Argentina, la
lucha continua....
|
Crisis, guerras y lucha de clases
Manolo Romano/Ruth Werner
La Verdad Obrera
Desde arriba intentan imponer la danza de candidatos y ensayos de alianzas
patronales que se postulan para las legislativas de octubre, incluso para el
2011 como Reutemann. Todos dicen pensar en "el largo plazo" y en el "pos-kirchnerismo",
cuando, en realidad, ningún sector de la clase dominante puede asegurar algún
futuro para el país en el marco de la crisis mundial.
A las perspectivas de aguda recesión, se agrega la guerra genocida contra el
pueblo palestino que tensa el escenario internacional. Los acuerdos comerciales
que los socios latinoamericanos del Mercosur firmaron con el Estado de Israel
desenmascaran hasta dónde llega el progresismo y la defensa de los derechos
humanos de los gobiernos de Lula y Kirchner. Y ha puesto en evidencia al mismo
Obama que justificó su silencio ante la masacre de Gaza "para no dar la imagen
de que hay dos gobiernos" en EE.UU. Es decir, que así como se mostró parte de la
misma oligarquía financiera apoyando el megasalvataje a la gran banca hoy
convalida –al igual que Bush- el accionar del Estado gendarme y aliado
estratégico de la clase imperialista norteamericana en Medio Oriente.
Mientras los Kirchner pretenden dar una imagen de tener un plan para enfrentar
la crisis, la Argentina capitalista semicolonial es completamente dependiente de
procesos internacionales que no controla, especialmente la caída en los precios
de las materias primas y la fuga de capitales que ocurre tanto aquí como en
México, Brasil o Rusia. El desempleo de masas es también una tendencia
internacional: el propio Barack Obama habla de un plan para sostener 3 millones
de puestos de trabajo cuando sólo en el mes de diciembre se acaban de perder 700
mil empleos en EE.UU. Las perspectivas son de deterioro de todas las condiciones
que llevaron a la consolidación del kirchnerismo y horadan la malla de
contención que el peronismo construyó desde el 2002 en adelante.
Asamblea Nacional de Trabajadores
En tanto los medios difunden el comienzo del plan oficial para la compra del 0
km que busca mantener el consumo de las clases medias, el ministro De Vido
anunció un tarifazo al transporte popular -entre el 15 y el 25% de aumento para
trenes, subtes y colectivos a partir de febrero- y los obreros que producen los
autos sufren despidos o son suspendidos con rebaja de salarios con la
complicidad de los dirigentes burocráticos del SMATA o la UOM.
En las fábricas de la industria automotriz de Córdoba como Iveco, Gestamp y
Volkswagen, en la General Motors de Santa Fe, en las metalúrgicas como Paraná
Metal de Villa Constitución, en las ocupaciones de empresas medianas y pequeñas
de Capital y Gran Buenos Aires como la gráfica Indugraf o la curtiembre Curt
Impres, en la lucha por poner en pie nuevas organizaciones como la de los
explotados ajeros de Mendoza o la del ejemplar cuerpo de delegados del Subte
Metrovías, se está gestando el verdadero "plan anticrisis". Apoyar estas y todas
las luchas de resistencia, desarrollar ese proceso, extenderlo y masificarlo es
la primer tarea para enfrentar la crisis que las patronales empiezan a descargar
sobre los trabajadores. Hacemos un llamado unitario a todos los sindicatos
combativos, comisiones internas y delegados antiburocráticos, a la solidaridad
militante de los centros estudiantiles de izquierda y los organismos de derechos
humanos independientes, para convocar un Congreso o Asamblea Nacional de
Trabajadores que luche por imponer a los sindicatos una lucha nacional
unificada. Un polo de reagrupamiento que reúna miles de los nuevos activistas y
delegados combativos para coordinar los procesos de lucha de resistencia y
alentar la formación de cuerpos de delegados para la lucha en cada lugar de
trabajo uniendo efectivos y contratados, en la pelea por conquistar la dirección
de los sindicatos y el movimiento obrero.
Independencia política de clase
Ante el escenario de agravamiento de la crisis, los opositores patronales al
gobierno han encontrado en "los pobres" un caballito de batalla para disputar
electoralmente el bastión bonaerense dominado por el aparato de intendentes
afines al gobierno. Hasta Elisa Carrió ha tentado al "anti-electoralista" PCR, a
una alianza con la CCC de Juan Carlos Alderete en La Matanza y sectores del
movimiento piquetero para entrar en la disputa electoral del conurbano.
"En los encuentros no hemos hablado de candidaturas, si no de cómo debe ser la
distribución de la riqueza, cómo acabar con el hambre, de cómo debe ser un
presupuesto federal y en esos puntos coincidimos plenamente", dijo Alderete a un
diario zonal sobre sus conversaciones con la Coalición Cívica. ¿Se refiere la
CCC-PCR a la "distribución de la riqueza" que defiende Carrió apoyando a las
Administradoras de Fondos de Pensión Privados contra la estatización o al
reclamo que compartieron de eliminar las retenciones a la soja?
De la misma manera, Eduardo Buzzi de la Federación Agraria ha coincidido con el
planteo que el ex -presidente Duhalde hizo desde una columna del oligarca diario
La Nación: "el involucramiento directo de los hombres y mujeres del campo en el
Congreso puede significar la constitución de un fuerte bloque legislativo, que
tome a su cargo la defensa de las economías regionales y el impulso del
federalismo. Claro que cada uno de los que finalmente se decidan lo hará desde
sus propias convicciones, enriqueciendo así la participación del sector con una
vasta diversidad de identidades partidarias". Refiriéndose a su posible
candidatura en Santa Fé, Buzzi señaló "Yo no descarto por supuesto, pero creo
que primero hay que buscar contenidos, el para qué, como dice mi amigo Víctor De
Gennaro".
¿Y cual es el contenido del nuevo frente de centroizquierda que alienta De
Gennaro y reúne a Solanas y Lozano con los hasta ayer funcionarios de Libres del
Sur? Desde hace más de un año en la ciudad de Neuquén, el partido provincial
impulsado por la CTA local (UNE) y Libres del Sur participa con funcionarios en
el gobierno de la "concertación" transversal de radicales "K" y el kirchnerismo.
Cuando meses atrás los vecinos tomaron el barrio de Confluencia ante la
desesperante carencia de viviendas, el gobierno municipal los denunció
penalmente y solicitó el desalojo ordenando que las topadoras pasasen por encima
de sus viviendas precarias. Los funcionarios de la CTA en el gobierno se
llamaron a silencio, a cambio de mantener sus puestos. Ese es la contenido
último de la colaboración de clases con los partidos patronales en momentos de
crisis. Y en este tipo de frentes busca un lugar la dirección del MST de Vilma
Ripoll.
Por el contrario, desde el PTS orientamos todos los esfuerzos en combatir las
variantes de colaboración de clases, un nuevo engaño que adormece y desmoviliza
a los trabajadores y que si llegan al gobierno siempre acaban gobernando contra
los trabajadores y el pueblo pobre.
Llamamos al Partido Obrero y a todos los que luchan por la independencia de
clase a construir una izquierda de los trabajadores, que luche por un gobierno y
un programa obrero y socialista ante la crisis capitalista.