NO A
LAS MINAS
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La industria minera y su nueva estrategia para lavar su cara contaminante a través de la educación
Minería en los manuales infantiles
Una empresa distribuye un juego de mesa en el que gana el que extrae más. Un
manual de cuarto grado habla loas no contaminantes de la industria. En La Rioja
prohíben provocar críticas al sector en las escuelas. Universidades que apoyan
la minería.
Darío Aranda
Página 12
Un manual de cuarto grado asegura que la minería no contamina y señala como
lugar de estudio el sitio de una compañía del sector. Una empresa canadiense
distribuye juegos de mesa donde resalta los beneficios de extraer oro, plata y
plomo. Un gobierno cuyano es acusado de prohibir que los colegios brinden
noticias críticas sobre la actividad extractiva. Un paso adelante se ubica
Minera Alumbrera –el mayor emprendimiento en explotación de la Argentina, con
una decena de denuncias por destruir el medio ambiente y su presidente procesado
por contaminación–, que dicta cursos a docentes sobre ecología y obtiene premios
por "contribuir a las mejoras educativas". Las universidades nacionales también
acompañan al sector minero: proveen servicios, realizan estudios de factibilidad
económica y les aportan estrategias de legitimación social. Las asambleas
ciudadanas explican que las mineras, a través de la educación y en colaboración
con las facultades, buscan revertir el rechazo que genera la actividad en un
centenar de pueblos afectados.
El libro Chubut pura naturaleza fue distribuido en 2006 por el Ministerio de
Educación de Chubut en las escuelas. En su página 281 sobresale el subtítulo
"Contaminación del agua y la tierra". En ese apartado recomienda, para
"investigar sobre el tema", dos sitios de Internet. El portal