Juan Carlos Cena
|
La falsaria estatización del F.C. Belgrano Cargas
Parte IV
Juan Carlos Cena
El gobierno de Kirchner definió de entrada cual iba hacer su política de
estado sobre los Ferrocarriles Argentinos
Nosotros creemos que la integridad moral es en este
momento un factor político casi tan eficaz como
la denuncia y el conocimiento preciso de los hechos.
Raúl Scalabrini Ortiz
El último discurso de Néstor Kirchner en su campaña electoral sobre la
recuperación de los ferrocarriles fue en Cruz del Eje, Córdoba, en ese momento
era un candidato exultante.
Luego, ungido presidente, anunció variados y diferentes planes, pero nunca un
Proyecto Integral para recuperar los Ferrocarriles Argentinos, en el marco de un
proyecto de país. Transcurrió todo su mandato lleno de anuncios y discursos de
distintos tonos. Eso sí, a pesar de las incontinencias verbales, la continuidad
de las concesiones ferroviarias no sólo se han profundizado en su gestión, sino
que se eternizan. El desvanecimiento de las promesas electorales fue notable.
Percibiendo que las promesas se esfumaban, desde el Mo.Na.Re.FA., afirmamos: la
modalidad concesionarista se va a ahondar más que en la década de los años
noventa.
Una de las primeras proclamas fue sobre la revisión de los contratos de
concesión de los ferrocarriles. Luego, la mención de la apertura de los talleres
de Tafí Viejo. Hecho que ocurrió en la misma ciudad donde están asentados los
talleres, sus habitantes recibieron al presidente con una algarabía esperanzada.
Se reabría ese establecimiento que supo albergar a más de 5.500 trabajadores,
fundado por el Estado Nacional en 1907. Al terminar su discurso, anunciado la
medida prometida, dijo con fuerza y salivando las palabras: Para los escépticos
que no creen les digo: ¡MINGA! Hasta el día de la fecha el minga no se concretó,
deambulan sólo 60 compañeros por sus talleres desmantelados y saqueados.
Tras ellos, los Talleres de Junín, otro gran acto para ilusionarse, zona
ferroviaria. Seguido, talleres Los Hornos, en La Plata, la comarca se movilizó,
fueron todos a escuchar las nuevas noticias que generarían fuentes de trabajo.
Ese día se anotaron de a miles como en los otros talleres para ingresar. Tiempo
después los talleres de Campana, éste, sólo se transformó en un museo ferroso y
sin presupuesto, en él crecían el abandono, el óxido… y el yuyal.
Al presentar el PLANIFER-Plan Nacional de Inversiones Ferroviarias, el 18 de
febrero del 2004, desde el atril, apuntó: 'Es una decisión irrevocable que la
Argentina vuelva a tener un sistema de ferrocarriles al servicio de todos los
argentinos'. Más adelante subrayó: ´El tema de los ferrocarriles es central.
Cualquier país del mundo que se quiera constituir como nación necesita un
sistema de ferrocarriles que funcione, lo más moderno posible´. Plan que
proyectaba, para ese año, inversiones realmente significativas de más de 300
millones de pesos.
En ese mismo transcurrir vino la inauguración del Paso de Jama, espacio crucial
para el Proyecto de los corredores bioceánicos diseñado por IIRSA, organismo que
depende de la CEPAL. Paso que debería ser utilizado para trasladar la soja y las
oleaginosas con destino a Asia, que es el mercado cautivo. Luego, ligeramente
apareció el anuncio sobre la reestatización del F.C. Belgrano Cargas pregonado
por Ricardo Jaime en Tucumán, en el mes de junio del 2005. Este explicó en su
pregón: que el F.C. Belgrano Cargas se iba a reestatizar. Pero, sutilmente,
terminando su proclama manifestó: con Gerenciamiento privado.
El otro anuncio desde el atril, fue el promocionado Plan Nacional de
Recuperación y Modernización Ferroviaria que realmente no es un Plan, sino un
conjunto de medidas tendientes a remendar anomalías y daños causados, no
solucionados, por las empresas concesionarias que no invierten un solo níquel en
el mantenimiento de las infraestructuras y menos en seguridad del material
tractivo, vías, señales, puentes, pasos a nivel, entre otros asuntos.
Subsiguientemente se proclama el Mega Plan: PLAN FERROVIARIO 2005 a través del
Decreto 1683 del 28/12/2005, con un total de inversión programada, para 3 años
(2006- 2008), para el servicio interurbano de pasajeros de 5.000 millones de
pesos. Además, se prevé 1.000 millones de pesos para el sistema de transporte de
cargas y 400 millones de pesos por año para subvencionar a las concesiones y
mantener los boletos congelados. Los recursos saldrían, mayoritariamente, de las
partidas presupuestarias asignadas al sector y de créditos del BID, Banco
Mundial y la Corporación Andina de Fomento.
Como podemos observar, leer y constatar los anuncios sobran y no cesan. Es el
atosigamiento de las publicidades, que se repita hasta que penetre. Que este
nuevo bando haga olvidar el anterior anuncio, y así.
El 8 de mayo del 2006, el ex presidente informó sobre un llamado a licitación
pública nacional e internacional para la construcción del tren de alta velocidad
Buenos Aires-Rosario-Córdoba. Esta proclama estuvo enmarcada dentro del Plan
Nacional de Recuperación y Modernización Ferroviaria que lleva adelante el
Gobierno Nacional.
Tiempos después, vinieron cuentos de soterramientos, muros de contención, más
soterramientos desde Tolosa - La Plata. Se inauguraron trenes de doble piso que
fracasaron, no circulan más. Apertura de ramales, el Túnel Internacional Mendoza
- Las Cuevas, construido e inaugurado por Figueroa Alcorta en 1904, lo recontra
inaugura junto con la presidenta Chilena, y otras obritas varias, todas con
jugosos presupuestos.
Pero lo más penoso que ocurrió, en este período, es la transferencia al grupo
Macri-Chinos, burocracia sindical y otros impresentables del F.C. Belgrano
Cargas. Francisco Macri es el hombre al que le quitan la concesión y explotación
del Correo Argentino en el marco de un discurso setentista. Más tarde, ese mismo
Macri es convocado a la Casa Rosada. El ex presidente Kirchner, con un discurso
de los 90, que otrora apoyó y que luego denunciara como que nunca apuntaló,
diciendo en un exorcismo plañidero que ese período, fue un viaje a los
infiernos, le otorga en esa convocatoria noventista, en forma directa, la
concesión del F.C. Belgrano Cargas S.A. Don Francisco Macri, sonreía. Todo esto
ocurre entre las marañas y escabrosidades del aparato del Estado. Apariencias
que pertenecen al sistema capitalista. A pesar de las fragosidades, nada debe
ocurrir fuera de ese recuadro. Esas, fueron conductas de comportamiento
inmodificables por los diferentes gobiernos.
Sobre la hora, antes de terminar su mandato, el gobierno de Néstor Kirchner,
estuvo diseñando un paquete de inversiones faraónicas, remachando proyectos como
ser: Tren bala a Rosario y Córdoba después a Mar del Plata. Para el primer
proyecto se estaba definiendo la ingeniería financiera y que en un mes se
firmaría el contrato definitivo con el consorcio liderado por Alstom. Dicen que
el monto es de US$ 1.320 millones, después aumentó y así con las incontinencias.
Pero, siempre hay un pero, el Club de Paris condiciona el préstamo. Quiere que
el F.M.I participe de la operación. El gobierno dice que si en una fecha, por
boca de un ministro y que no en otra, por boca de otro ministro. Toda una
¨coherencia¨.
Repito nuevamente: Nuestros gobernantes vende patrias tendrían que recordar a
Alexander Pope con su célebre frase "El que dice una mentira no sabe qué tarea
ha asumido, porque estará obligado a inventar veinte más para sostener la
certeza de esta primera."
¡Cómo nos mintieron, y cómo han mentido al pueblo! ¡Cómo lo han estafado! ¡Cómo
nos siguen engañando! También los escribas, lacayos y amanuenses del sistema
sostuvieron la mentira sabiendo que era mentira.
El 16 de enero del 2008, la continuadora de su gestión, su esposa Cristina
Fernández de K, anuncia nuevamente este desatino nacional que es la construcción
del tren de alta velocidad.
El anuncio del llamado a licitación para construir un tren de alta velocidad
entre Retiro-Rosario y posteriormente Córdoba es un despropósito a todas luces,
es una medida irracional técnica-operativa y económica-política, cuestión que no
tiene nada que ver con la racionalidad que se necesita para la recuperación de
los ferrocarriles en la Argentina.
Anuncio avieso, si los hay, cuando todos sabemos que el Sistema Nacional de
Transporte es un desastre, que están colapsados los servicios, y los
ferrocarriles están en estado de una profunda crisis.
Se conoce quien será el operador y sus socios, representantes del consorcio
Veloxia, que Alstom lidera e integra junto a la española Isolux y las argentinas
IECSA (constructora, esta empresa era de Francisco Macri y se la "vendió a su
sobrino") y EMEPA, especializada en material ferroviario. La empresa IECSA va
intervenir en el proyecto del gobierno sobre el soterramiento del F.C.
Sarmiento.
Tampoco está hecho el estudio de factibilidad económica del servicio, ni de la
obra (estudios de suelos, rellenos de terraplenes, terreno a ocupar, entre otras
cosas) como: ¿Cuántos pasajeros debemos transportar para que sea rentable? Digo,
porque seguro que serán subsidiados y el que paga ese subsidio, por una mala
obra, es el pueblo, el simple ciudadano que ocupa cualquier lugar en el
territorio nacional. Sin caer en el pesimismo y que nos señalen como la máquina
de impedir, debemos interrogarnos: pero si no tenemos corriente eléctrica para
un humilde rancho ¿como abasteceremos la red de alta velocidad? Porque la
verdad, la verdad, pretender tener un tren bala con los ferrocarriles
destrozados, es como pretender tener un Roylls Royce o un Mercedes Benz, o una
Ferrari estacionados en mi rancho, mientras yo y mi familia andamos descalzos
chapaleando en el barro y comiendo sopitas de achuras y salteado.
Lo que no debemos es caer en la discusión bizantina del tren bala no, o el tren
bala sí. Sería una distracción. Esa porfía taparía la verdadera naturaleza del
problema del transporte en general y el ferrocarril en particular. Más todas las
otras necesidades básicas de la sociedad argentina.
Ni que hablar de la intención, que es casi un hecho, de comprar vagones y
locomotoras a China. ¿Y nuestra capacidad instalada? ¿Y nuestra mano de obra
calificada que está desocupada, qué? ¿Dónde está el interés nacional? No, le
soluciona la desocupación a los chinos, y ahora le van comprar subterráneos por
un valor de 850. Millones de dólares, digo porque parece que el año pasado
(2007) estaban más barato. Donde en la mesa presidencial presidida por la
Presidenta estaba Papa Macri en representación de los chinos. El beneficiario
directo será Benito Roggio concesionario del Subterráneo de Buenos Aires.
Inversión que la pagaran los que viven en la Quiaca o en Santa Cruz, bonaerenses
y cuyanos. Toda una perversidad.
Como podemos ver claramente que la cartelización de los concesionarios, viejas
sanguijuelas que succionan las mieses del Estado Nacional, funcionan
aceitadamente.
Hoy, ya no anuncian, a veces reanuncian. Y si los anuncios son nuevos son casi
una burla. Antes de irse la administración K, en el marco de la campaña
electoral, inauguraron la puesta en marcha del Tren a las Sierras en Córdoba.
Sólo tres estaciones tres, parece que van a inaugurar otras. Sí, hay que creer,
solamente recorrerá tres estaciones, pero dicen que van por más... Toda una
bufonada. Y una descarnada burla a la ciudadanía.
Estábamos en tiempos electorales perpetuos, todo vale.
Los últimos subsidios
En uso y abuso de los superpoderes, el ratificado por Cristina K (ya no está)
súper ministro Jefe de Gabinete, Alberto Fernández, (antes de irse) movió las
partidas del presupuesto beneficiando a todas las empresas ferroviarias, ya sean
de cargas o pasajeros, firmando la DATA 678, publicada en el Boletín Oficial. El
monto reasignado se suma a los 417 millones que el gobierno ya le había asignado
en los últimos 12 meses. Fuente: Secretaria de transporte- Boletín Oficial -
Mo.Na.Re.FA.
Durante la administración del Estado por parte del ex presidente Kirchner,
repartió 3.435 millones de pesos en subsidios a los concesionarios ferroviarios.
En la Casa Rosada se sabe que el boleto del transporte incide directamente en
los gastos de una familia de escasos recursos que debe trasladarse a su lugar de
trabajo y retornar. Esa familia vota.
Todas las obras las financia el Estado. Por ellas, se llama a una licitación
pública y gana el que cotiza menos. Es el concesionario el que realiza las
licitaciones, por cuenta y orden del Estado. La empresa realiza un concurso de
precios, ejecuta la obra, financiada con fondos públicos. Pero antes crea una
empresa que seguro gana la licitación. Los costos de la obra se remiten al
órgano de Estado correspondiente, pero con agregados, abultando el costo final,
lo que significa un brutal sobreprecio en la facturación final. Cuestión que ya
fue denunciada por la Asociación del Personal de Dirección de los Ferrocarriles
y cuyo expediente estaba en un cajón del Juez Urso. Mecanismo empleado desde que
se iniciaron las concesiones.
Formalmente, lo que se dispuso fue un nuevo aumento de 200 millones del
presupuesto del Ministerio de Planificación Federal, que deberá ser
redistribuido entre las empresas.
Juan Carlos Cena es autor de:
* El Guardapalabras, memoria de un ferroviario (agotado)
* El Cordobazo, una rebelión popular (agotado)
* El Ferrocidio 1º edición (agotado) 2 º edición (ampliada y corregida)
* Crónicas del Terraplén (cuentos)
* Secretario General del Organismo Central Capital Federal del Personal Técnico
de los Ferrocarriles Argentinos (APDFA) (1984-1989)
* Miembro Fundador del Mo.Na.Re.FA - Movimiento Nacional por la Recuperación de
los Ferrocarriles Argentinas.