Argentina, la
lucha continua....
|
El derecho a decidir en Chubut
Alejandra Waigandt
Artemisa
Una adolescente embarazada producto de una violación en Chubut pudo abortar el
viernes. Fue necesario un fallo del máximo tribunal judicial de la provincia
para que la práctica se llevara adelante. Hay otra chica con más de 20 semanas
de gestación debido a abusos sexuales reiterados que quiere abortar, pero
nuevamente un juzgado de Comodoro Rivadavia ha negado a la víctima el derecho a
interrumpir el embarazo.
Una joven de 15 años violada por su padrastro en Comodoro Rivadavia pudo abortar
el viernes en el Centro Materno Infantil de Trelew, debido a un fallo del
Superior Tribunal de Justicia de Chubut, que avaló la práctica. La intervención
se realizó cuando la adolescente sobrellevaba 18 semanas de gestación. Semanas
antes, el hospital regional y la Justicia le habían negado el derecho a
interrumpir el embarazo, poniendo su vida en riesgo. Ese mismo viernes
trascendió un caso similar, una nueva víctima de violación por un familiar
directo, pero que soporta 22 semanas del producto del abuso, y otra vez la
Justicia en primera instancia falló en contra de la voluntad de abortar de la
joven.
Conocido por las iniciales A.G., el primer caso generó una fuerte polémica en
torno al aborto, pero llegó a su fin el viernes, cuando una médica ginecológica
interrumpió la gestación en el hospital dependiente del área de salud de Chubut.
Si bien la adolescente se encuentra fuera de peligro, la intervención podría
haberse concretado durante las primeras semanas del embarazo, tras la solicitud
de aborto realizada por la madre de la víctima Aurora Fuentes. Sin embargo el
Comité de Bioética del Hospital Zonal rechazó dicha práctica y luego la
denegaron el Juzgado de Familia y la Cámara de Apelaciones. 'Yo confié en la
justicia de Comodoro, pero lamentablemente se negó a nuestro pedido y demoró
mucho la situación', declaró Fuentes.
Fueron necesarias 18 semanas para que la causa llegara al máximo tribunal de la
provincia patagónica y los jueces José Luis Pasutti, Daniel Caneo y Fernando
Royer revirtieran esas resoluciones, ordenando cumplir con la legislación
vigente. El dictamen fue respaldado por el gobernador Mario Das Neves, ya que el
Código Penal en su artículo 86 establece como causal de aborto el embarazo
producto de una violación. Sin embargo se sigue negando este derecho a las
mujeres abusadas, en general por motivos religiosos, tal como ocurrió en el
segundo caso.
La segunda víctima, también de 15 años, quedó embarazada debido a las
violaciones a las que la sometía su padrastro desde los 7. A pesar de estos
trágicos hechos, la jueza Diana de Kasakevich desoyó la voluntad de la joven de
querer abortar y el viernes decidió negarle esa posibilidad. La magistrada
habría basado el fallo en el derecho a la vida del chico en gestación, según el
diario patagónico La Jornada.
Interpretaciones sesgadas
En general la denegación del aborto por parte de tribunales locales se escuda en
una interpretación restrictiva del Código Penal en materia de aborto. Este
posicionamiento defiende que la interrupción de un embarazo es legal sólo si la
salud mental de la mujer violada tiene deficiencias. En cambio la Corte Suprema
de Justicia de la Nación y otros tribunales han realizado una interpretación más
amplia, asegurando la legalidad del aborto cuando el embarazo es producto de una
violación.
El padrastro de AG es un suboficial de la policía de Chubut, y según consta en
la sentencia del Superior Tribunal de Justicia de esa provincia, violó a la
adolescente en noviembre de 2009, dejándola embarazada. Luego la había amenazado
para que no denunciara el abuso sexual ni los manoseos que consumaba desde que
AG tenía 11 años. Aurora Fuentes realizó un pedido judicial para que el Centro
Materno Infantil de Trelew resguardara los restos del feto como medida de prueba
de la violación perpetrada contra su hija.
La segunda joven fue víctima de abusos sexuales durante 8 años y se animó hablar
de las aberraciones sufridas debido al embarazo. Nuevamente el agresor es un
padrastro, en este caso un obrero de la construcción. Tras ser expulsado del
hogar en que vive la adolescente, el agresor se habría trasladado a un obrador
de Rada Tilly. De acuerdo a las declaraciones de la defensora oficial Andrea
Caleri, el dictamen de la jueza Diana de Kasakevich será apelado hoy a fin de
lograr la interrupción de la gestación. Ahora el proceso judicial corre con la
ventaja del antecedente a nivel del Superior Tribunal de Justicia, pero con la
desventaja de lo avanzado del embarazo.
Numerosos proyectos se han presentado en el Congreso nacional para legalizar el
aborto o despenalizar más de sus causales. Estas iniciativas no logran prosperar
frente a la presión ejercida por sectores conservadores y religiosos. Por eso
las y los legisladores tienen responsabilidad en el riesgo que está corriendo la
vida de las mujeres que quieren abortar el producto de una violación y que
reciben negativas del personal de salud pública, comités de bioética y
tribunales de justicia.