La base política del plan y los Sin Tierra
Por M.G./ PAGINA 12
Para Lula, el Proyecto Hambre Cero es un verdadero plan político, y el diseño del gabinete lo confirma.
En Seguridad Alimentaria designó a José Graziano da Silva, su experto de confianza. Graziano es un científico social reconocido en Economía Agraria y enseña en la prestigiosa Universidad de Campinas.
A Desarrollo Agrario fue Miguel Soldatelli Rossetto, de 42 años, nacido en Rio Grande do Sul. Técnico mecánico, llegó a cursar materias en Ciencias Sociales, pero su curriculum lo muestra sobre todo como un militante. A fines de los ‘70 peleó contra la conducción oficial del Sindicato de Metalúrgicos de San Leopoldo, y en 1980, a los 20 años, estuvo entre los fundadores del Partido de los Trabajadores. Rossetto formó parte de la primera dirección petista en Rio Grande do Sul, el primer Estado que llegó a gobernar el PT a través de Olivio Dutra, de quien Rossetto fue vicegobernador. Dejó de serlo en las últimas elecciones de octubre, cuando el PT perdió el Estado.
Rossetto tiene excelentes relaciones con el Movimiento de los Sin Tierra, la organización no gubernamental más importante de Brasil y una de las más masivas del mundo. Antes y después del triunfo de Lula el MST dijo que no abandonaría su método de lucha, que consiste en ocupar tierras ociosas, estatales o privadas, para negociar después asentamientos definitivos y créditos que permitan producir al menos para el autoconsumo. También confirmó su posición de que no hay salida para Brasil sin renegociar la deuda externa, propuesta que no figura en el programa inicial del PT. Pero en ningún momento la fuerza que dirige Pedro Stedile comparó, por ejemplo, a Lula con Fernando Henrique Cardoso. Es que, sin ser algo así como la rama agraria del PT, el MST tiene viejas relaciones con el Partido de los Trabajadores. Ahora tanto el MST como el PT, que son organizaciones con espíritu práctico, apuestan a una construcción común. Va más allá de una tregua aunque públicamente tome la forma de ésta.
El MST no quiere castigar a Lula sino conseguir tierras y Lula no pidió el desarme político de los movimientos sociales sino lo contrario.
Desarrollo Agrario significa, en Brasil, Ministerio de la Reforma Agraria. Cualquiera puede pensar que es una vuelta a la revolución de Octubre. Error: hasta Cardoso tenía su plan de reforma agraria para ocupar tierras improductivas, sólo que el PT se propone reemplazar la violencia por la negociación y a la vez agilizar los trámites de asentamiento.
La tercera pata del armado petista descansa en los negocios para reactivar e integrar a los empresarios nacionales. La figura visible es Roberto Rodrigues, el nuevo ministro de Agricultura, también profesor de Economía Rural como Graziano pero a la vez presidente de la Asociación Brasileña de Agribusiness.
Esas son las tres patas para terminar con el hambre de 44 millones de personas que ganan menos de un dólar por día