VOLVER A LA PAGINA  PRINCIPAL
Heinz Dieterich Steffan

15 de febrero del 2003

Al heroico pueblo boliviano
América Latina se levanta

Heinz Dieterich Steffan

Los levantamientos populares en América Latina se multiplican y entre muertos y heridos, los gobiernos neoliberales se caen. Carlos Andrés Pérez en Venezuela, Yamil Mahuad en Ecuador y Fernando de la Rúa en Argentina, ya están fuera del poder. Gonzalo Sánchez de Losada en Bolivia y Lucio Gutiérrez en Ecuador se encuentran al borde del abismo..
Con esta coyuntura de los pueblos vuelve a la agenda del día el eterno problema latinoamericano de la condición subjetiva de la transformación. Hoy, como en los años sesenta, las condiciones objetivas para la transformación profunda de la economía y de la política están dadas. No existen, sin embargo, en la mayoría de los países, los actores sociales capaces de llevar a la praxis tan necesaria evolución democrática..
En Argentina, la rebelión de las clases populares y medias fue capaz de desalojar a un gobierno neoliberal. Sin embargo, no ha logrado construir una vanguardia que pudiera llevar el triunfo de la calle hacia la superestructura política del sistema. Los esfuerzos de las Asambleas de barrio, de los "piqueteros", de los sindicatos independientes e intelectuales críticos, no se han concretizado aún en una vanguardia que pudiera ganar las próximas elecciones y darle un viraje de 180 grados al modelo entreguista de los partidos tradicionales..
El caso más patético de la condición subjetiva es el Ecuador. El Presidente del país, Lucio Gutiérrez, prometió el jueves a Wall Street, convertir al Ecuador en "un lugar seguro para colocar capitales"; el martes había expresado al Presidente guerrerista George W. Bush su deseo de convertirse en el "mejor amigo y aliado" de Estados Unidos y en una reunión con el Fondo Monetario Internacional (FMI) firmó una carta de intención, que entrega el país virtualmente al capital transnacional..
Ya en el contexto del nombramiento de la nueva Ministra de Relaciones Exteriores, Nina Pakari, Gutiérrez había aceptado como fait accompli (hecho consumado) la base estadounidense de Manta, la dolarización a través de la Comunidad Andina y la implementación del Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA). Esa actitud ha sido caracterizada por las bases sociales en el Ecuador como una "traición". Sin embargo, no lo es. Es la práctica de una persona que nunca debió llegar a la presidencia, porque era previsible desde el inicio qué tipo de política iba a implementar..
El ascenso del coronel a la Presidencia comenzó con el mito de haber sido el héroe del levantamiento indígena-popular-militar del 21 de enero del 2001. Esto es falso. El movimiento de los militares patrióticos fue, esencialmente, un movimiento de capitanes y suboficiales, no de coroneles. Si se quisiera hablar de héroes militares en este movimiento, habría que hablar de su organizador, el Capitán de las Fuerzas Especiales, César Díaz, condecorado como Héroe de la Patria por su actividad en la Guerra del Alto Cenepa, contra el Perú..
El ascenso siguió viento en popa por el apoyo material que Lucio Gutiérrez logró de fuerzas políticas bien intencionadas, pero poco informadas, de tres países latinoamericanos. El apoyo financiero del primer país, llamémosle "A", le permitió "arrancar" tempranamente con una campaña electoral, mientras que el resto de los militares patrióticos sólo recibió apoyo limitado de sectores empresariales ecuatorianos simpatizantes..
Sin embargo, la gran ayuda financiera del coronel se perdió, cuando en el país "A" se produjo un golpe de Estado y el candidato presidencial Lucio Gutiérrez se distanció públicamente en la televisión ecuatoriana del gobierno de "A", que solidariamente le había estrechado la mano. "A" investigó el suceso, lo discutió con el coronel, lo consultó con un gobierno amigo y decidió, cancelar la ayuda..
En el país "B", militares patrióticos en retiro le ayudaron al postulante en la campaña presidencial con recursos humanos, y del país "C", le llegaron diversos tipos de ayuda material y, en forma limitada también, recursos humanos. Sin embargo, nada de esto pudo sustituir el apoyo perdido de "A", hecho por el cual el candidato enfiló sus pasos hacia una isla de Extremo Oriente, donde encontró el vital financiamiento para la campaña. Como premio adicional del viaje enriqueció su acervo político con las virtudes y la sabiduría de la Kuomintang de Chiang Kai Chek, experiencia que posiblemente le hace pensar que, Wall Street mediante, puede convertirse en un nuevo tigre asiático..
Haciendo abstracción de algunas anécdotas sobre ética y principios, la campaña electoral ya debía ser un aviso sobre lo problemático de la candidatura del pretendiente. Tanto la derecha orgánica del Ecuador, el Partido Socialcristiano del viejo oligarca costeño León Febres Cordero, como la Casa Blanca en Washington, tuvieron una actitud sumamente conciliadora, casi nazarena, con el excoronel rebelde, tratando de no interferir con su flamante carrera política..
Pese a todo este apoyo activo y pasivo, la verdadera fuerza nacional del candidato se reveló de una manera decepcionante en la primera vuelta electoral, en la cual apenas consiguió alrededor del 12 por ciento del electorado inscrito del país. Un candidato tan débil, sin proyecto nacional, sin equipo, sin partido, sin simpatía entre los generales y sin principios firmes, era, obviamente, un candidato idóneo para Washington. Y como el pragmatismo de Washington se equivoca pocas veces, hoy tiene su "mejor amigo y aliado" en el Ecuador, en una estrecha competencia con Tony Blair en Londres..
Un militar retirado del país "B" definió la situación con claridad. "Lucio Gutiérrez es para el Ecuador, lo que fue Toledo para el Perú", decía. "Una pieza de recambio." Y agregó: "Todo militar necesita un superior. El de Lucio está en Washington"..
Identificar al coronel Lucio Gutiérrez con el coronel Hugo Chávez, tal como suele hacer la prensa internacional y ciertos intelectuales, es un error. El único "parentesco" que existe entre el presidente del Ecuador y el de Venezuela, es su grado y su uniforme militar..
Hugo Chávez es una persona de principios, nacionalista y democrática. No ha sabido desarrollar adecuadamente la cultura política de los cuadros y organizaciones bolivarianas; no ha sabido hacer alianzas ni desarrollar un proyecto nacional para los pequeños y medianos empresarios y la clase media venezolana; ha subestimado el poder de los medios y la necesidad de la solidaridad internacional; tiene una deficiencia gerencial en el Estado heredado; pero todas esas flaquezas están generando dialécticamente sus antítesis, sustituyendo, en parte, el proceso objetivo, las funciones del líder..
El fallido golpe de Estado militar del 11 de abril del 2001 y el fracasado golpe petrolero en PdVSA, han generado un nuevo nivel de conciencia en la sociedad venezolana. Todavía no se puede hablar de una vanguardia a la altura de los desafíos, pero es indudable que se ha generado un proceso de maduración, de mayor realismo y de menor autosuficiencia, en muchos cuadros de la revolución bolivariana..
En Bolivia, la gran crisis de los últimos días ha debilitado estructuralmente al gobierno represor de Sánchez de Losada que tiene el triste record de haber matado a más de 50 luchadores sociales en sus siete meses de gobierno, además de cientos de heridos. Sánchez de Losada es, por supuesto, sólo un testaferro de los verdaderos operadores del poder, quienes, al estilo del régimen de Fujimori, mueven el poder detrás de las fachadas..
El debilitamiento del gobierno neoliberal del "Goni", cuyos escuadrones de la muerte mataron en la modalidad de francotiradores a los manifestantes del levantamiento popular en La Paz, fortalece la condición subjetiva de la transformación boliviana, cuya esperanza descansa sobre tres actores sociales: la Central Obrera Boliviana (COB), el Movimiento al Socialismo (MAS) de Evo Morales y el movimiento indígena lidereado por Felipe Quispe Mallku..
Para que estos sujetos políticos puedan llevar el país hacia una democracia real, existen dos condiciones: a) la adaptación de un proyecto nacional-regional de cambio y, b) su unificación. Lo primero exige la integración inmediata en un Bloque Regional de Poder, que sólo puede ser el MERCOSUR ampliado, profundizado y democratizado. Lo segundo presupone la moderación de la tendencia indigenista en la política de Mallku y la superación de diferencias secundarias entre la COB y el MAS..
La maduración de los sujetos de cambio, tanto en su teoría como en sus dimensiones prácticas, es lenta. De hecho, es parte de las condiciones objetivas de la transformación y como tal, no puede violentarse su desarrollo..
Con todo, la condición subjetiva avanza en la Patria Grande. Tal como pueden atestiguar Carlos Andrés Pérez, Yamil Mahuad y Fernando de la Rúa..