iglesia no tiene nada que ver en esto. La teología de la liberación está siempre presente en sus actos: la tolerancia, el perdón, la caridad, la amistad, el amor, la lealtad. Muchas veces Chávez termina sus discursos pidiendo la ayuda de Dios. Eso tiene un gran impacto sicológico, trae la imagen de Jesucristo junto a los oprimidos. El siempre habla de eso, y también de la experiencia chilena: 'aquí no van a hacer lo que en Chile', dice. Habla de la Revolución Cubana, de Viet Nam, de la Revolución de Octubre, y lo hace con mucha propiedad. Pero tiene claro que la historia es para revisarla, sacar lecciones y nutrirse de ella, y también que no parte con Chávez, ni con Fidel ni con Allende".
El "legado" de la IV República
En Venezuela nunca hubo mayor tiempo para formar estructuras institucionales. Las asambleas constituyentes, desde comienzos del siglo pasado, giraban en torno al dictador Juan Vicente Gómez (ejerció tres veces el poder entre 1908 y 1935). Más tarde aparece un general progresista, Medina Angarita, que le da derecho a voto a las mujeres y crea el seguro social. Ya los "Adecos" -Acción Democrática, partido de la socialdemocracia - llegan a la Presidencia con el escritor Rómulo Gallegos, que es derribado por un grupo de militares que dio paso a Pérez Jiménez, hasta el año 58. Pérez Jiménez fue derribado por otro general, Wolfgan Larrazabal, que llamó a elecciones. Asumió Betancourt y después lo suceden diferentes presidentes de Adeco y Copei -partido social cristiano-, completando el período que Chávez denomina como la IV República. En ese período había mucho dinero, se nacionaliza el petróleo, se construyen grandes obras de ingeniería, se invierte en mano de obra y tecnología para desarrollar el campo. Esta gente va favoreciendo con dineros del Estado a ciertos grupos empresariales, y ahí surge la derecha que está detrás de todo esto. Para desarrollar la agricultura se hicieron préstamos fabulosos, y Carlos Andrés Pérez condonó todas esas deudas. Después, en el último período de Caldera, antes de Chávez, quiebran once bancos, que estafaron a la gente como en Argentina. El Estado asumió toda esa deuda, y entonces comenzó esto a rodar cuesta abajo. Allí se vieron favorecidos los grupos económicos, que han sacado del país 200 mil millones de dólares. Entre ellos están familias como los Cisneros, que acá tienen inversiones en las comunicaciones. En los dos períodos de Carlos Andrés Pérez se hicieron inversiones faraónicas. También con Luis Herrera Camping, el presidente que devaluó el Bolívar el año 82. Ahí está una de las debilidades que ha tenido el proceso bolivariano, porque esta gente ahora se dedica a invertir en papeles, traficando con la moneda. El verdadero enemigo del desarrollo n! o pasa del diez por ciento de la población.