Catamarca: Pueblada en Andalgalá, detenidos y heridos por
represión y luchas callejeras contra la megaminería
INFOSUR
Luego de una convocatoria de más de 4000 personas en la ciudad catamarqueña, la
policía provincial de Catamarca y Gendarmería Nacional reprimieron a los
autoconvocados de Andalgalá, El Potrero y Chaquiago, para desalojar la ruta que
lleva al megayacimiento Agua Rica, cortado desde diciembre. La represión disparó
luchas callejeras y unas 400 personas se movilizaron al corte. Hay más de 15
detenidos y varios heridos -entre ellos un niño que es trasladado a la capital
provincial-, según denuncian los mismos asambleístas. Este martes habrá
asambleas.
Desde el viernes pasado, cuando la fiscal Martha Nieva se hizo presente para
comunicar la orden de desalojo, los asambleístas se mantuvieron al costado de la
ruta, en un campo perteneciente a un miembro de los autoconvocados, y afirmaron
que no permitirían pasar camiones y maquinaria de la empresa minera. Pero este
lunes al mediodía, la empresa avanzó con su equipamiento hacia la zona del
corte, acompañada por móviles policiales, mientras se iban levantando retenes a
lo largo del camino, que provocaron por unas horas el aislamiento en la zona de
represión.
Ya por la tarde, una vez frente a los asambleístas, que no permitieron el paso
de la maquinaria, actuaron las fuerzas de choque policiales y de gendarmería,
con perros y equipos especiales para reprimir, con balas de goma y gases
lacrimógenos, ocasionando varios heridos y más de 15 detenidos.
Entre los heridos, se cuenta a un niño de apellido Paz, que estaría grave y fue
trasladado de inmediato a la capital provincial, según informaron los
asambleístas. En tanto, entre los detenidos, se encuentran el profesor Mario
Pacheco, Raúl Martínez, Patricia Álvarez de Figueroa, Teresita Nieto, el
ingeniero del INTA, Juan Colica, y el comerciante Flabio Verdel. Los vecinos
ubicados frente a la comisaría de Andalgalá son testigos de los primeros
detenidos por la gendarmería.
Los retenes no funcionaron por mucho tiempo y finalmente, centenares de personas
alcanzaron el lugar del corte, atravesando un largo camino viejo para sortear
los retenes policiales. Una vez llegados los vecinos, los efectivos policiales
se retiraron del corte. Allí, asambleístas aún resisten e impiden que circule la
máquina minera usada por la policía como pretexto para reprimir.
Sin embargo, las luchas continuaron en la ciudad de Andalgalá. Según relató uno
de los asambleístas a InfoSUR, las luchas callejeras y protesta de los vecinos
se convirtió en una pueblada. La furia desatada por la represión policial devino
en amontonamientos enfrente de la comisaría, ataques a la sede de la empresa
minera y a la municipalidad local, frente la total ausencia de las autoridades
locales. Aparentemente, el párroco habría salido a calmar las aguas, pero fue
corrido por "ser un emisario del obispo de Catamarca, socio de las mineras".
"Que se cuiden los cipayos vende patria. Ellos son los únicos responsable de
todo esto. El fiscal vio toda la represión, pero no nos quiere atender ante el
reclamo por los detenidos. Nosotros vamos a seguir en la lucha aunque no les
guste. La policía de Andalgalá y la de la provincia vinieron a proteger a los
mineros y promineros", se quejó un vecino. "Sabíamos que iba a llegar el momento
que el aparato represor a servicio de los intereses de este modelo de desarrollo
devastador se haga presente con su brazo mas tosco, la institución policial,
bajo las ordenes directas del gobernador, el ministro Silva, el intendente Perea
y el juez Cecenarro; así como sucedió y sucede en distintas latitudes de América
Latina y Argentina, como con los compañeros de La Rioja y tantos lugares en
donde la gente va tomando conciencia, se manda a reprimir con la policía",
sostuvo un asambleísta. Asimismo, desde organizaciones asamblearias, aseguraron
que "ante esta brutal represión al pueblo que está en defensa del territorio,
ante esta violación a nuestros cuerpos, porque pretenden hacernos silenciar, aún
con represión y con detenciones, los pueblos se levantan y no callan."
Este martes temprano, arrancaron los encuentros asamblearios, para definir el
rumbo a seguir. Hasta anoche, había gran preocupación de los andalgalenses, a
raíz de la desaparición del asambleísta Aldo Flores, un viejo activista contra
la minería que días pasados "recibió fuertes amenazas y bravuconadas
policiales", según denunciaron.