Marruecos
Quien siembra vientos recoge tempestades
Diaspora Saharaui
El director de la delegación en Madrid de la
agencia estatal de noticias de Marruecos (MAP), Saïd Ida Hassan, así como la
propia MAP han sido condenados por un tribunal de Almería por intromisión
ilegítima en el honor del periodista marroquí Ali Lmrabet a pagar 12.000 euros
de indemnización.
Esta condena es la consecuencia de la actuación de Ida Hassan quien, en abril de
2005, después de un largo viaje de 650 kilómetros de Madrid a Almería, se
presentó en el anfiteatro de la Universidad de Almería donde Lmrabet impartía
una conferencia sobre inmigración.
Una vez allí, Ida Hassan se levantó de su silla y después de presentarse como
"corresponsal de la MAP en España y miembro del Sindicato nacional de la prensa
marroquí", comenzó a increpar Ali Lmrabet, a insultarlo para terminar
acusándolo de haber escrito en el diario EL MUNDO que "todos los marroquíes
residentes en España son terroristas".
Esta sentencia es una primicia en los anales de la MAP, ya que es la primera vez
que esta agencia oficial es condenada por un tribunal
Por su parte, el patrón del diario Assabah fue condenado, a principios del mes
de junio, por la jusiticia francesa por difamación hacia un perdiodista de la
cadena pública France 3 a la que acusó de ser un agente de los servicios
secretos argelinos. Abdelmoumen Dilami, su director, fue condenado a pagar 3000
euros de multa et 5000 euros de indemnización por daños y perjuicios. En octubre
de 2007, el periodista de France 3 Joseph Tual reveló la existencia de cinco
órdenes de detención dictadas por un juez francés en contra de los nacionales
marroquíes sospechosos de haber participado en el secuestro del oponente
marroquí Mehdi Ben Barka en París en 1965. Las órdenes de detención fueron
emitidas durante una visita del Presidente Nicolas Sarkozy a Marruecos. En su
edición del 3 y 4 de noviembre de 2007, Assabah publicó un artículo titulado
"Los servicios de inteligencia argelinos disponen del expediente del caso Ben
Barka".
El ex presidente español José María Aznar acaba de presentar una demanda contra
la revista marroquí L'Observateur, una de las primeras publicaciones que alegó
que Aznar era el padre de la hija de la ministra francesa de Justicia Rachida
Dati. Aznar lo negó, mientras Dati se abstuvo de dar a conocer la identidad del
padre de la niña, nacida en enero. Aznar le reclama judicialmente una
rectificación y una cantidad de 120.000 euros por los daños causados a su imagen
y por intromisión en el derecho al honor. Todo el mundo sabe que detras de
aquella oticia estaba el régimen marroqui, furioso con Aznar por el episodio de
la Isla Perejil en 2002.
Cinco periodistas marroquíes se enfrentan a juicio en Casablanca por "lesionar
públicamente" al líder libio Muammar Gadafi y "lastimar su dignidad", informan
la Red Árabe por la Información de Derechos Humanos (ANHRI) y el Comité por la
Protección de los Periodistas (CPJ).
La embajada libia en Rabat envío una queja al fiscal contra tres periódicos
marroquíes ("Al-Masaa", "Al-Jarida Al-Oula" y "Moroccan Events") que los acusaba
de publicar artículos que criticaban a Gadafi o se referían a él de una manera
que la embajada libia califica como inaceptable.
Según la ley de prensa de Marruecos, los periodistas se enfrentan a hasta un año
de cárcel y multas de hasta 100,000 dirhams (USD 12,090) de ser encontrados
culpables de los cargos de difamación.
Estas condenas harán que los perdiodistas marroquies se lo piensen dos veces
antes de coger la pluma para acusar a ese eterno "enemigo exterior" al que hacen
alusion cuando se trata de cualquier contencioso embarazoso para el régimen de
Mohamed VI, como el Sahara Occidental, la situacion interna de Marruecos, el
patrimonio del palacio, etc.
La prensa marroqui ha perdido toda credibilidad a causa de su falta de
profesionalismo, de independencia y su declarado amor por el palacio real. No
hay información libre en Marruecos. Todos los medios ne son más que portavoces
del gobierno.
Fuente : http://diasporasaharaui.blogspot.com