Santa Fe. Reforma curricular educativa inconsulta enciende la
polémica: Los socialistas no tienen historia
Juan W. Balmaceda
REDACCION ROSARIO
¿Qué dirían ayer los próceres del Partido Socialista de la Argentina, el primero
en América, al leer la reforma curricular de las escuelas medias que intenta
implementar actualmente el gobierno provincial de Santa Fe? ¿Qué diría Juan B.
Justo si se enterara que los jóvenes santafesinos no supieran nada de las
civilizaciones egipcias, griegas o romanas? ¿Cómo se mantendría el bigote
erguido de Alfredo Palacios al enterarse de que las "reformas" de los
reformistas no fueron consultadas casi con nadie? Como respuesta a la propuesta
de reducir la materia historia a su mínima expresión habrá una movida de
protesta de docentes, el próximo miércoles, en la sede local de la gobernación.
¿La enseñanza de historia reducida a sólo un año? ¿Cuatro horas semanales para
enseñar lo que sucedió en el mundo –léase mayoritariamente Europa y América–
desde la Edad Media hasta el presente?
¿Qué pensaría José Ingenieros si observara la fundamentación hecha para la nueva
currícula? Éste último seguro expresaría: "¡¿Qué hombre mediocre recortó y pegó
textos para justificar algo injustificable, soslayando procesos, autores,
especialistas en la materia, y por encima de todas las cosas, a los propios
docentes de historia?!".
Para sorpresa de las autoridades del Ministerio de Educación provincial, un
conjunto de instituciones relacionadas con la enseñanza y producción de la
historia (representantes de las universidades e institutos terciarios y
secundarios) mostraron su inquietud y su disconformidad acerca del cambio que se
planea imponer a través de los medios periodísticos para lograr una reunión con
la ministra de la cartera educativa provincial, Leticia Mengarelli, de la que no
tuvieron respuestas concretas, por lo que convocan a una nueva reunión frente a
la Sede del Gobierno de la Provincia de Santa Fe en Rosario (Santa Fe 1950) para
entregar documentación de tipo institucional que refuerce el fundamento de la
oposición.
A todo esto, ¿qué es lo que busca reformar el cambio curricular? Los docentes de
historia habían imaginado dar marcha atrás con el proyecto implementado durante
la década de 1990, con Menem y el neoliberalismo a la cabeza. El atroz recorte a
las horas de historia se cristalizó en que antes se daban cuatro horas semanales
de historia durante primero, segundo y tercer año de la, por entonces,
secundaria. Con el menemismo y la célebre "Ley Federal de Educación", la materia
historia se unificó con geografía y se achicó a dos horas en primero y dos en
segundo año, del denominado Polimodal (con sus respectivos octavo y noveno año).
Allí fue cuando se dejó de enseñar historia antigua por lo que ya tenemos más de
una generación que no saben nada acerca de las civilizaciones de la "Medialuna
de las tierras fértiles", por nombrar alguna. Sumado a esto, se volvió difícil
enseñarles a los estudiantes secundarios en un mismo año y con pocas horas por
semana historia medieval, Renacimiento, el mundo precolombino, la llegada y
conquista de los europeos a América, el llamado "absolutismo real", la
Revolución industrial, etc.
Los docentes de historia hacen verdaderas piruetas para hacerles comprender a
los alumnos secundarios qué características tenían las sociedades medievales,
precolombinas o la inglesa y francesa de fines del siglo XVIII, para que los
estudiantes entiendan los procesos por los cuáles muchas personas pasaron de ser
siervos de la gleba o nativos americanos (entre los de otros continentes
colonizados por europeos) para transformarse en ciudadanos de las presentes
sociedades capitalistas. Tal vez muchos deben pensar que aún se enseña la
historia únicamente reducida a fechas de acontecimientos políticos y militares.
Así y todo sería una tarea difícil de llevar a cabo. Pero, desde hace muchísimos
años ya (esto ya es historia) se enseña la historia a través de procesos que
llevan a la comprensión, es decir, entender por qué los hombres y las mujeres
llegaron a ser lo que son en el presente. ¿A qué se deben los derechos
adquiridos? Por supuesto, los adolescentes no son computadoras a pesar tienen
una adaptación asombrosa al mundo de la computación. Su desarrollo cognitivo
debe atravesar un proceso que las modificaciones curriculares del menemismo y
del actual gobierno provincial, no respetan.
Así las cosas, hoy por hoy, el profe "José
chicosatiendanquenovanaentenderelcapitalismo" y la profe "Estaleyfueelresultadodeunalargaluchaporlosderechoselectorales"
seguro se las van a ver en figurillas para intentar hacerles comprender a los
muchachos y muchachas de alrededor de 14 años los cambios ocurridos en tanto
tiempo.
Es cierto que los docentes aprendieron a "adaptarse" y ampliaron su radio de
acción a psicólogos, pedagogos, asistentes sociales, etc. Ahora, la esperanza
estaba centrada en poder trabajar para lo que fueron preparados. Y no cierran
los parches que intentan poner. "Lo que no se puede dar en ese año que pase a
los siguientes", se escuchó por ahí. No, hay que armar un buen plan de enseñanza
que contemple todas las cuestiones. También es verdad que los profesores durante
el año van haciendo retoques de acuerdo al conjunto de alumnos que tienen cada
año, pero no podemos exigirles que hagan malabares.
Es por esta razón, es que las instituciones y las personas interesadas en que se
respete y aumente la curricula de historia, se darán cita este miércoles 21 de
diciembre, a las 10.30, en la sede de Gobernación. Un documento presentado a las
autoridades aclarará las inquietudes que definen por qué es necesario planificar
una buena enseñanza de la historia en Santa Fe.