Compañeras
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Las maquiladoras: cárcel de mujeres
Gustavo Castro Soto
CIEPAC
En las maquiladoras no dejan tomar agua para evitar que las trabajadoras
abandonen sus puestos de trabajo (además los baños y el agua escasean). Si se
abandona, la trabajadora sólo tiene permitido 5 minutos para ir al baño,
mientras que otra tiene que cubrir el puesto de trabajo para que la producción
no se detenga.
En Chiapas no han llegado las maquiladoras tan rápido como se esperaba ni al
mismo ritmo tan acelerado como la está siendo la migración de indígenas y
campesinos hacia los Estados Unidos; ni al mismo ritmo como el crecimiento tan
fortalecido de la autonomía indígena.
En el contexto de la búsqueda de alternativas e intercambio de experiencias,
cuatro indígenas y campesinos de Chiapas, dos mujeres y dos hombres, viajaron en
el mes de noviembre de 2004 al norte del país, a las tierras de las
maquiladoras, con el fin de participar en el 15 Aniversario de la Coalición Por
la Justicia en las Maquiladoras (CJM). Luego de esta rica experiencia una de
ellas afirmó: "Esto es como una cárcel, prefiero unas tortillitas en mi
comunidad que vivir con maquiladoras".
En la frontera norte de México, en el estado de Tamaulipas, el corredor
maquilador es impresionantemente enorme. Tan sólo en la ciudad de Reynosa
existen 10 parques industriales con 170 maquiladoras y emplean miserablemente a
73 mil trabajadoras y trabajadores, gran parte provenientes del estado de
Veracruz. La mayoría es industria electrónica y automotriz. Estas mismas
maquiladoras igual hacen volantes para automóviles que sirven para una u otra
marca.
En los parques industriales el gobierno les pone todo a su servicio con el
dinero del erario público: alumbrado e instalaciones eléctricas, agua, calles y
pavimentación, servicios de drenaje o desagüe a los ríos o colonias y ejidos
vecinos, servicios de telefonía, construcción de naves para que se instalen; no
pagan impuesto predial e incluso se les pone su caseta de vigilancia con
policías que prohíben la entrada a cualquiera. Mientras en los pueblos, colonias
y ejidos vecinos viven en la miseria, pagan impuestos y rentas por sus casas; no
cuentan con servicio de agua ni luz ni muchos menos vigilancia de la policía que
procure la seguridad pública. En la maquiladora de San Cristóbal de las Casas,
Chiapas, igual, ni el millonario dueño paga salarios de los trabajadores, ni
agua ni impuesto predial. Eso lo pagamos los ciudadanos con nuestros impuestos.
Con la experiencia en Reynosa nos dimos cuenta de la miseria en que vive la
población, la mayoría mujeres, en los infiernos de las maquiladoras. En estas
maquiladoras no aceptan a personas mayores de 30 o 35 años confinando al
desempleo a los mayores de esta edad. Tampoco quieren personas con más
escolaridad porque le temen a la capacidad de organización o de defensa de sus
derechos. O sea, los quieren ignorantes como si se necesitara sólo de estudios
para saber lo que es injusto. Incluso hay maquiladoras que contratan a niñas de
hasta 13 años de edad. A las mujeres les exigen la prueba de embarazo al
solicitar el empleo y, una vez aceptadas, son revisadas cada período menstrual
para asegurarse que no estén embarazadas. Muchas maquiladoras cambian de nombre
constantemente para crear "otra" maquiladora y así no pagar las utilidades a sus
trabajadoras al final del año.
En las maquiladoras no dejan tomar agua para evitar que las trabajadoras
abandonen sus puestos de trabajo (además los baños y el agua escasean). Si se
abandona, la trabajadora sólo tiene permiso 5 minutos para ir al baño, mientras
que otra tiene que cubrir el puesto de trabajo para que la producción no se
detenga. Las mujeres tienen que cumplir con una cuota de producción cada día, de
no lograrlo son despedidas. Por tanto, deben mantener una producción continua
repitiendo el mismo movimiento todo el tiempo para pegar una asa de bolsa o
coser una cierta pieza de una prenda de vestir. Esto también se refleja en el
hecho de que las exportaciones de las maquiladoras en los primeros cinco meses
de 2004 fueron 21.8% mayores a las del mismo lapso de 2003: Las ventas totales
crecieron 21.1 %.
Las trabajadoras ganan a la semana 250 pesos y las que más 400 pesos. Al mismo
tiempo tienen que pagar el alquiler de las casas que generalmente oscilan en los
1,500 pesos y 2 mil pesos como mínimo y gastan otros 500 pesos mensuales para
trasladarse al parque industrial donde está la maquiladora. Todo lo que ganan se
les va en renta de la casa y transporte. Muchas de ellas prefieren vivir en las
casuchas que se instalan alrededor de las maquiladoras para que la empresa tenga
cerquita la mano de obra barata y ellas no gastar en transporte. Con razón ahora
se entiende el concepto de "Maquila" que proviene del árabe y significa "porción
de grano, harina o aceite que corresponde al molinero por la molienda".
Las ganancias de las empresas en función del pago a sus trabajadores es inmoral.
Por ejemplo, por una camisa marca GAP un persona en Canadá paga 34 dólares, y a
la obrera que las hace en El Salvador gana 27 centavos de dólar por
confeccionarla. La Red de Solidaridad de la Maquila con sede en Toronto, Canadá,
calcula que el presidente de la empresa Nike gana 215 millones de dólares al
año, que equivale a 10 veces las ganancias totales de 55 mil trabajadores
indonesios.
Si alguna de las empleadas trabaja más turnos y por tanto gana más dinero, se le
inventan varios descuentos para bajarle el sueldo al mínimo que no obligue a la
maquiladora a mayores prestaciones sociales o pago de impuestos. Por ejemplo le
pueden descontar una cuota por la renta del espacio que usa para trabajar, o le
descuentan el servicio de la cafetería o la comida del comedor de los
trabajadores –aunque no haya usado ese servicio y lleve su torta todos los días
para comer-. Para la comida solo cuentan con media hora. Por si fuera poco, los
trabajadores deben de cantar el himno de la empresa japonesa o de la que sea
antes de iniciar el trabajo o durante él. De no hacerlo son despedidos. Con
estos himnos se resalta la bondad de la empresa con el trabajador.
Los trabajadores de la maquila de abrasivos mantienen las manos negras por el
aceite hasta luego de dos meses de haber abandonado el empleo. Por lo general el
equipo de seguridad es nulo. Hay mujeres que les han quedado amputados los dedos
por la maquinaria y que nunca fueron indemnizadas y continúan trabajando en la
misma maquila. En el caso de las mujeres embarazadas los médicos les mienten
sobre la fecha del parto para lograr que sigan trabajando lo más que se pueda y
pierdan los días a los que tienen derecho sin trabajar y con sueldo. "Hay
compañeras que han parido en la maquiladora y de ahí al hospital" –asegura una
de ellas.
Las instalaciones son verdaderos hornos cuando ya de por sí en Reynosa la
temperatura llega hasta los 40 grados centígrados. Dentro de la nave de la
fábrica el calor es aún más sofocante y puede no haber más de dos o tres
ventiladores sencillos para todo el personal hacinado. Si alguna trabajadora "no
coopera" simplemente el "supervisor" no le renueva el contrato que se hace
mensual o cada tres meses. El hostigamiento sexual es el pan de todos los días.
En algunas maquiladoras les obligan a las trabajadoras a tomar el medicamento "Naproxen"
antes de salir (incluso a las embarazadas) para que no les duelan los músculos,
en otras les obligaban a tomar día a día un anticonceptivo o en otras pastillas
que mantienen acelerado el cuerpo para que aguante el ritmo de trabajo.
La dependencia es total. En las zonas urbanas está prohibido que las casas
habitación puedan tener pollos, cerdos u otros animales domésticos para la
alimentación como alternativa para poder comer. Cuando los trabajadores logran
un crédito para su casa de interés social, se ven obligados a obedecer todo lo
que la empresa maquiladora les pida sin exigir nada, ya que tienen que pagar su
casa. Te tienes que portar bien. Es un círculo vicioso.
La contaminación de los parques industriales de maquiladoras es grave. Una
fábrica de químicos de Dupont deja al aire libre sus desechos tóxicos lo que ha
provocado nacimientos de niños con espalda bífida. Las enfermedades mortales
abarcan a todos los pobladores del ejido que han luchado con demandas incluso a
nivel internacional sin que nadie pueda hacer nada. La impunidad con la que
gozan las maquiladoras es total.
Todos los sindicatos están comprados por las empresas maquiladoras. Las
maquiladoras no reciben al trabajador o trabajadora por su cuenta sino por medio
del sindicato. La trabajadora tiene que acudir al sindicato y éste le designa la
empresa, el parque industrial y el horario que le toca (hay tres turnos: de 7 de
la mañana a 5 de la tarde; de 5 de la tarde a 2 de la madrugada; y de 2 la
madrugada a 11 de la mañana). Los sindicatos no defienden a la trabajadora sino
a la empresa. Sus líderes comprados hacen el trabajo sucio incluso de usar la
violencia para desalojar a trabajadoras que hagan alguna huelga y defender los
intereses de los trabajadores. En muchas ocasiones el sindicato no elabora con
la empresa maquiladora los contratos correspondientes de sus trabajadores
afiliados, de tal modo que ante demandas de los trabajadores simplemente no hay
contrato.
En el caso de una trabajadora cuyo turno inicia a las 7 a.m., se levanta a las 4
de la mañana para estar a las 5 de la mañana en el lugar por donde pasa el
autobús (para aquellas maquiladoras que recogen a los trabajadores) y para lo
cual debe caminar mucho; el autobús hace el recorrido tal que llega antes de
iniciar el turno. Si pierde el autobús pierde el día porque no hay otro
transporte público a las maquiladoras que quedan a muchos kilómetros fuera de la
ciudad o zona urbana, y posiblemente el empleo ya que tiene tres oportunidades
de no llegar.
Las empresas maquiladoras se cambian de parques industriales en la región o a
otro estado fronterizo. Desmontan con facilidad su maquinaria y dejan la nave
para que otra llegue en cualquier momento. O de plano se están yendo a China. Y
no hay otra opción. Este es el peor escenario que se vislumbra para el 2005 y
con ello una crisis de empleos y aumento de la pobreza sin precedentes. Es
posible que toda esta oleada de desempleados que se generarán en el 2005 ahora
que China entra en el mercado de la OMC sin restricción de aranceles, quieran
pasar a Estados Unidos.
Si alguna trabajadora se le ocurre exigir el respeto a sus derechos humanos, a
su integridad física y moral, o exige condiciones mínimamente dignas para poder
laborar, simplemente no le renuevan su contrato y pasa a la "lista negra" que es
compartida entre todas las empresas maquiladoras de todos los parques
industriales. Estos empresarios se reúnen cada semana para compartir información
y elaborar los mismos criterios y políticas de trabajo. Y así nadie las emplea.
Se les cierran las puertas a la vida porque han hecho de la maquiladora la única
fuente de empleo. "Cuando se dieron cuenta que era hermana de quien habían
corrido por exigir sus derechos, a mí no me dieron empleo en ninguna maquila"
–dijo una joven. Otro joven comentó que "mi madre está registrada en una lista
con su fotografía en la caseta de vigilancia, en la entrada del parque
industrial".
En esta región fronteriza los ejidatarios no pudieron competir con el Tratado de
Libre Comercio (TLC). Sin créditos para el campo y sin acceso al agua (el 85% se
va para los Estados Unidos), los campesinos dejaron de sembrar y se fueron a
trabajar a las maquiladoras. Vendieron la tierra muy barata y los nuevos
acaparadores de tierras son las grandes transnacionales que siembran maíz y
sorgo con grandes ventajas: agua y tierra muy baratas.
Durante tres años los ejidatarios de esta región fronteriza no regaron sus
tierras por el supuesto acuerdo que obliga a México entregar el agua a los
Estados Unidos. Los canales de riego que fueron pagados por los ejidatarios hace
años ahora son para beneficiar a las grandes corporaciones. Los pocos campesinos
que se mantienen en la tierra tienen que luchar continuamente para que las
autoridades abran los canales de riego para sus cultivos de maíz o sorgo que les
compran entre 1,200 y 1,500 pesos la tonelada; o la naranja a 2 mil pesos la
tonelada. El Programa de Certificación de Derechos Ejidales y Solares Urbanos
(PROCEDE) en la región provocó un aumento en el impuesto predial y los
ejidatarios han ido dejando la tierra que se concentra cada vez más en pocas
manos.
En realidad el modelo neoliberal y sus TLC pretenden un campo sin campesinos
donde solo quepa la maquinaria pesada y las grandes corporaciones altamente
subsidiadas. Por ejemplo, los requisitos para solicitar créditos a la
"financiera rural", antes Banrural están (lo que está en paréntesis es nuestro):
1) Relación patrimonial: estado de ingresos y egresos del ultimo ciclo (¿y si no
hubo ingresos en cosechas pasadas?, ¿y si la gente está tan pobre que no puede
soñar con un ingreso?). 2) Comprobante de domicilio: luz, teléfono, impuesto
predial con antigüedad no mayor a tres meses (¿y si el campesino no tiene ni
luz, ni teléfono? ¿Y si no quiere entrar al Procede?) 3) Identificación
personal. 4) Cédula del Registro Federal de Causantes (RFC) (¿lo podrá tener un
campesino o un ejidatario?) 5) Clave Única de Registro de Población (CURP). 6)
Acta de matrimonio si es el caso. 7) Escritura o título de propiedad con datos
de inscripción en el registro público de la propiedad o equivalente. 8)
Certificado de libertad de gravamen. 9) Impuesto predial vigente de los bienes
otorgados en garantía. 10) Acta de nacimiento. 11) Tres referencias bancarias.
(¿?) 12) Avalúo bancario. (¿?) 13) Apertura de cuenta en bancos participantes.
(¿?) 14) Poder para gravar bienes, en su caso. (¿?) 15) Autorización judicial
para gravar bienes de menores, en su caso. (¿?) 16) Pago de agua, en su caso.
17) Balance y estado del resultado con sus analíticos de los dos últimos años y
el parcial no mayor a tres meses, para créditos mayores a 70 mil UDIS. (¿?) 18)
Cotización de bienes a adquirir en créditos refaccionarios y dictamen de vida
útil en maquinaria usada. (¿?) 19) Consulta al buró de acreditado y su cónyuge.
(¿?) 20) Solicitud de seguro social.
Así, queda claro que para un campesino ejidatario difícil será que tenga todos
estos requisitos. Para el caso del programa gubernamental financiado con
prestamos del BM y del BID, el Procampo, el ejidatario necesita presentar los
siguientes requisitos:
1) Hoja verde de constancia de estar inscrito en Procampo. 2) Acta de
nacimiento. 3) Acta de matrimonio. 4) Identificación oficial. 5) RFC 6) CURP 7)
Apertura de cuenta bancaria o Banorte. 8) Poder notarial en caso de no ser
titular del Procampo. 9) Superficie mínima de 30 hectáreas, individual o en
grupo. (¿quién tiene en grupo ya 30 has cuando los campesinos han vendido la
tierra a las corporaciones?).
Luego de conocer esta experiencia a los campesinos e indígenas de Chiapas les
quedó algo claro: "ojalá que las maquiladoras no lleguen a Chiapas, lucharemos
para que esto no pase. Que bueno hubiera sido que vinieran más compañeras a ver
esta miseria". Otra pensó: "tenemos que buscar alternativas en el campo para no
dejar la tierra". Y es que hoy por hoy, la ultima trinchera y el antídoto para
combatir el neoliberalismo es la autonomía, el arraigo en la tierra logrando
alternativas de una vida mejor. Es por ello que los indígenas y campesinos son
ahora el principal obstáculo y enemigo de las grandes corporaciones y sus
gobiernos aliados.
Las Trabajadoras y Trabajadores de Delphi en Resistencia
Un ejemplo de la lucha por la justicia en las maquiladoras es la que llevan a
cabo las trabajadoras y trabajadores de la transnacional "Delphi, TRW e
Industria Fronteriza" que igual trabaja para General Motors, Mercedez Benz,
Cadillac y Pontiac. La corporación de Estados Unidos tienen una larga
trayectoria desde la década de los 70 en cuanto a la violación de los derechos
humanos de los trabajadores y las trabajadoras. Recientemente ha despedido a
cinco trabajadores entre ellos tres mujeres por exigir el reparto de utilidades
que la empresa les niega.
En Julio del 2004 la empresa Delphi en Reynosa, Tamaulipas, declaró que cerraría
unas plantas y que reubicaría otros 1,800 trabajadores de otras plantas las
cuales quedan del otro lado de la ciudad y para algunas trabajadoras implicaría
tomar tres autobuses de transporte a media noche. La empresa les ofreció
únicamente a los trabajadores del 1er turno un bono de 10 mil pesos si aceptaban
cambiarse voluntariamente como compensación. Sin embargo los trabajadores dicen
que la mayoría de ese dinero del bono el gobierno se quedara con ello pues será
objeto de descuento de impuesto, además del descuento del INFONAVIT. La mayoría
de las y los trabajadores tienen una antigüedad entre 8 y 20 años. Los
trabajadores de confianza se unieron a los sindicalizados y la empresa les dijo
que si no les convenía el cambio de planta, que renunciaran y no se les iba a
dar indemnización. Que ellos no tenían ningún "derechos" por ser de confianza.
Los trabajadores se movilizaron e interceptaron al Presidente Fox en su gira por
Reynosa el cual les dijo que tomaría cartas en el asunto. Finalmente los
trabajadores lograron que se les adjudicaran los bienes de la empresa legalmente
y proceder al embargo como compensación por la indemnización. Pero cuando
llegaron a la planta ya no había nada. La empresa se había llevado todo.
Las maquiladoras se trasladan ahí donde más ganancias puedan obtener a costa del
trabajo de los pobres. En la década del 90 más de 900.000 empleos se perdieron
en Estados Unidos en la rama textil y 200.000 en el sector electrónico y dichas
empresas migraron en búsqueda de mano de obra barata. En Costa Rica, El
Salvador, Honduras, Guatemala, Panamá y República Dominicana se emplean
alrededor de 500.000. En México se calcula que el 25% de la mano de obra
industrial trabaja en las 4,079 maquiladoras ubicadas ya no sólo en los estados
fronterizos con Estados Unidos sino en el interior del país. Grandes
transnacionales ya buscan otros estados dónde explotar mano de obra,
infraestructura, recursos y "acuerdos de libre comercio". En El Salvador en 1996
las maquilas exportaron alrededor de 709,7 millones de dólares, pero al mismo
tiempo las empresas importaron 541,5 millones de dólares.
El supuesto "desarrollo" de las maquilas conlleva pobreza, explotación,
acumulación de riqueza, impacto al medio ambiente y una cada vez más baja
calidad de vida. No son la opción, aunque el gobierno del estado de Chiapas diga
que en vez que los indígenas migren hacia el norte en búsqueda de empleo, mejor
les traemos las maquilas a la casa. Vaya solución! Mañana de igual manera
migrarán dejando a su paso más pobreza. Desde finales del año 2000 se han
perdido más de 270 mil empleos. Entre el 2001 y el 2003 más de 300 líneas de
producción se fueron de México rumbo a China y Centroamérica. Ya existen
demasiadas pruebas para comprobar que este modelo económico no funciona. Ya es
hora de buscar una alternativa. Porque otro mundo es posible.
* CIEPAC, A.C. Centro de Investigaciones Económicas y Políticas de Acción
Comunitaria. Página Web: http://www.ciepac.org/