"Foro
Social Mundial 2005 en Porto Alegre (Brasil)" del 26 al 31 de enero
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Violencia contra mujeres en el Foro Social Mundial
Como establece su carta de principios, "El Foro Social Mundial es un
espacio de debate democrático de ideas, profundización de la reflexión,
formulación de propuestas, cambio de experiencias y articulación de movimientos
sociales, red, ONGs y otras organizaciones de la sociedad civil que se oponen al
neoliberalismo y al dominio del mundo por el capital y por cualquier forma de
imperialismo, y buscan la construcción de una sociedad planetaria que tiene el
ser humano como el centro". (carta de principios)
Argentina.indymedia
La edición 2005 del Foro contó con la presencia de 180.000 asistentes, un
número mayor que las ediciones anteriores, 40.000 de ellxs acampando en el
Campamento Intercontinental de la Juventud. En el cierre, el 31 de enero, se
expresaban estas palabras: "Esta quinta edición del Foro Social Mundial ha
empezado como expresión de la diversidad planetaria, la polifonía de voces que
se encuentran en deseos universales de tolerancia, justicia, paz, igualdad.
(...) Este año, por primera vez, el Campamento de la Juventud se ha incorporado
a la geografía del Foro, innovando las prácticas comunitarias y de autogestión y
radicalizando la defensa de los derechos humanos." ( texto leido en cierre
del FSM 2005)
Pero lejos de los principios y las palabras grandilocuentes, otras cosas
sucedían en el Foro:
El 29 de enero se realizó una manifestación en el Foro denunciando la violencia
contra las mujeres producida en el Campamento de la Juventud. Mientras se
concentraban, muchas mujeres relataban los abusos y agresiones de las que fueron
objeto. Las mujeres no tuvieron la libertad de moverse de un lado a otro en el
campamento porque eran constantemente asediadas. Una joven estaba volviendo a su
carpa cuando fue agredida por un hombre de 19 años que al no encontrar respuesta
a sus insinuaciones comenzó a golpearla, produciéndole fracturas en la nariz y
fuertes golpes en el rostro. Mientras la joven todavía estaba siendo atendida,
el atacante ya había sido liberado.
Se vivieron situaciones violentas en espacios que otros años habían sido de
convivencia: las mujeres que se bañaban en malla en las duchas colectivas al
aire libre (instaladas como refuerzo debido a la enorme cantidad de personas)
tuvieron que soportar el asedio de hombres que se masturbaban delante de ellas.
Fueron confirmados más de 90 casos de abuso sexual de mujeres que transitaban
por el Foro, sin que estos hechos provocaran la menor atención del Comité
Organizador ni de lxs asistentes al Foro. Al no recibir respuesta del Comité
Organizador, las mujeres organizaron un mecanismo de defensa llamado las
"brigadas lilas". Estas brigadas estaban compuestas por mujeres que ayudaban a
las mujeres que sufrían cualquier tipo de abuso dentro del campamento. Las
voluntarias de las brigadas estaban identificadas con una cinta color lila que
estaba atada en su brazo o en su cabeza.
Muchas de las personas que participaron en el Foro Social Mundial son militantes
de un sinnúmero de organizaciones sociales, políticas que se reconocen de
izquierda o comprometidas con las luchas del campo popular, que se plantean la
construcción de otra sociedad, basada en principios humanistas y no
capitalistas. Sin embargo, lo que demuestran estos hechos es que existe una
escisión entre los discursos acerca de la liberación y la búsqueda de un mundo
distinto, y las prácticas efectivas sobre las que se debería construir ese otro
mundo que el Foro declara posible: algunas personas que se juntaron para
proponer alternativas a la explotación del hombre por el hombre, no tuvieron
problemas en intentar explotar a mujeres, en abusar de ellas y en no
reconocerles la libertad ni de elegir, ni de circular libremente. Si se busca
contruir una sociedad justa, no debe haber explotación de clases, pero tampoco
debe existir opresión ni violencia hacia las mujeres. Difícilmente pueda
construirse una sociedad justa e igualitaria, sometiendo al 52 % de la población
mundial.
En este sentido, el Foro Social y, en general, los espacios de efectivo
ejercicio de la autonomía de las organizaciones y lxs individuxs, deben realizar
una profunda reflexión acerca de la sociedad que queremos construir, y cómo
vamos en la práctica haciendo reales esos valores en nuestra vida y acciones,
tanto de militancia como cotidianas.
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