Argentina, la
lucha continua....
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De La Rúa Sobreseído: "La casa está en orden"
CORREPI
Algunos sospechamos que algo se estaba cocinando en los tribunales cuando el ex presidente Fernando De La Rua apareció en la primera fila del cortejo fúnebre de Alfonsín, con los brazos entrelazados con el vicepresidente Cobos y el resto del radicalismo. Pocos días después, se anunció su sobreseimiento en la causa por la represión del 20 de diciembre y en la causa del jardinero que, pagado con dineros oficiales, trabajaba en su domicilio particular.
Cuando, después de mil y una vueltas, logramos que De La Rua fuera indagado por los fusilamientos, dijo: "...Me dijeron, no recuerdo quién, que la televisión hablaba de muertes, y se lo pregunté al Dr. Enrique Mathov, que consultó al jefe, y me dijeron que no. (...) Al retirarme vi sobre Paseo Colón policías apostados, pero no ya incidentes.(...) El Presidente no recibía partes, ni había un canal o medio preorganizado para informarme, siendo que además nadie pensaba en hechos graves. Estaba absorbido por la crisis institucional y la decisión de renunciar a la presidencia de la Nación, algo bastante serio en la vida de una persona...", y aclaró que no miró TV en todo el día, ni se asomó por las ventanas.
Jueces y camaristas se dedicaron por años a determinar si era cierto que no sabía que, a metros de su despacho, la policía federal disparaba balas de plomo contra los manifestantes. En palabras de la Cámara, "Lo que se investiga en esta causa es (...) si [el ex presidente] conocía o no la situación de riesgo que representaba el despliegue de un gran operativo policial para contener a ciudadanos que deseaban manifestarse. De allí que es crucial la determinación de quién le dio la orden al Jefe de Policía de "mantener la plaza libre de manifestantes y producir detenciones puntuales..."
El 22 de octubre de 2007, acorralado por las denuncias de varios querellantes, como CORREPI, representando a Marta, la mamá de nuestro compañero Carlos "Petete" Almirón, y el CELS, por el peligro de que prescribiera la acción penal, el juez Bonadío procesó a Fernando De La Rua admitiendo que: "No existen muchas dudas para sostener que Fernando De La Rua, conocía el desarrollo de los acontecimientos, que no puso un límite al desborde represivo, y que una vez ocurridos los hechos buscó a partir de una pretendida ignorancia o desinformación evadir las responsabilidades propias de su función, en un intento de morigerar su situación procesal".
Nuevamente la Cámara concurrió en auxilio del ex presidente, reclamando que se probara "cuáles fueron las actividades, reuniones, llamados u otras cuestiones a cuya atención en concreto estuvieron abocados ese día el Presidente y su entorno". Conclusión, como no hay registros escritos o filmados de lo que hizo o dejó de hacer el ex presidente el 20 de diciembre de 2001, ahora el juez concluyó que "Pese a las dudas que puedan llegar a suscitar las explicaciones brindadas por el imputado mencionado, lo cierto es que, a más de ocho años de iniciada esta investigación, el Tribunal no cuenta con ningún elemento que permita presumir un accionar delictivo por parte de Fernando De La Rua". Desde luego que estamos trabajando, como las demás querellas y la fiscalía, en la apelación.
Pero, cuestiones aparentemente "jurídicas" de lado, no parece casual que, el mismo día que De La Rua fue sobreseído en las dos causas, se tomara la misma resolución en Santa Fe, respecto del fusilador provincial, Carlos Reutemann. Se vienen las elecciones, y la casa de la "democracia" debe estar en orden.