El jueves, como lo hacen desde aquel 30 de abril de 1977,
las Madres marcharon en la Plaza de Mayo, acompañadas por militantes,
estudiantes y docentes de la Universidad Popular, trabajadores y un amplio
público. En su discurso tras la marcha, Hebe de Bonafini, Presidenta de la
Asociación, se refirió al juicio ético y político contra los periodistas
cómplices con la dictadura que, minutos después, comenzaría en la misma Plaza
que las vio nacer: "Queremos reivindicar al periodismo, reivindicar la carrera
de comunicación, reivindicar a los periodistas", expresó Hebe para fundamentar
el principal objetivo de la actividad.
Juicio ético y político a los periodistas cómplices con
la dictadura
A las 17 en punto, y sobre un escenario montado frente a la Pirámide de Mayo,
Pedro Lanteri, director de La Voz de las Madres-AM 530, dio comienzo al juicio,
informando todos los que ya anteriormente habían realizado las Madres para
juzgar a aquellos que las justicia ordinaria aún se niega a condenar: los
militares genocidas, los médicos que asistieron a las salas de tortura, Martínez
de Hoz, ministro de Economía de la dictadura, entre otros.
Lanteri, que ofició como secretario del Juzgado, presentó
a la Presidenta del Tribunal, Hebe de Bonafini, y a los fiscales: el Dr. Sergio
Gandolfo, abogado de la Fundación Madres de Plaza de Mayo; la licenciada en
comunicación social, Lucia García; y el periodista Luis Zarranz, ambos
integrantes del Equipo de Prensa Madres.
Para comenzar, la fiscalía citó a declarar al licenciado
y periodista Hugo Ruano, como perito comunicacional, para que analizara –en base
a pruebas documentales- la construcción del discurso de los medios de
comunicación durante la dictadura.
Luego, y mientras la Plaza se iba colmando de gente
deseosa y ansiosa por ser parte del jurado, la fiscalía convocó a Claudia Acuña,
periodista de la cooperativa lavaca y de amplia trayectoria en diversos medios,
para que brindase testimonio.
"Mi hipótesis es que el plan criminal que llevó adelante
la dictadura incluyó a un grupo de medios y personas cuya tarea fue difundir,
sostener y justificar la máquina de terror", comenzó expresando. "Tomo como base
un caso testigo: el de la editorial Atlántida, por entonces propiedad de la
familia Vigil y editora de la revista Gente, en esos años dirigida por Samuel
Gelblung; la revista Somos, cuya edición política estuvo a cargo de Gustavo
Landívar y la secretaría de redacción la desempeñaron Héctor D’ Amico (hoy
secretario general del diario La Nación) y Jorge de Luján Gutierrez (hoy
director de la revista Gente) y la revista Para Ti, dirigida por Lucrecia
Gordillo y Agustín Botinelli", agregó.
Así, fue aportando al tribunal pruebas contundentes sobre
la complicidad de esa editorial con la dictadura. De esta forma, se leyeron
diversos artículos, por ejemplo, la absurda carta que publicó "El Gráfico", en
la que se falsificaba la firma de Ruud Krol, capitán de la selección holandesa
de fútbol, para refutar las acusaciones de la que denominaban "campaña anti-argentina".
"Este es el nivel que tiene el infierno. Es un insulto que esto se llame
periodismo, esto es propaganda, insulta a mi profesión", afirmó Acuña.
Además, aportó una serie de notas publicadas por la
editorial entre las que se encontraba una entrevista a Thelma Jara de Cabezas,
cautiva y torturada en la ESMA, a quien obligaron a hacer un reportaje para la
revista Para Tí. Otro caso similar fue el de la nota "Cómo viven los desertores
de la subversión" que Somos publicó en diciembre de 1977, con fotos de un
supuesto "centro de rehabilitación para extremistas". "Mostrar estas fotos
conociendo lo que fueron los centros clandestinos de detención da miedo", apuntó
Acuña.
La periodista también recordó cómo José Claudio Escribano
se pronunció en favor de la dictadura en 1981, ante la asamblea de la SIP
(Sociedad Interamericana de Prensa), leyó una editorial en la Máximo Gainza
Castro, director de La Prensa, tras sostener que "el éxito obtenido por las
Fuerzas Armadas contra la subversión es de pública notoriedad" consideraba sobre
la situación del país: "los derechos existen, las garantías constituciones
existen".
"No encuentro mejor manera de concluir todo lo que estas
pruebas representan que con las palabras que le dijo Risha Timerman al entonces
director de La Nación, Claudio Escribano. Fue cuando Risha asistió con sus hijos
a una reunión de la SIP realizada en 1981 para denunciar el arresto y las
torturas a la que era sometido su esposo Jacobo. Escribano, sentado en la
primera fila, desmintió su testimonio acusando a Risha de mentirosa ya que en
Argentina y en plena dictadura había libertad de expresión. Fue entonces cuando
Risha le dijo: ‘Nadie te pide tanto’.
‘Nadie les pidió tanto’ podríamos decirles hoy a quienes
ayer, 28 de abril de 2010, distinguieron a José Claudio Escribano como miembro
de la Academia Nacional de Ciencias Morales y Políticas", reflexionó con
contundencia, Claudia.
Posteriormente, la fiscalía citó a Néstor Busso,
presidente del Foro Argentino de Radios Comunitarias (FARCO) y del Consejo
Federal de Comunicación Audiovisual, órgano creado a partir de la nueva ley de
medios. Busso se refirió al sistema de medios en relación a la doctrina de
seguridad nacional y en función del mercado. Al respecto, hizo especial hincapié
en cómo los medios alentaron la Ley de Radiodifusión impuesta por la dictadura
el 15 de septiembre de 1980, que "benefició a los cómplices del Proceso", en
detrimento con las críticas que le propinan a la ley de medios de la democracia,
debatida y consensuada en diversos foros y aprobada por amplia mayoría en ambas
cámaras del Congreso, precisamente por democratizar la comunicación.
Luego, la fiscalía convocó al locutor y periodista José
María Schinocca para que leyera un texto de José Pablo Feimann, enviado ante la
imposibilidad de poder asistir a la actividad. El artículo refería a Mariano
Grondona, uno de los más acérrimos defensores y de la dictadura militar: "Como
ideólogo del sistema de la oligarquía agraria y ganadera, de la Iglesia, de la
oligarquía financiera empresarial y de la guerra que el Occidente cristiano
libraba contra la penetración marxista en el Continente, habría de defender a
todo aquel que, en el momento que fuera, encarnara la lucha contra esos
valores", pudo escuchar en un fragmento del texto.
Acto seguido, el fiscal Gandolfo convocó al estrado al
periodista de Página/12 Carlos Rodríguez, quien se refirió a Samuel "Chiche"
Gelblung por su papel como director de la revista Gente durante la dictadura.
Además, leyó una nota de felicitación del dictador Jorge Rafael Videla a la
revista por el papel que estaban desempeñando. Asimismo, hizo referencia a
Rolando Hanglin, quien en aquellos años hablaba en contra de "la campaña
antiargentina en el exterior.
El testigo, muñido de abundante prueba documental,
conservada en sus versiones originales, fue contundente y preciso para referirse
a la cobertura de la guerra de Malvinas y a lo que consideró el botín de la
complicidad entre la dictadura y los medios: Papel Prensa. Antes de terminar su
testimonio, Rodríguez mostró los partes que Rodolfo Walsh mandaba desde la
agencia Ancla a todas las redacciones. "Ningún periodista que haya trabajado en
esa época puede decir que no sabía lo que estaba pasando.", afirmó.
Por último, los fiscales convocaron al cuarto y último
testigo, el periodista y abogado Pablo Llonto. Al igual que los tres testigos
anteriores, Llonto brindó prueba documental de cada uno de sus dichos, que fue
mostrando al jurado a medida que brindaba testimonio.
Así, se refirió a Joaquín Morales Solá, al Grupo Clarín,
a Ernestina Herrera de Noble y a Magdalena Ruiz Guiñazú. En el testimonio hizo
alusión, por ejemplo, a la nota publicada en la tapa del diario Clarín en la
cual se afirmaba que "fueron abatidos cinco extremistas". Tres de esos supuestos
"extremistas" para el diario Clarín tenían entre 6 meses y 6 años de edad, lo
que demuestra la canallada de la nota.
Sobre el actual editorialista de La Nación y ex jefe de
la sección Política de Clarín durante la dictadura, Llonto mostró fotos en las
que se lo veía con el represor tucumano Antonio Domingo Bussi en un "agasajo"
para los medios.
También recordó que actualmente hay un caso abierto a
cargo del juez federal Daniel Rafecas en el que se investiga cómo se hizo una
nota en la que un periodista de Clarín dice que ingresó a un centro clandestino
de detención y entrevistó a detenidos. "El jefe de la sección política del
diario en aquel momento era Morales Solá", apuntó.
Llonto aportó, además, una grabación de un reportaje que
Magdalena Ruiz Guiñazú hizo a Videla, en 1977, cuando cubrió un viaje que el
dictador hizo a Estados Unidos. "Señor presidente, usted mencionaba la forma
distorsionada que en el exterior se presenta nuestra realidad", se oyó decir a
Ruiz Guiñazú.
Posteriormente los fiscales Luis Zarranz y Lucía García
leyeron el alegato acusatorio, tras escuchar los testimonio y las pruebas de los
testigos: "Esta fiscalía pretende subrayar que este juicio ético y político no
está dirigido a la totalidad de los periodistas que actuaron en la dictadura, en
cuanto trabajadores de prensa, sino que como se ha evidenciado a lo largo de la
declaración de los testigos, procura juzgar a las empresas periodísticas, a sus
propietarios y a aquellos periodistas que ocupaban cargos con poder de decisión
dentro de esos medios; es decir, no los trabajadores de prensa que sufrieron la
dictadura, sino a quienes la convalidaron con sus palabras, sus opiniones, sus
acciones", aclararon.
"Es indiscutible que no hay dictaduras posibles sin
complicidad mediática. Es esa cuestión nodal lo que esta fiscalía, con el
valioso y valiente testimonio de cada uno de los testigos, pretende juzgar. El
asunto más delicado que aquí se nos plantea es el que refiere a la
responsabilidad que hizo posible que se secuestrara, torturara, matara y
desapareciera a miles de personas en el más tenebroso de los silencios
periodísticos. Peor aún, muchos sostenían por entonces que en Argentina había
libertad de prensa", agregaron
"En otras palabras: el genocidio también fue posible
porque los desaparecidos fueron desaparecidos de los diarios, de las radios y de
los programas de televisión. Es ahí donde el rol de los medios y de muchos
periodistas adquiere una dimensión tremenda, criminal, atroz. ¿Qué es ser
periodista si no contar lo que pasa?", leyeron.
Además, pidieron como medida complementaria "que se
impulse la creación de un archivo de la prensa y de los periodistas durante la
dictadura, para que todos aporten los materiales de sus trabajos desde el 24 de
marzo de 1976 a fin de que las generaciones siguientes sepan bien qué se ocultó
y qué se hizo"
El archivo estará disponible en la Universidad Popular
Madres de Plaza de Mayo y en Internet.
"El periodismo no está ni por encima ni por fuera de la
sociedad. Y el desempeño de los periodistas es materia tan opinable como el de
cualquier otro profesional. Por último, a todas y todos los presentes, les
decimos citando a Rodolfo Walsh: ‘Reproduzca esta información, hágala
circular por los medios a su alcance. Mande copia a sus amigos; nueve de cada
diez las estarán esperando. Millones quieren ser informados. El Terror se basa
en la incomunicación. Rompa el aislamiento. Vuelva a sentir la satisfacción
moral de un acto de libertad’, cerraron.
Acto seguido, el Dr. Gandolfo elevó el pedido de condena
"contra la prensa cómplice con la dictadura militar representada en las empresas
Clarín, propiedad de Ernestina Herrena de Noble y Héctor Magnetto, La Nación,
propiedad de las familias Mitre, Noble Mitre de Saguier y Saguier; Editorial
Atlántida, propiedad de la familia Vigil; Editorial Perfil, propiedad de la
familia Fontevecchia; La Nueva Provincia (Bahía Blanca), propiedad de la familia
Massot. Asimismo a los periodistas que hablaron a favor y fueron complacientes
con la jerarquía del terrorismo de estado en la argentina por atentar contra la
verdad y la valentía periodística. Entre ellos: Mariano Grondona, Claudio
Escribano, Joaquín Morales Solá, Magdalena Ruiz Guiñazú, Samuel Gelblung,
Vicente Massot y Máximo Gainza Castro, y no excluyendo de la acusación a todos
los demás periodistas y medios que han participado en el encubrimiento del
terrorismo de estado. Por eso solicitamos que al momento de solicitar sentencia
se los condene como traidores al pueblo de la nación argentina"
Tras la acusación, Lanteri convocó a los imputados a que
hicieran uso de la defensa pero ninguno de ellos se presentó a hacerlo. Así, el
jurado –compuesto por las Madres y el público presente- levantó las manos para,
finalmente, condenar por unanimidad a todos los imputados.
Por último, Hebe de Bonafini, como presidenta del
Tribunal brindó los argumentos políticos de la condena: "Hemos hecho un juicio
ético y político irrefutable. Están las pruebas al alcance de todos. Los
valientes compañeros que se animaron a venir y a denunciar nos dan las pautas de
que las Madres tenemos razón".
"Desde este lugar, desde esta Plaza que nos dio el
nombre, donde habitan permanentemente nuestros hijos, donde nos esperan cada
jueves cuando llegamos, donde están sobrevolando seguramente aquí y han
inspirado al jurado y a los compañeros que vinieron a denunciar, estoy
convencida que en un tiempo no muy lejano los periodistas habrá también un
juicio donde los periodistas pidan perdón. Perdón por tanta ignominia, perdón
por tanta basura, perdón por haber avalado la tortura. Perdón, eso es lo que
haría falta que hagan algunos, aunque no alcanza, pero sería muy bueno que se
reunieran algunos periodistas".
Luego, Hebe añadió: "Reivindicamos a todos los
periodistas que desaparecieron por alzar su voz, por darle valor a la palabra
periodistas, reivindicamos a todos los trabajadores de prensa despedidos hoy en
muchos medios de comunicación. Estamos aquí compañeros trabajadores de prensa,
las Madres para acompañarlos. Sabemos, estamos convenidas que esta Plaza es la
plaza del pueblo donde el pueblo reclama y exige. Falta tan poquito para el
Bicentenario donde el pueblo gritó ‘queremos saber de qué se trata’. Hoy, aquí
queríamos saber de qué trabajaba y lo hemos conseguido".
"Lo decimos las Madres, ustedes, lo dicen nuestros hijos:
culpables, culpables de haber traicionado al pueblo, de haber permitido que se
mate y se torture, culpables de haber silenciado el horror. Gracias a todos los
que vinieron, gracias a todos los periodistas que sintieron que este juicio era
serio. Vamos a seguir compañeros, el próximo es el juicio a los jueces",
concluyó entre aplausos.
Inauguración del microcine "Che Guevara" en el Espacio Cultural Nuestros
Hijos
La Asociación Madres de Plaza de Mayo comenzó su día de aniversario, por sus
33 años de lucha, con la inauguración del microcine "Che Guevara" en el Espacio
Cultural Nuestros Hijos (ECuNHi).
De la actividad participaron la Presidenta de la Nación,
Cristina Fernández de Kirchner; el ministro de Educación, Alberto Sileoni; el
Secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli; el Secretario de Derechos
Humanos, Eduardo Luis Duhalde; la directora del Espacio Cultural Nuestros Hijos,
Teresa Parodi; autoridades nacionales, trabajadores de la Misión Sueños
Compartidos y, por supuesto, las Madres.
La Presidenta de la Asociación, Hebe de Bonafini, junto a
Teresa Parodi, recibieron a la Presidenta con quien recorrieron el Espacio
Cultural, transformado por las Madres en un lugar pleno de vida, tras haber sido
el emblema de la muerte.
Tras inaugurar el microcine "Che Guevara", Hebe y
Cristina se trasladaron al auditorio donde hablaron ante la multitud emocionada
por celebrar los 33 años de lucha de las Madres.
Allí, Hebe señaló: "En un lugar donde hubo muerte, fuimos
capaces de darle tanta vida". "Llegó el momento muy esperado", expresó luego
tras recordar que el ex presidente Néstor Kirchner "fue quien hizo efectivo que
las Madres tuviéramos este lugar". "La visita de Cristina era indispensable",
agregó.
"Queríamos mostrarle que un lugar tan desolado, tan
inhóspito, tan horrible, tan desmantelado, donde hubo muerte, fuimos capaces de
darle tanta vida, y donde no se nota que hubo muerte, porque ahora nace la vida,
con los talleres, con los compañeros, con los trabajadores", dijo.
Con voz quebrada por la emoción, la titular de la
Asociación Madres de Plaza de Mayo expresó a la Presidenta: "Gracias Cristina
por haber venido a darnos este aliento, tu visita es un aliento enorme, como
para poder seguir, para saber que este el camino".
"Todos te queremos mucho, todos sabemos que el proyecto
tuyo es el nuestro, el de todos los que estamos acá y lo vamos a defender con la
vida".
Posteriormente, y tras un abrazo interminable con la
Presidenta, Cristina expresó: "Los que tenemos que darle las gracias a ustedes
somos los argentinos porque fue con su esfuerzo que comenzaron, hace 33 años hoy
a hacerle conocer a los argentinos y al mundo lo que pasaba en nuestro país".
"Aquí la dictadura militar fue derrotada por sus propias
víctimas, por los muertos que representaron las Madres de Plaza de Mayo y por
los otros muertos, los combatientes de Malvinas", dijo la mandataria.
Por otro lado, la Presidenta denunció que "hace tiempo"
que hay sectores que "están buscando alguna víctima en Argentina" y aseguró que
"mientras sea presidenta" no dará "ninguna orden" para reprimir protestas "por
más mínima representación que tengan".
"En Argentina cualquiera puede decir lo que se le dé la
gana sin temor a ser reprimido ni golpeado", afirmó, y aceptó que "da bronca
tener que ir al trabajo y no poder, o que te descuenten el sueldo si llegás
tarde o simplemente querer transitar libremente y no poder por pequeños grupos
sin representación" que buscan que "alguien los reprima".
La presidenta Cristina Fernández expresó su "fuerte
esperanza" de que "el sistema judicial argentino subsane la decisión que no
entra en ninguna biblioteca de interrumpir" la aplicación de la Ley de Servicios
de Comunicación Audiovisual y "prontamente" se pueda poner en vigencia esa
norma.
En este sentido, la mandataria afirmó que en el país aún
no se ha podido lograr la libertad de expresión y sostuvo que su plena vigencia
implicaría que "absolutamente todas las voces pudieran escucharse en todos los
lados", algo que "todavía no podemos hacer porque no se puede aplicar la ley que
fue votada por una mayoría transversal" en el Congreso.
Luego, aseguró que nunca hubo en Argentina tanta libertad
de expresión como bajo su presidencia, pese a "tantas cosas" que se han dicho
sobre su persona. "Si hay un ícono para ver dónde queda expresada con mayor
magnitud la libertad de expresión es esta presidenta. No recuerdo en la historia
argentina que se han dicho tantas cosas como se dijeron sobre mi persona", dijo
la mandataria. Recordó que incluso, durante su presidencia, se avanzó en este
sentido al "ser sancionada por el Congreso el proyecto de ley que quitaba la
pena de cárcel por la figura del desacato".
Cristina Fernández también remarcó que "la libertad de
expresión es para todos en la República Argentina" porque son "las reglas de
juego de la democracia". No hay una categoría especial de ciudadanos sobre
otros", advirtió la Presidenta y subrayó que "las reglas de juego" de la
democracia habilitan a todos a expresarse.
"Algunos se creen propietarios de la libre expresión y
que tienen el derecho sólo ellos a hablar de otros", añadió.
Inauguración de los nuevos estudios de La Voz de las Madres
En un sencillo y emotivo acto, las Madres también inauguraron, este viernes
30 de abril, los nuevos estudios de La Voz de las Madres-AM 530, en Adolfo
Alsina 1490.
En los próximos días la emisora mudará sus equipos para
poder transmitir en su nuevo edificio, dotados de dos estudios, además de
amplias comodidades para el servicio informativo y la producción periodística.
De la ceremonia participaron las Madres; Pedro Lanteri,
director de la emisora; Julio Piumato, Secretario de Derechos Humanos de la CGT;
la Secretaria de Prensa de la Embajada de Cuba; Luis Lázzaro, coordinador de la
Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual; Carlos Girotti,
integrante de "Carta Abierta"; Néstor Busso, presidente del Consejo Federal de
Comunicación Audiovisual; Marino Santa María, autor del mural sobre la fachada
del edificio, descubierto ayer; los trabajadores y arquitectos de la Misión
Sueños Compartidos que hicieron la obra; y trabajadores de las radios La voz de
las Madres, Cooperativa, Radio Gráfica, Encuentro (Viedma), FM Bajo Flores, FM
La Milagrosa
Allí las Madres expresaron su satisfacción por el
crecimiento de la radio, felicitaron a los trabajadores y arquitectos que lo
materializaron y a todos los integrantes de la radio y brindaron por el nuevo
edificio, de amplias y cómodas instalaciones.
Las Madres parieron un hijo que crece y que aunque
todavía no cumplió los 5 años, ya se fue a vivir solo. En su nueva casa, y con
nueva antena, la 530 gritará más fuerte y continuará siendo la Voz de las
Madres, de los 30.000 y de todos y todas quienes luchan por un país y un mundo
mejor.
Celebración de la lucha
Para coronar estas jornadas de lucha y festejo, a las 18:30 horas del
viernes, en la Plaza Congreso, justo enfrente de la Casa de las Madres, las
amigas y los amigos se reunieron a compartir la alegría de tanta vida.
Osvaldo Bayer dirigió las primeras palabras a las Madres,
"no se rinden", dijo "y cada vez plantan un árbol más" refiriéndose a los
numerosos sueños que las Madres han concretado en los últimos años: la
Universidad Popular ahora reconocida oficialmente, la Radio y su flamante nuevo
edificio, el ECuNHi y la Misión Sueños Compartidos que genera trabajo digno y
vivienda de calidad.
"Madres queridas, ya habéis entrado por la puerta grande
de la historia con aquellos que marcaron huellas en la defensa de la vida y de
la ética."
Luego fue el turno de Inés Vázquez, Rectora de la UPMPM,
quien aludió al "parte aguas" que inauguraron las Madres en abril de 1977. Y
agregó que el 30 de abril y el 1° de mayo, no solo por su cercanía en el tiempo,
"alguna vez se van a festejar juntos". Y concluyó "la diferencia de las Madres
es la diferencia entre la vida y la muerte, entre la generosidad y la traición,
entre la degradación capitalista y la dignidad revolucionaria."
Renato De Nicola, integrante de la Caravana de Kabawil,
que vino de Italia a acompañar los festejos por los 33 años de las Madres,
expresó que del viaje anterior en 2007 encontraron muy avanzada la construcción
de viviendas. "Encontramos gente feliz, que puede elegir", apuntó. "Nuestra
caravana se llama Con las Madres cultura y revolución, porque para nosotros las
Madres son una eterna revolución cultural. Ellas rompieron los esquemas" agregó.
Teresa Parodi fue la siguiente oradora, y poeta como es,
leyó un bello texto que les dedicó a los pañuelos blancos, "porque sin ustedes,
otra hubiera sido la historia de la Argentina, otro el porvenir de nuestros
sueños, otra la esperanza que no se rinde, otro el país que todavía estamos
buscando".
El cierre estuvo a cargo de Sergio Shocklender, que
agradeció "a las Madres que nos marcan el camino porque están en la primera
trinchera de lucha contra los poderosos."