20 de febrero del 2003
España: Fracasa la aventura militar del "Expo-Bush" .
El autobús de la guerra se bate en retirada en Huesca
IndyACP
El Ejército Español se batió en retirada a las pocas horas de entrar en la ciudad de Huesca con un "Expo-bús" de información y reclutamiento, pese a que su intención era permanecer durante dos días en la ciudad tratando de alistar a jóvenes oscenses.
Radio Topo*Aragón-Info: El ambiente hostil que se encontró y la previsión de empeoramiento de la situación fueron los motivos que condujeron a este estrepitoso fracaso de las tropas de Juan Carlos de Borbón..
Las previsiones consistían en estacionar el vistoso "Autobús de la Guerra" en diferentes puntos de la ciudad durante el lunes (17/02/2003) y el martes..
Concretamente, por las mañanas debía situarse en diversos Institutos de Educación Secundaria (I.E.S.) y por las tardes en la explanada del Centro Cultural "Antiguo Matadero"..
El Autobús de la Guerra está decorado espectacularmente y cuenta con avanzados medios técnicos de propaganda e información. Su equipo habitual está compuesto por un oficial y tres militares pertenecientes a cada uno de los tres Ejércitos (Tierra, Mar y Aire). En la ofensiva a Huesca, estaba al mando de la Operación el Teniente Rafael Guerra..
El primer y único combate tuvo lugar en el I.E.S. Pirámide, un Instituto que en las últimas semanas ha realizado concentraciones, durante los recreos, de oposición a la guerra contra Irak, y cuyo interior se encuentra repleto de pancartas, posters y lemas de corte pacifista y antimilitarista..
A primera hora, al autobús se estacionaba en el aparcamiento del Instituto, con el permiso de su Director. En poco tiempo, la indignación se hizo notar: profesoras/es pidiendo explicaciones al Director y una avanzadilla de unas decenas de alumn@s y profesores/as delante del autobús con una pancarta, coreando consignas y gritando "Fuera, fuera". Se acercaba la hora del recreo y se había convocado a todo el alumnado y profesorado a salir a manifestarse. En la aledaña Escuela Universitaria Politécnica, mientras tanto, se estaba convocando mediante carteles otra concentración para las 12:30 horas..
Ante semejante recibimiento y siguiendo las recomendaciones del Director, que les dijo que no era "el momento más propicio", los responsables del Autobús de la Guerra decidieron hábilmente darse el piro..
Desde el Centro Cultural Antiguo Matadero, por su parte, se había cuestionado la oportunidad de que el Autobús estacionase en su explanada de entrada. El argumento ofrecido consistía en que el Centro era el lugar de reunión de la Coordinadora Ciudadana Contra las Guerras, por lo que la presencia del Autobús de la Guerra hubiera resultado "paradójica"..
Por otro lado, una ciclo-brigada de activistas patrullaba en bicicleta la ciudad buscando el Autobús, con el fin de contrarrestar sus efectos perniciosos con humor (llevaban narices de payaso) mediante pancartas con el lema "Ejércitos No" y octavillas que explicaban razones diversas para no entrar en el Ejército..
El triste Autobús de la Guerra no tenía dónde ir, por lo que, cautivo y desarmado, decidió retirarse al cercano acuartelamiento "Sancho Ramírez", donde, a salvo del pueblo soberano, se hizo fuerte y permaneció aparcado todo el día..
El teniente Guerra, antes de finalizar la mañana, dio su versión de los hechos a la prensa y expuso sus puntos de vista. En relación a la visita al I.E.S. Pirámide, declaró que "al parecer, los chavales tenían intención de manifestarse todavía en contra de la guerra y nosotros hemos preferido marcharnos antes de que hubiera ninguna protesta mayor". Sobre la anulada estancia por la tarde en el Centro Cultural "Antiguo Matadero", dijo que habían decidido que "no sería el lugar más idóneo"..
El representante del brazo armado del Capitalismo, además, se lamentaba:.
"Qué le vamos a hacer si el ambiente está así y la gente piensa que nosotros tenemos la culpa, cosa que es un error absoluto, pero cada uno piensa como quiere". "Nuestra misión es informar y no tenemos nada que ver con la guerra", dijo el teniente Guerra..
"Donde pusiéramos el autobús -continuaba el señor Guerra- había gente que, por lo visto, estaba preparada para ir a montarla, por lo que hemos querido evitar cualquier situación incómoda". "La misión que tenemos es la de informar y si no lo podemos hacer con libertad, no tiene sentido" sentenciaba el derrotado teniente, que entendía que se les negaba "la libertad de expresión" mientras se mostraba atónito, pues era "la primera ciudad" en la que les pasaba algo parecido..
L@s convocantes de la Cadena Humana en el Centro Cultural mantuvieron la cita.
A las siete de la tarde, sesenta personas se congregaron en una vacía explanada, con una temperatura bajo cero y a pesar de la ausencia del Autobús..
Las personas que habían organizado el acto repartieron unas octavillas a l@s asistentes en las que se podía ver un dibujo de un autobús portando un misil en el techo y cayendo por un precipicio con la palabra "Hundido" al lado, así como un texto en el que se informaba de la retirada del Autobús de la Guerra, añadiéndose que "Hoy el Mundo es más bonito gracias a ti", en agradecimiento a quienes secundaban la convocatoria..
La Cadena Humana se formó entonces en torno a un autobús dibujado en un cartón, donde podía leerse "Auto-Bush Informativo". Se leyó con un megáfono un manifiesto y un poema de Gioconda Belli. El acto se cerró de una forma emotiva: "dado que no hay -dijo uno de los organizadores- aquí en medio ningún Autobús del Ejército que nos lo impida, vamos a ir cerrando la Cadena Humana hasta fundirnos en un abrazo"..
La prensa local oscense se ha hecho amplio eco de todo lo sucedido en torno a la ingrata visita del Autobús de la Guerra. A modo de anécdota, cabe mencionar que algún manifestante debió de "meter un gol" al Heraldo de Huesca, pues en la noticia publicada hoy (martes) por este suplemento del Heraldo de Aragón aparecen unas declaraciones dichas por "uno de los manifestantes, Mateo Morral". Sin duda, el autor de las declaraciones se cambió la identidad por la del anarquista célebre por el intento de tiranicidio, mediante la técnica del ramo-de-flores-bomba, sobre la persona del rey Alfonso XIII el día de su enlace matrimonial el 31 de mayo de 1906.