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Argentina, la lucha continua....

La lucha obrera en Aceros Zapla y el museo de grandes novedades

RADIO PUEBLO - ANRED

430 trabajadores de la actual Aceros Zapla, una de las joyas estatales rematadas en los 90, denuncian atraso salarial, pésimas condiciones de trabajo, precarización, desinversión, vaciamiento y otros deja-vu.

En la mañana del miércoles 28 de mayo los delegados del Sindicato de obreros de Aceros Zapla se reunieron para decidir, a raíz del retroceso en la negociación en la conciliación obligatoria de la tarde de ayer en la Secretaria Provincial de Trabajo, las próximas medidas de fuerza que consistirán en el cierre del ingreso a la Fábrica y una asamblea en horas de la tarde, además de un posible corte de ruta mañana sobre Ruta Nacional N°66.

En diálogo con Radio Pueblo los trabajadores, relataron la postura de mantener el paro y la permanencia en la puerta de la Fábrica, medida que ya lleva 15 días con 3 intentos fallidos en la negociación de la conciliación obligatoria. En la apertura de las paritarias correspondientes a este año, el comité directivo del sindicato de Trabajadores de Aceros Zapla presentó un petitorio consistente en 11 puntos, entre los cuales, los tres principales eran el reclamo por la Seguridad e Higiene de los trabajadores, la recomposición salarial en vista de una aumento del 45% y el pase a planta permanente de compañeros precarizados de la contratista Forja Norte.

Los reclamos

En total son 430 trabajadores que adhieren a la medida de fuerza, acampando en el ingreso externo a la Fábrica, entre ellos 33 son tercerizados de la contratista Forja Norte, distribuidos en los 10 sectores de procesamiento de la planta y que realizan el mismo trabajo que los trabajadores en blanco pero cobran un 50% menos que los demás, algunos de ellos ya tienen 12 años de antigüedad, como una compañera, de las 4 únicas mujeres trabajadoras, que lleva 10 años como tercerizada en la fábrica.

En 2005 también habían realizado medidas de fuerza en reclamo de las condiciones de trabajo, si bien se llegó a un acuerdo en los siguientes años, los trabajadores vieron como la producción crecía por un lado, pero por otro los empresarios fueron vaciando la empresa, trasladando maquinaria a las otras empresas en Córdoba, Mendoza y ocultando o alterando estadísticas para evadir impuestos. Además vieron la poca planificación con que se administraba la empresa, con reclamos por parte de los clientes compradores por las condiciones, con deficiencias de los productos, en parte por la falta de insumos y la poca inversión tanto en mantenimiento como en la compra de nueva maquinaria, según los trabajadores la maquinaria que se dañaba la vendían como chatarra y no se reponía.

En los 11 puntos también se planteó y reclamo porque desde que se privatizó en 1992, los 1250 trabajadores de entonces fueron reduciéndose hasta los 480 de hoy, con compañeros con un régimen de jubilación muy injusto y donde además los compañeros restantes sufrieron las políticas de privatización con precarización y ajustes del Estado Neoliberal. Los trabajadores denuncian que a medida que se jubilan sus compañeros la empresa no incorpora nuevo personal sino que recarga el grueso del trabajo de los diferentes sectores de la producción en el resto de los trabajadores, pagándoles un adicional mínimo.

Además de esto, está la difícil situación de insalubridad y riesgo de los trabajadores, siendo uno de los peores accidentes el ocurrido a mediados del año pasado, en el cual explotó el Horno III donde alrededor de 10 compañeros resultaron víctimas de la explosión. Éste hecho se ocultó pese a que los vecinos a la fábrica escucharon la explosión y vieron como ambulancias sin sirenas se llevaban a las víctimas que fueron atendidos incluso en clínicas fuera de la provincia. Luego de este episodio intervino un organismo nacional pero pese a que se "arreglo" el Horno III no se avanzó en los reclamos por insalubridad y los compañeros afectados algunos volvieron a trabajar en los últimos meses pero con graves secuelas.

Antes el comité directivo del sindicato se mantuvo por 12 años, con tres mandatos consecutivos de 4 cada uno, cuyo funcionamiento y administración fue motivo de muchísimas diferencias con los trabajadores por presuntas coimas y arreglos por fuera de los intereses de los trabajadores, por lo cual la situación de explotación y precarización se mantuvo hasta el comité que decidió y mantiene firme el paro y la postura de conseguir los tres puntos principales del petitorio.

15 días sin acuerdo y retroceso

Luego del inicio del paro y la permanencia en el ingreso a la fábrica hubo dos intentos de conciliación, en el segundo de ellos estuvieron muy cerca del acuerdo con un aumento del 30% pero en dos partes, pero los trabajadores rechazaron la propuesta porque no llegaba a lo pedido ni tampoco afirmaba el pase a planta permanente de los 33 compañeros de Forja Norte. Se decidió continuar con la medida de fuerza hasta una tercera reunión ayer, en horas de la tarde, en la que el Gerente de la planta, Eduardo Dudziak, retrocedió y se cerró en un 25 % de aumento, propuesta que nuevamente rechazaron y vieron como una pulseada que busca dividir a los trabajadores, por eso en la asamblea de hoy buscan reforzar las medidas y mantener la postura de seguir la lucha hasta conseguir una propuesta acorde a sus pedidos.

Estos intentos de conciliación estuvieron acompañados de marchas tanto en la Ciudad de Palpalá como en San Salvador de Jujuy, diálogos con concejales oficialistas y diputados del Partido Radical, pero pese a la situación de conflicto el Gobierno Provincial nuevamente da a un paso a un costado, argumentando que se trata de una empresa privada en la cual no tienen injerencia, aun a sabiendas que al igual que Electroquímica El Carmen, que ya lleva casi 5 meses de toma, son por empezar la fuente de trabajo para 500 trabajadores jujeños en caso de Aceros Zapla y 60 en Electroquímica, donde en ésta última se producen dos insumos indispensables para la potabilización del agua, siendo además empresas que generan algunos de los pocos ingresos monetarios a la provincia, junto a otros sectores como el tabaco, el azúcar y la minería. Por otra parte, ambas empresas se han manejado irregularmente con la complicidad de funcionarios públicos que hacen la vista gorda ante la precarización, insalubridad entre otras malas condiciones de trabajo.

Para Sebastián Maraz, sub-delegado del sindicato, los trabajadores consideran una burla el retroceso en lo que ya había sido un avance en la conciliación la semana pasada, una estrategia que busca desestabilizar la unidad de los trabajadores, porque incluso Dudziak amenazó con descontarle los días de paro; éste último también buscó tergiversar la medida de fuerza de los trabajadores, argumentando que se trataba de una toma en la que algunos trabajadores no dejan pasar a los trabajadores que si quieren trabajar, generando entre otras cosas más pérdidas enormes de dinero por los incumplimientos en los pedidos ya comercializados.

Por todo esto los trabajadores redoblan las medidas de fuerza con el inicio de un bloqueo en el ingreso de la fábrica, seguidos de un recorrido en la planta en vistas a la enfriamiento de las negociaciones y al cambio de postura de los empresarios.

El contexto

La situación de los trabajadores de Aceros Zapla se suma a un escenario de lucha sindical en la provincia cuya bola de nieve viene creciendo en los últimos meses incluyendo tanto a gremios estatales como privados, siendo los municipales y los docentes algunos de los ejemplos más claros de los primeros y los trabajadores del Talar, Electroquímica El Carmen y Aceros Zapla de los segundos. La recomposición salarial y la precarización son los puntos coincidentes más reclamados y que muestran no solamente la puja distributiva actualmente en auge a nivel nacional, en virtud de la negativa coyuntura económica nacional, sino también el arrastre jamás resuelto, y aún profundizado, de la avanzada neoliberal de los 90, cuyos precarios "parches" han probado ser realidades estructurales que ninguna bandería política se propone superar.

En el caso de los dos últimos privados se muestra también otra "antigua novedad": la vuelta de las patronales a las viejas estrategias de vaciamiento y deserción que campearon a finales del milenio y que hoy, tras una década de ganancias del capital, vuelven a aflorar. Que sea Aceros Zapla, los antiguos Altos Hornos Zapla, una de las joyas estatales rematadas en los 90, la que afronta esta situación no sólo tiene un gran valor simbólico, también posee un concreto valor sintomatológico.

En el terreno inmediato, la falta de seguridad ante la nefasta situación de insalubridad y el abandono de los obreros es alarmante, las grandes complicidades por parte de los funcionarios públicos están a la orden del día y visiblemente aplicadas en perjuicio de la clase trabajadora jujeña que, como antes, como siempre se propone dar pelea.

Fuente: lafogata.org