Argentina, la
lucha continua....
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Claudio Katz: Existe un consenso de todas las clases
dominantes del mundo
para enfrentar la crisis con mayores atropellos a los trabajadores
Mario Hern�ndez.
Mario Hern�ndez (MH): Las pol�ticas de ajuste agravan la crisis europea. A
finales de la d�cada del �20 el presidente estadounidense, Herbert Hoover,
cometi� un error fatal imponiendo aumento de impuestos y recortes
presupuestarios. Estados Unidos se hundi� en la recesi�n. Roosevelt comenz� a
gastar e inici� la recuperaci�n. Parecer�a que Europa ha adoptado las pol�ticas
de Hoover que precipitaron el crac de 1929.
Claudio Katz (CK): S�, no solo Europa. Esencialmente Europa, pero existe un
consenso de todas las clases dominantes del mundo para enfrentar la crisis con
mayores atropellos a los trabajadores. En esto hay diferentes intensidades pero
la estrategia es la misma, salvo en las regiones que no est�n en el centro de la
crisis.
En Europa se est�n destruyendo conquistas sociales jam�s alcanzadas por los
trabajadores
Estoy hablando de Estados Unidos, de Europa, de Jap�n. Es en Europa donde
claramente hay pol�ticas de ajuste que tienen una virulencia mayor, donde se
est�n destruyendo conquistas sociales jam�s alcanzadas por los trabajadores de
ninguna parte del mundo, con tasas de desempleo elevadas, pero b�sicamente
arremetiendo contra el sistema de jubilaciones, los salarios del sector formal,
expandiendo la precarizaci�n. Ocurre que en la etapa de la ofensiva neoliberal,
del capital sobre el trabajo, el atropello contra el Estado de Bienestar
contin�a en la crisis. As� como tuvimos una etapa de estabilidad con este
modelo, en la crisis hay un intento de subir la apuesta y profundizar el ajuste,
en algunos casos con formas ultraliberales.
En Estados Unidos hay una diferencia de pol�tica econ�mica pero no en la
estrategia de arremeter contra los trabajadores. Todav�a tiene recursos que
Europa no tiene para actuar en la crisis internacional. El d�lar, cualquiera sea
su futuro, sigue siendo la moneda determinante. Tiene gran influencia sobre el
FMI, con Wall Street tiene el manejo, en alianza con Gran Breta�a, del sistema
financiero internacional. Esto le da mayores espacios para actuar frente a la
crisis mundial, por eso han sido los que auspiciaron el G20, organizan reuniones
internacionales para definir pol�ticas frente a la crisis pero en materia de las
pol�ticas de ajuste contra los trabajadores Obama no repite a Roosevelt, dir�a
que m�s bien es su ant�tesis. Est� entre la presi�n de los republicanos que han
crecido y su viejo electorado que est� decepcionado. Un d�a acepta los recortes
de los republicanos y otro intenta una pol�tica de mayor inversi�n p�blica pero
el ataque contra los inmigrantes, el sistema de salud, la reducci�n de los
sectores con ingresos de salario fijo contin�a sin pausa. Lo mismo en Jap�n.
La reorganizaci�n de la econom�a norteamericana la est� pagando el pueblo
MH: Quer�a detenerme en Estados Unidos porque d�as pasados estuve leyendo
declaraciones de Federico Sturzenegger, presidente del Banco Ciudad, sosteniendo
que Estados Unidos est� produciendo m�s que antes de Lehman Brothers con 5%
menos de gente, o sea que el aumento de la productividad y las ganancias
corporativas son r�cord absoluto.
CK: Es cierto, lo que ocurre es que eso no desmiente la crisis ni la pol�tica de
ajuste. En Estados Unidos se est� reorganizando la econom�a a trav�s de una
fractura entre los sectores que producen en el pa�s y el exterior. En el caso
norteamericano la mundializaci�n implic� una emigraci�n significativa de firmas
al exterior del pa�s para lucrar con salarios m�s reducidos. Lo cl�sico son las
maquilas mexicanas, tambi�n a China y otras regiones con salarios m�s bajos.
Estas firmas tienen ganancias, utilidades e ingresos importantes. Los que
abastecen localmente al pa�s est�n en un estado de crisis muy profunda. Se da
esta fractura, unos tienen p�rdidas y otros ganancias, unos mantienen la
productividad mientras otros la aumentan, pero esta reorganizaci�n de la
econom�a norteamericana se hace a costa de una ca�da del salario real, de los
ingresos de los trabajadores, del aumento de la precarizaci�n, del desempleo, es
decir, el ajuste incluso es mayor por la presi�n de las empresas que se van
afuera porque imponen un chantaje a los trabajadores: �O acept�s un convenio
colectivo a la baja -como ocurri� recientemente en General Motors- o nos vamos
afuera�. En general igualmente se van pero mientras tanto incrementan la
presi�n.
Los datos son contundentes, el desempleo est� oficialmente en 9% pero en
realidad, si lo medimos con criterios internacionales, est� en 15%, la pobreza
est� afectando al 15/20% de la poblaci�n, especialmente si tomamos sectores
latinos y de poblaci�n negra se eleva a 30/35%, las deudas de los sectores de
menores ingresos, que fueron los que desataron la crisis de las subprime, al no
poder pagar las hipotecas de las viviendas que hab�an comprado, la situaci�n de
los deudores hipotecarios se mantiene sin cambios, la gente que pierde sus
viviendas es un dato que no ha cambiado. Hay 11 millones de viviendas valuadas
por debajo de sus hipotecas y 1/5 de los propietarios est�n asfixiados por
cr�ditos impagables, es decir, la reorganizaci�n de la econom�a norteamericana
la est� pagando el pueblo. Sturzenegger tendr�a que mirar los 2 costados del
problema.
La crisis europea tiene que ver con el fracaso del proyecto del euro
MH: Cuando habl�s de estas 2 caras de la econom�a norteamericana me hac�s
recordar algo que se viene comentando mucho �ltimamente y es esta suerte de
emblocamiento europeo entre econom�as solventes y en crisis.
CK: Ha ocurrido que Europa tiene una crisis espec�fica. No es solo un contagio
internacional de lo que pas� en Estados Unidos o un efecto de la crisis
financiera mundial. Hay una convulsi�n espec�fica que tiene que ver con las
limitaciones y el fracaso del proyecto del euro montado b�sicamente por Francia
y Alemania que es el motor econ�mico pero necesita la alianza pol�tica de
Francia.
Alemania creci� desde la anexi�n de la ex RDA, se transform� en la potencia
exportadora de Europa a trav�s de una pol�tica de ajuste salarial con enormes
avances en la productividad y la tecnolog�a. Se convirti� en el pa�s exportador
de Europa con un mercado relativamente cautivo porque pagaba en euros. Al
extenderse el mercado europeo en torno al euro, convirti� a Alemania en una
potencia que puede vender con mayor facilidad. El problema es que en el curso de
los 10 �ltimos a�os esta exportaci�n alemana fue creando un gran desequilibrio
ya que exporta a Grecia, Espa�a, Irlanda, pero estos pa�ses tienen d�ficit
comercial, se endeudan con Alemania y llega a un punto en el cual se crea una
situaci�n de descalabro. Eso es lo que sucede actualmente. Esta Europa a 2
velocidades, una del norte -Alemania, Francia, Holanda, Austria- y una del sur,
endeudada, con d�ficit comercial, sin poder sostener el euro.
Ahora la estrategia que adopta Alemania frente a esta crisis causada por su
propia pujanza es parecida a lo que nos pas� a nosotros con la convertibilidad,
donde ten�amos una moneda atada al d�lar, se importaban productos del exterior,
la industria se destru�a, la productividad deca�a y en un momento el pa�s se
endeud� para sostener eso hasta que estall�. Es lo mismo que le ocurre a Grecia
pero la soluci�n es doblar la apuesta. Alemania en vez de impulsar al resto de
las econom�as del euro, lo que hace es imponer un pacto fiscal que implica un
ajuste deflacionario de proporciones may�sculas para sostener el euro sobre el
sudor, las l�grimas y la vida de los griegos, los irlandeses, de toda la
periferia europea.
Es un ajuste muy superior al que soportan los trabajadores norteamericanos,
incluso los japoneses que enfrentan una deuda p�blica muy alta. Lo de Europa es
descomunal.
Si la econom�a mundial no est� en una depresi�n total es porque China sigue
creciendo
MH: Los ojos del mundo est�n puestos en China en lo que hace a la recuperaci�n
de la econ�mica pero d�as pasados le�a un art�culo de Paul Krugman donde
planteaba que en China se estar�a dando un boom de la construcci�n con cr�ditos
de la banca desregulada y sin garant�a estatal que estar�a planteando hacia el
futuro un escenario como el vivido por Estados Unidos y Espa�a con la burbuja
inmobiliaria.
CK: Es relativamente cierto. Hay que evaluar los acontecimientos en cierta
proporci�n. No nos olvidemos que China se ha convertido en la segunda econom�a
mundial, en plena crisis sigue teniendo tasas de crecimiento del 8/9% anual y
desde 2008 se ha convertido en el sost�n financiero de los bancos
norteamericanos y europeos, de la deuda p�blica de ambas regiones, con un
objetivo chino que es seguir sosteniendo sus ventas en Europa y Estados Unidos
No podemos perder de vista que si la econom�a mundial est� en una crisis muy
severa, pero no en una depresi�n global total, es porque China sigue creciendo.
Hay 1/3 de la econom�a mundial que es empujada por China que logra que los
bancos norteamericanos no se hundan y por lo tanto que el pa�s se mantenga, que
Europa no se hunda y adem�s arrastra como comprador a todos los pa�ses que
venden materias primas. Lo ocurrido con China es un �ndice de las
transformaciones may�sculas que se han producido en los �ltimos 20/30 a�os. No
olvidemos que China era un pa�s secundario en el mercado mundial y en la
actualidad es la clave para que la econom�a mundial no se despiste por completo.
Dentro de este contexto China tiene muchos desequilibrios, entre ellos lo que
se�ala Krugman, pero dentro de este marco. China tiene dificultades graves,
dir�a que la m�s inmediata es la que se�ala Krugman. Hay una burbuja
inmobiliaria enorme, los precios de las viviendas han aumentado en forma
desproporcionada en los �ltimos 5/6 a�os.
MH: En un momento donde debe haber millones de personas traslad�ndose del campo
a las industrias en las ciudades.
CK: Adem�s, la construcci�n de nuevas viviendas es el sector productivo chino de
mayor actividad, por lo tanto, se estima que si se pincha la burbuja
inmobiliaria por lo menos 2 o 3 puntos del PBI quedar�an inmediatamente
afectados. Es una burbuja porque el boom econ�mico de la vivienda en China est�
financiado por un sistema de cr�ditos muy poco controlado.
MH: Una "Banca en las sombras", sostiene Krugman.
CK: Exactamente. Una banca cuyos cr�ditos son regionales y est�n poco regulados,
su monto es desconocido y el estallido de esta burbuja podr�a provocar efectos
muy importantes. Por esta raz�n el gobierno chino desde hace 2 o 3 a�os es
conciente de esto y frente a la experiencia espa�ola y norteamericana han
comenzado a enfriar el sector para intentar que la burbuja no explote y hasta
ahora han mantenido m�s o menos controlada la situaci�n aunque no se sabe si va
a terminar estallando o no.
Yo dir�a que igualmente el desequilibrio chino m�s significativo de mediano
plazo est� en la sobreinversi�n. China tiene una tasa de inversi�n del 45/50%
anual. Es delirante y hay que vender todo lo que se produce. Si uno invierte 50%
luego fabrica m�s productos y hay que venderlos afuera y la cosa est� muy
dif�cil por la situaci�n internacional y tambi�n adentro, lo que no es tan f�cil
porque habr�a que aumentar significativamente el nivel del salario chino y
perder�an la ventaja comparativa de bajos salarios que les permite exportar.
El dato m�s importante de la econom�a mundial fue que en 2010 hubo en China
180.000 protestas
MH: Me llam� la atenci�n en tu �ltimo art�culo "El ajedrez global de la crisis"
de diciembre 2011, un dato: en 2010 en China hubo m�s de 180.000 protestas.
CK: Quiz�s es el dato m�s importante de la econom�a mundial aunque es poco
conocido.
Tengamos siempre en cuenta las proporciones chinas. Un pa�s de 1.300 millones de
habitantes tiene 180.000 protestas, es mucho, pero imaginemos que nuestro pa�s
tiene 40 millones. No s� si la proporci�n de las protestas chinas es superior a
otros pa�ses, pero la importancia es que la reacci�n social, la resistencia
frente a la crisis es el dato que hay que seguir con mayor atenci�n porque es
finalmente el �nico que puede cambiar el car�cter de ultra ajuste que tiene la
crisis. Lo �nico que puede modificar la tendencia predominante a responder a la
crisis con una mayor agresi�n a los trabajadores es una resistencia social.
En la regi�n donde se esperaba mayor resistencia era Europa. Aunque ha comenzado
todav�a es muy limitada en funci�n de su historia. Es muy fuerte en Grecia,
apareci� en Espa�a, comenz� a irrumpir en Italia, pero no es una resistencia
acorde al nivel de la agresi�n que se est� sufriendo.
Es importante y muy alentador lo ocurrido en Estados Unidos con el movimiento
"Ocupar Wall Street" porque es la primera vez que ocurre algo de este tipo
despu�s de muchas d�cadas y contin�a, se est� organizando, tiene presencia
nacional, pero en el lugar donde el movimiento social es m�s din�mico
curiosamente es China. En primer lugar por razones econ�micas y sociales. No hay
recesi�n, hay crecimiento y, por lo tanto, hay posibilidad de conquistas, de
conseguir mejoras.
Hay un movimiento activo desde hace varios a�os, con una clase trabajadora de
una nueva generaci�n. Ya no son los trabajadores de la �poca mao�sta ni tampoco
los que vinieron desde el campo en el per�odo m�s reciente de construcci�n del
capitalismo chino. Es una clase trabajadora m�s s�lida, que act�a con mucha
valent�a. Lo m�s importante es el viraje en los 2 �ltimos a�os de la direcci�n
china, de la elite, de los dirigentes del pa�s que pasaron de una pol�tica de
confrontaci�n, represi�n e ilegalizaci�n a contemporizar y esta pol�tica implica
exigencias a las empresas extranjeras a conceder en los reclamos porque
evidentemente hay un temor a la pujanza que puede asumir este movimiento. Los
dirigentes chinos est�n entre la espada y la pared. Por un lado tienen este
movimiento y por otro necesitan mantener el salario bajo porque sino los
capitales del mundo y de China se van para Tailandia, Filipinas, Vietnam.
Entonces tienen que hacer un equilibrio y lo importante es el surgimiento de
este movimiento, por eso es tan conflictiva su expresi�n a trav�s de Internet,
por eso se habla tanto de los internautas chinos que por un lado los quieren
prohibir pero al mismo tiempo no pueden interferirlos como ocurri� con las
rebeliones �rabes. Ese podr�a ser el nexo de los movimientos sociales chinos con
el resto del mundo que todav�a es una cuenta pendiente.
La econom�a extractivista es destructiva del medio ambiente y el empleo
MH: Quisiera pasar a Am�rica Latina. El mes pasado escribiste un art�culo
importante, "Los atolladeros de la econom�a latinoamericana", donde se�alabas lo
que denominar�a el tal�n de Aquiles estructural de nuestra econom�a,
refiri�ndote al extractivismo y la baja calidad de los nuevos empleos.
CK: La econom�a latinoamericana est� enganchada al motor chino pero no es China.
Le est� ocurriendo lo mismo que a algunas econom�as exportadoras de otras
regiones que reorientaron su actividad en funci�n de la demanda china de
materias primas.
De repente, Argentina tiene tasas de crecimiento del 8/9% y parece que es China
pero �sta compra la soja argentina y la utiliza para el desarrollo industrial.
No tenemos que confundir econom�as de base rentista que siguen creciendo con
econom�as de base industrial que est�n creciendo. No es lo mismo una econom�a
del sudeste asi�tico que desarrolla su manufactura que la econom�a rusa que
depende del petr�leo o la brasilera/argentina que dependen de la soja.
Ha ocurrido que hay una revalorizaci�n latinoamericana del modelo
agro-minero-exportador en momentos que en el mundo ya se conocen sus efectos
demoledores sobre el medio ambiente. En otra �poca solo se criticaba su car�cter
primarizador o extractivista, que ser�a la denominaci�n m�s correcta, en la
actualidad se pone el acento sobre el efecto destructivo al medio ambiente y
nocivo para la creaci�n de empleo, porque no solo cuando se tala un bosque o
desarrolla la miner�a a cielo abierto o se utiliza cianuro para extraer
productos del subsuelo, se destruye el entorno natural, sino que esas
actividades no generan empleo. Son actividades altamente tecnificadas y eso vale
tambi�n para el agro argentino.
La diferencia entre el modelo econ�mico actual y el exportador de principios del
siglo XX, es que en �ste ven�an inmigrantes a poblar la Argentina para trabajar
la tierra, en la actualidad, no se necesitan. Es un modelo sin mano de obra, sin
campesinos. Es una producci�n absolutamente tecnificada, con el agroqu�mico como
insumo y el tractor y la maquinizaci�n plena para la extracci�n del producto.
Hablamos de los pooles de siembra. No hay empleo ni en el agro ni en la
industria agr�cola.
MH: Me viene a la mente la imagen de los patrones del campo que anta�o a la
ma�ana iban a recorrer y ver c�mo andaban las cosas y ahora se levantan a las
11:00 para ver las cotizaciones de los granos por Internet o alg�n canal de
cable.
CK: Es lo que se vio en Argentina en el conflicto de 2008. Cuando uno empez� a
conocer un poco en las ciudades que el tipo de trabajo rural actual requiere muy
poca gente y tiene un nivel de calificaci�n semejante al de las ciudades pero
cuyo producto solo genera enriquecimiento a un grupo minoritario que despu�s
invierte en compras de departamentos en Puerto Madero, es decir, ese circuito no
genera empleo y el efecto es una migraci�n rural y una degradaci�n de las
condiciones de vida de los campesinos que pierden su terru�o cuando la frontera
de la soja se ampl�a en el Chaco o Formosa. Paralelamente en las ciudades, un
acrecentamiento de la marginalidad urbana porque no se crea nuevo empleo y viene
el campesino expulsado por la soja. El efecto es un c�rculo vicioso de desempleo
y creaci�n de renta despilfarrada por los grupos exportadores.
MH: �Este modelo no se enfrenta de alguna manera al que podr�amos denominar
neodesarrollista?
CK: En algunos pa�ses se est� intentando hacer algo de ese tipo, Argentina es
uno de ellos. El modelo del gobierno actual intent� poner un l�mite al modelo
agroexportador, de all� la gran confrontaci�n del 2008. El choque entre el
gobierno y el sector agrosojero ten�a un fundamento econ�mico, donde el gobierno
intentaba priorizar una alianza con la Uni�n Industrial (UIA) y el uso de una
parte de las retenciones para invertir, lo que no hace el sector privado.
Sin embargo, es un modelo muy asociado al agroexportador, no hay una barrera
n�tida como en otra �poca, la de sustituci�n de importaciones. Ahora est�n muy
entrelazados. Por esa raz�n la UIA tom� partido por los agrosojeros durante el
conflicto con el campo. Al mismo tiempo, es un modelo que depende por entero del
subsidio del Estado porque las burgues�as locales de Argentina, Brasil o M�xico
tienen ua tasa de inversi�n interna muy baja, pr�cticamente no invierten. Esto
no es China, sino que m�s bien en el caso argentino aumentan los precios, fugan
capital y ante esta escasa inversi�n es el Estado que tiene que sustituir lo que
no hacen y eso genera un modelo que no arranca.
Otra dificultad grave es que est� muy enlazado internacionalmente, entonces es
muy dif�cil establecer barreras de protecci�n a la industria nacional como en
los �50/60. La Argentina y Brasil son parte del G20 y si suben las barreras
arancelaras no podr�an permanecer all�. Hay una asociaci�n que no exist�a antes
con el universo trasnacional. Son un conjunto de limitaciones muy fuertes a un
modelo de desarrollo industrial intenso en los pa�ses latinoamericanos.
En Argentina, la etapa sencilla del modelo concluy�
MH: Pasando a la Argentina se prev� un descenso al precio de la soja, un menor
crecimiento de Brasil y se habla de varios tipos de ajustes que se har�an
fundamentalmente en las tarifas y en los salarios.
CK: Es evidente que el modelo est� entrando en otra etapa. La etapa sencilla que
hubo entre 2003-7 como resultado de la crisis del 2001, concluy�. La etapa
problem�tica entre 2007-8/2010 tambi�n ha terminado porque la econom�a argentina
ya recuper� el nivel de consumo, de demanda y ahora hay que hacer las
inversiones necesarias para que el abastecimiento de esa demanda reconstituida
pueda ser satisfecho.
Hay un gran problema que se arrastra desde hace 2/3 a�os y es que la tasa de
inversi�n es muy baja en relaci�n a lo que se necesita para mantener el consumo
actual. Como eso no est� ocurriendo la tasa de inflaci�n es muy alta y ah� hay
un punto cr�tico porque a su vez deteriora el tipo de cambio, afecta el
super�vit comercial que ya no es el que hab�a antes y el Estado estuvo
sustituyendo a trav�s de subsidios a los sectores privados, especialmente en el
despilfarro de la energ�a que tuvimos en los �ltimos a�os y en la inversi�n al
transporte. Se ha dilapidado el dinero del Estado en subsidios al petr�leo que
no extra�an ni exploraban y en un sistema absolutamente perverso de fomentar la
producci�n automotriz y destruir el sistema ferroviario. Ahora todo eso hay que
pagarlo.
Se viene una reestructuraci�n de los subsidios, un incremento del tipo de cambio
en relaci�n a la inflaci�n, una pol�tica pro empresaria y no conciliadora con
los sindicatos. Hay una nueva etapa mucho m�s conflictiva, de mayor tensi�n del
gobierno con las organizaciones gremiales para poner un techo a los aumentos
salariales y no a los beneficios empresarios.
Pero vamos a ver qu� intensidad tiene esto. No podemos pronosticar hoy cual va a
ser la profundidad de este cambio. Viene un cambio pero no sabemos cu�n
profundo, cu�ntas tensiones va a generar. Digo esto porque un atisbo del
problema actual ya lo vimos en 2009 cuando la crisis internacional tuvo un
impacto en la Argentina, hubo recesi�n durante un a�o pero el modelo no sufri�
efectos significativos.
La pregunta es si ahora se va a reproducir lo que pas� hace 2 a�os o se viene un
impacto mayor. Por ahora no lo sabemos porque no sabemos cu�nto va a caer el
precio de la soja, cu�nto se va a frenar Brasil y qu� magnitud tienen los
desequilibrios argentinos que deben resolverse. Pero ya o hay el mismo super�vit
que antes ni el excedente fiscal ni el margen de maniobra pero hay un nivel de
reservas como nunca tuvo la Argentina. Un escenario que todav�a nos sigue siendo
favorable y un nivel de endeudamiento limitado que tampoco ten�amos en otra
�poca. Por lo tanto, si uno junta todos estos elementos habr� un cambio pero
todav�a es complicado definir cu�l ser� su efecto final.
Creo que vamos a transitar un a�o muy interesante. Me parece que seguimos
estando entre los pa�ses en mejores condiciones para los movimientos sociales,
para aportar al escenario turbulento que se viene. Tenemos movimientos sociales
que siguen con una pujanza importante. El pa�s ha vivido una transformaci�n
importante en los �ltimos a�os y se han logrado conquistas democr�ticas y
sociales significativas. Me parece que podemos seguir avanzando por un rumbo
positivo de construcci�n desde debajo de un proyecto de izquierda que tiene un
buen escenario regional e internacional para afrontar los desaf�os del pr�ximo
per�odo.
MH: �Est�s preparando un nuevo libro?
CK: No ya sale. Se llama Bajo el imperio del capital, es un an�lisis de las
teor�as contempor�neas del imperio y el imperialismo.