País Vasco
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Prision atenuada para Iñaki de Juana
De Juana pone fin a 115 días de huelga de hambre tras ser trasladado a Euskal Herria Tras casi veinte años de cárcel y 115 días de huelga de hambre, Iñaki de Juana Chaos está cerca de casa. Cientos de personas le recibieron ayer a las puertas del Hospital Donostia, después de que el Gobierno español decretara la prisión atenuada. La decisión fue avalada por el Juez de Vigilancia Penitenciaria, que ha establecido que De Juana podrá irse a su domicilio con un control telemático hasta que finalice condena. El preso deja la huelga y afronta su recuperación.
Ramón Sola
Gara
Iñaki de Juana Chaos ha dormido en un hospital de su localidad, Donostia,
después de que el Gobierno del PSOE determinara por fin la concesión de la
fórmula de la prisión atenuada, la misma que rechazó la Audiencia Nacional
española el pasado mes de diciembre. Atrás quedaban casi veinte años encerrado
en prisiones situadas casi siempre a más de 1.000 kilómetros de Euskal Herria. Y
atrás queda igualmente la huelga de hambre de 115 días (antes realizó otra
durante 63 días) contra la condena impuesta por dos artículos de prensa, una
protesta que le ha situado al borde la muerte y que ha provocado una intensa
conmoción en Euskal Herria y un enorme debate político en todo el Estado
español.
Quienes pudieron visitarle por la tarde en grupos de dos personas, entre ellos
representantes de la izquierda abertzale como Arnaldo Otegi, Rafa Díez, Juan
Mari Olano o Estanis Etxaburu, apuntaron a GARA que De Juana se encuentra «muy
débil, tanto por la huelga de hambre como por el traslado», pero «mentalmente
muy bien».
En el caso de Otegi, por ejemplo, fue «un reencuentro personal después de 18
años sin vernos». Coincidieron entonces en las prisiones de Alcalá y Herrera,
cuando para De Juana se iniciaba su largo periplo por las cárceles españolas.
Otegi resaltaba que no es momento de lecturas políticas: «Lo importante ahora es
que se recupere con absoluta tranquilidad». Sí quería añadir un sentido
agradecimiento a todas las personas que se han movilizado por de Juana y todos
los presos.
El desenlace del caso se aceleró anteayer, después de que se encendieran todas
las alarmas médicas en torno a la salud del preso donostiarra. Y en muy pocas
horas, De Juana fue llevado a Euskal Herria, con todos los informes preceptivos
a su favor.
A última hora de la noche del miércoles se filtró que el Ministerio del Interior
tenía tomada la decisión de impulsar la prisión atenuada, una vez que el
Tribunal Supremo español le había comunicado que la sentencia por «amenazas»
había quedado fijada en tres años de cárcel frente a los doce años y siete meses
impuestos por la Audiencia Nacional. Para eso hacía falta el dictamen de la
Junta de Tratamiento de la cárcel de Aranjuez, donde De Juana se encontraba
recluido tras la primera huelga de hambre y el juicio. Y esta instancia dio por
la mañana, también de modo inmediato, su conformidad a la aplicación del
artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario, que establece un cumplimiento
«flexible» de la pena.
Gestiones rápidas El Juez Central de Vigilancia Penitenciaria, José Luis de
Castro, se apresuró a ratificar esta decisión, que es firme toda vez que sólo la
Fiscalía y el preso tienen capacidad de recurrirla y ninguna de ellas lo hizo,
lógicamente. Y el ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba,
argumentó en torno al mediodía que la medida se había tomado «para evitar su
fallecimiento» y que se hizo responsable de la decisión.
Para entonces, el preso ya estaba casi en Euskal Herria. En torno a las 10.00,
De Juana había salido en silla de ruedas por la puerta trasera del Hospital Doce
de Octubre de Madrid, donde ha permanecido durante los últimos dos meses y
medio. Rápidamente, la caravana se ponía rumbo a Euskal Herria, donde se habían
organizado diversos recibimientos. Tras cambiar de ruta y esquivar la cita
prevista en Etxegarate continuando por la A-68 y tomando luego la A-8 cerca de
Bilbo, la ambulancia llegó finalmente al Hospital Donostia, donde le esperaban
cientos de personas entre gritos de «Iñaki askatu!». La Ertzaintza se hizo notar
e impidió cualquier intento de acercarse al vehículo. Pero lo importante es que
De Juana estaba muy cerca de casa, y eso quedó en evidencia en las muestras de
alegría de quienes acudieron al lugar.
Poco después se confirmaba que Iñaki de Juana ha dejado su huelga de hambre.
Le queda ahora por delante un largo proceso de recuperación.
Del hospital, a casa La situación actual es la siguiente: Iñaki de Juana estará
ingresado en el hospital hasta que mejore, y después podrá regresar a su
domicilio después de más de 20 años de ausencia, con un control telemático cuyo
detalle exacto no se concreta en el auto judicial. Sí parece claro que no habrá
lugar a otras modalidades como a control policial, ni a que tenga que volver a
prisión.
Mientras permanezca en el Hospital Donostia, el estado de Iñaki de Juana será
controlado a diario por los servicios médicos del centro penitenciario de
destino (a partir de ahora Martutene), que remitiran informes a la Dirección
General de Instituciones Penitenciarias, en coordinación con los servicios
sociales.
Cuando se le conceda el alta, podrá seguir el tratamiento en su domicilio y
salir de él, aunque en principio «para asistir a consulta e ingreso hospitalario
o para el desarrollo de actividades terapéuticas».
Entre las opciones de control telemático, según precisaron agencias de
información, están fórmulas conocidas como la pulsera electrónica, pero también
caben otras como el sistema de «localización permanente» que consiste en grabar
va- rias frases en un sistema informático que luego deben repetirse cada vez que
un ordenador llama a su casa.
«Estrictamente legal» El auto del Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria
subraya que la concesión de la prisión atenuada se produce «en estricto
cumplimiento de la legalidad vigente» (la frase figura incluso en negritas para
destacarla, en un contexto en el que el PP y organizaciones afines cuestionan
que sea así).
Portavoces del PSE y el PSN remarcaron la plena legalidad de la medida.
El juez añade en paralelo que la decisión debe tomarse «con independencia de la
persona en quien se concreta, incluso de su participación activa o no en la
situación objetiva que provoca la aplicación de los citados principios».
Se da la circunstancia de que las sentencias aplicadas a De Juana se han basado
precisamente en su identidad. Así lo han reconocido tanto la Audiencia Nacional,
en su sentencia, como la Fiscalía General del Estado, que pidió la condena.
Agencias de información reseñaron que el artículo aplicado a De Juana es el
mismo que se usó en su momento para excarcelar a condenados por guerra sucia o
corrupción como Rafael Vera o Luis Roldán. En este caso, el deterioro físico de
De Juana era evidente tras más de medio año sin ingerir alimentos entre las dos
huelgas de hambre. Y el alcance del mismo quedó claro tanto en los informes del
Hospital Doce de Octubre como en las reveladoras imágenes publicadas por ``The
Times''.
El Juzgado admite expresamente en su auto que Iñaki de Juana se encontraba en
situación límite, «con alimentación forzosa que puede provocar lesiones
orgánicas irreversibles que incluso podrían producirle la muerte súbita».
Así se señalaba, según hace constar, en un nuevo informe médico del Hospital
Doce de Octubre fechado el pasado lunes, y que viene a ratificar otros
dictámenes previos.
VISITAS VESPERTINAS De Juana fue visitado por la tarde en grupos de dos
personas. Una de ellas era Arnaldo Otegi; se reencontraron después de 18 años.
Reacciones Olano afima que ha sido «un logro de la lucha popular" «Una victoria
popular». Así calificó Juan Mari Olano, portavoz de Askatasuna, la decisión
hecha pública ayer por el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, de
conceder a Iñaki de Juana la prisión atenuada.
Askatasuna afirmó «clara y rotundamente» que el «logro de excarcelar» a Iñaki de
Juana corresponde tanto a la lucha del propio preso como a la llevada a cabo por
la ciudadanía..
A las puertas del hospital donostiarra, Askatasuna quiso felicitar a la
ciudadanía y aseguró que de no ser por esa lucha De Juana continuaría cumpliendo
una condena de doce años por dos artículos de opinión. Olano aseguró que éste ha
sido un «ejemplo» que «revaloriza la lucha».
El representante de Askatasuna también recordó la situación que vive el
Colectivo de Presos Políticos Vascos y afirmó que detrás de estas situaciones
existe «toda una política penitenciaria que hay que desactivar».
En esta línea, Olano emplazó al Gobierno español a «abandonar la confrontación y
apostar en clave de resolución del conflicto».
El representante de Askatasuna compareció ante los medios junto a la compañera
de Iñaki de Juana, Irati Aranzabal, poco después del ingreso del preso en el
Hospital Donostia. Tras dar a conocer la decisión de que De Juana dejaba la
huelga de hambre, Olano trajo a colación la situación de los presos enfermos y
de los ciudadanos vascos que siguen en prisión después de haber cumplido la
totalidad de la condena, y exigió su inmediata liberación.
Oihana LLORENTE Reacciones Rubalcaba asume como propia la decisión que todos los
grupos aprueban salvo el PP El ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba,
fue el encargado de comunicar públicamente el cambio de régimen penitenciario de
Iñaki de Juana y lo hizo poniendo especial énfasis en que la decisión la había
tomado él personalmente. Además incidió en que los motivos son meramente
humanitarios -«evitar su muerte y favorecer su recuperación»- y en que todo se
ajusta a la legalidad, y no perdió la oportunidad de recordar que el PP
excarceló a presos vascos con mayores condenas. Por cierto, en toda la rueda de
prensa insistió en hablar de Ignacio y no de Iñaki.
En cuanto a la asunción de toda la responsabilidad sobre la decisión, Alfredo
Pérez Rubalcaba aseguró que ha «ponderado cuidadosamente las consecuencias» y
que ha «meditado mucho sobre las consecuencias de hacerlo y también sobre lo que
hubiera podido pasar si no lo hubiera hecho». Mostró su «convicción» de que en
caso de no haber adoptado esas medidas Iñaki de Juana «hubiera fallecido en las
próximas semanas» El ministro señaló que es «perfectamente consciente» de que
«muchos ciudadanos podrían pensar que no merece ese tipo de tratamientos, porque
él no tuvo piedad de sus víctimas». Incluso afirmó que a quienes así piensan «no
les falta razón». Pero a continuación esgrimió que «una de las diferencias entre
los terroristas y los que no lo somos es que a nosotros nos importa la vida, la
de todas las personas».
Para responder a quienes señalan que el preso vasco se encontraba a punto de
morir por decisión propia, Rubalcaba adujo que los principios constitucionales
obligan a Instituciones Penitenciarias a preservar la vida incluso de aquellos
que no quieran conservarla.
El ministro puso todo su afán en recordar que De Juana está preso por un delito
de amenazas y que le queda por cumplir «algo más de un año». De no ser así,
aseguró que no hubiera tomado la decisión. Una decisión que, insistió también
una y otra vez, «no es siquiera un tercer grado» y con la que cumplirá su
condena.
Rubalcaba reiteró la legalidad del cambio, avalado por la junta de tratamiento
de la cárcel de Aranjuez, por el fiscal y por el juez de Vigilancia
Penitenciaria de la Audiencia Nacional. Según el ministro, el Estado tiene que
ser «firme e inteligente» y, a su entender, en este caso está actuando con
inteligencia.
Durante la mañana de ayer y antes de comparecer públicamente, el ministro de
Interior informó de la decisión a todos los grupos parlamentarios y todos ellos,
salvo el PP, le ofrecieron su respaldo e hicieron pronunciamientos públicos
aprobatorios.
Como cabía esperar, los portavoces del PP se expresaron en términos
apocalípticos. Su presidente, Mariano Rajoy -de visita en Gasteiz para presentar
la candidatura de Alfonso Alonso a la alcaldía- anunció que pedirá la
«inmediata» comparecencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez
Zapatero, en el Congreso de los Diputados para que «explique y reconsidere» la
decisión. «Hoy se ha creado una deuda de justicia, tenemos que repararla y les
pido a los españoles que me ayuden», exclamó Rajoy, y concluyó que «ante la
debilidad de Zapatero, ETA ha conseguido doblegar al Gobierno de España».
I. IRIONDO Lakua no quiere verse salpicado por este caso En cuanto se conoció el
cambio de situación penitenciaria de Iñaki De Juana, el Gobierno de Lakua
convocó a los medios informativos para aclarar que la responsabilidad de este
caso corresponde el Ejecutivo español y que no admitirá verse envuelto en el
mismo.
La portavoz del Gabinete, Miren Azkarate, recordó que esta situación «es fruto
de la iniciativa que en su día adoptó el Gobierno Socialista. El entonces
ministro de Justicia no tuvo reparo alguno en afirmar públicamente que se
construirían nuevas imputaciones para impedir la libertad que legalmente le
correspondía a De Juana», por lo que ahora «quien ha provocado esta situación
incomprensible es quien debe resolverla». Ante ello, aclaró que «la situación de
régimen carcelario de De Juana Chaos depende única y exclusivamente del Gobierno
español y es a él a quien le corresponde acabar con el despropósito que este
caso está provocando».
El Gobierno de Lakua consideró necesario dejar constancia desde el primer
momento de que «no vamos a admitir que se responsabilice a las instituciones de
este país de la situación penitenciaria de De Juana Chaos, cuando el Gobierno de
Zapatero ha negado reiteradamente y sin justificación la transferencia a Euskadi
de las Instituciones Penitenciarias». Y consideró necesario explicar a la
ciudadanía que «De Juana Chaos está adscrito al Centro Penitenciario de
Martutene y es a su dirección exclusivamente a quien corresponde establecer el
régimen de custodia, visitas, etcétera, que pueda tener mientras permanezca
ahí».
Además, Miren Azkarate denunció que «ni el Departamento de Sanidad ni ningún
centro sanitario vasco han recibido ninguna comunicación oficial sobre el
traslado ni se ha recibido información del Hospital Doce de Octubre, cuando lo
lógico y habitual es que exista un intercambio de datos sobre la situación
clínica de la persona que se traslada».
Ya por la tarde, el Departamento de Interior informó que el Juzgado de
Vigilancia había establecido que el régimen de visitas será el que fije el
centro hospitalario en base a criterios médicos. I.IRIONDO