A lo largo de los años fueron los uniformados quienes quedaron en la primera
línea del repudio popular por las atrocidades cometidas durante el terrorismo de
Estado. Indudablemente fueron ellos que portaron las armas, las picanas, los que
dirigían los campos de concentración, y piloteaban los aviones que arrojaban a
los compañeros y compañeras al mar.
Pero si hay una figura, sin gorra, fusil o charretera que simboliza el genocidio
es el superministro de Economía de la dictadura militar. Como dijo un compañero
ex detenido-desaparecido: No fue Videla quien puso a Martínez de Hoz sino que
fue Martínez de Hoz quien puso a Videla.
Rodolfo Walsh describió la situación en el primer aniversario de producido el
golpe de Estado cargando sobre las verdaderas razones del genocidio: "Estos
hechos, que sacuden la conciencia del mundo civilizado, no son sin embargo los
que mayores sufrimientos han traído al pueblo argentino ni las peores
violaciones de los derechos humanos en que ustedes incurren. En la política
económica de ese gobierno debe buscarse no sólo la explicación de sus crímenes
sino una atrocidad mayor que castiga a millones de seres humanos con la miseria
planificada".
Años después, cuando en nuestro país las leyes garantizaban la impunidad, la CTA
ante la Audiencia Nacional de España describió como las grandes empresas y
grupos económicos fueron ideólogos y cómplices de la tiranía
oligárquica-militar, haciendo de sus Comisiones Internas el objetivo principal
de la represión para desarticular la organización de la clase trabajadora e
imponer el modelo económico social en marcha. En nombre de ellos y por ellos
gobernó Martínez de Hoz.
Su detención es motivo de alegría de todo el campo popular, aunque sea producto
de su responsabilidad por la prisión y tortura de dos personas y no por la
aplicación del "genocidio por planificación de la desigualdad".
Pero nos sirve. Por un lado para que no haya impunidad en el caso que se le
adjudica pero por otro, para poder hacer visibles los eslabones de la cadena del
genocidio que llegan hasta estos tiempos.
Detrás de cada pibe con hambre, quebrado por el paco o con su destino marcado
por la marginación y la miseria está la figura de él, extendiendo su sombra
desde aquel 24 de marzo, como el cuervo de esa famosa foto -que recorrió el
mundo hace unos años- que esperaba el desenlace parado a la espalda de un chico
africano doblado por la inanición.
Uno de los símbolos del capitalismo en su faceta más salvaje está preso, motivo
de sobra para festejar y seguir construyendo organización popular para derrotar
a los que aún hoy se siguen beneficiando con el hambre de nuestro pueblo.
Ricardo Peidro es secretario de Derechos Humanos de la CTA.
Foto: Argentina, Dictadura militar, economía - José Martínez de Hoz, ministro de
economía durante la dictadura encabezada por Jorge Rafael Videla. / Fuente
imagen: UDESA