Medio Oriente - Asia - Africa
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Argelia
¿Es real la realidad?
Fernando Casares
Algunos son partidarios del Estado, otros, partidarios del Mercado. Están
también los de la religión. ¿Para cuándo los partidarios de la población?
A fines de Octubre de 2007, hace poco más de 1 mes, el presidente Bouteflika se
dirigía en un discurso a los jóvenes del país. Poco más de 10 minutos, algunas
cosas curiosas y alarmantes, y un saldo negativo... la declaración del fracaso.
Le Soir, dedica en su tapa el rostro de un Bouteflika -con una imagen que
denota cansancio en su mirada- confesando el fracaso -"L´aveu d´echec"-
para con los jóvenes argelinos, después de 9 años y 1.500 millones de dólares
destinados a ellos.
Y en efecto, es a través de ese discurso-express que el ejecutivo se despacha
con informaciones como: "Los 2400 haragas –quienes parten en pateras-
censados y los kamikazes de Argel, Lakdharia, Batna (en donde lo intentó
matar un kamikaze de tan sólo 15 años) y Dellys pueden devenir en mayor
número si no lo tomamos seriamente con cuidado. Los sondeos efectuados sobre las
esperanzas de los jóvenes confirman los análisis, ilustran la desconexión de la
relación entre los jóvenes y la acción de los poderes públicos". Lo dice el
Presidente. ¡¿Lo dice el Presidente?! ¿El mismo que en marzo dijera, en El
País de España y a raíz de la visita de los reyes a Orán, "hay que saber
diferenciar entre la realidad y la propaganda y apreciar las cosas en su justa
medida. Los europeos lo saben porque están muy bien informados sobre estas
cuestiones"?
Entre el 11 de Abril y el 11 de Diciembre, apenas pasaron 8 meses. La prensa
argelina, se regodeó informando acerca de cercos, capturas y bajas entre las
filas y los "emires" del GSPC y su nueva franquicia Al Qaeda en el Magreb.
Llegaron incluso a competir, diarios matutinos, para ver quién aportaba más y
mejores "expertos" en terrorismo yihadista e internacional, avalando la tesis de
que el terrorismo en Argelia estaba totalmente exagerado y que el GSPC no era
más que terrorismo residual, cuando no bandidaje, en clara debacle. Incluso, que
su unión con Al Qaeda albergaba serias dudas y no era más que una operación de
propaganda, como lo demostraran las declaraciones de Hugh Roberts (especialista
en Argelia y África del Norte del ICG) en L´Expression.
Curiosamente El Watan, fue el único diario que no avalo esta tesis. Por
el contrario reportó a través de Louis Capriolli (consejero especial de GEOS,
otro "experto" en terrorismo islamista) la evolución natural del GSPC hacia Al
Qaeda en el Magreb, su internacionalización y su peligrosidad, dando a entender
también la necesidad de una lucha antiterrorista conjunta con otros países
(Francia, Estados Unidos).
Luego llegó Sarkozy y sus 120 caballeros sin espadas, pero con calculadoras
configuradas por la Escuela de Chicago, a firmar contratos sustanciosos en
materia nuclear, petroquímica y gasifera por valor de 5.000 millones de euros.
Después, por supuesto, de haber declarado que el sistema colonial francés en
Argelia había sido tremendamente injusto –como si hubiese habido alguno justo en
esta bendita tierra- y mientras uno se percataba de cómo algún programa -C´est
dans l´air- de la televisión fran-cínica la llamaba "Sarkozy descoloniza
Argelia" -, olvidando que costó además de 8 largos y duros años, 1 millón de
muertos, 2 millones de presos en campos de concentración y 500 mil refugiados.
Unos días después, el rumor de un tercer mandato para Bouteflika se instalaba en
los pasillos de los rotativos periodísticos argelinos. El proyecto de reforma
constitucional establecería la posibilidad de una re-reelección. El ejecutivo
hizo silencio, pero la noticia ya estaba girando por calles de Argelia.
Y llegó el 11-D. En el edificio del Consejo Constitucional de Ben Aknoum y en
otro de la ONU en Hydra... y con el, el horror, la perplejidad, los rostros sin
rostro, la sangre, el polvo, el humo, los escombros, las lagrimas, las sirenas.
Un sin fin de plegarias y no menos preguntas. ¿Qué pasa en Argelia? ¿Por qué no
puede levantarse? ¿Quién o quienes no la dejan?
El primer dato curioso del día después giro en torno al numero de victimas.
Mientras la prensa extranjera las cifraba en mas de 67, la argelina no superaba
la de 26, exceptuando una vez mas a El Watan, que la cifraba en 72. El
jefe de gobierno, Abdelaziz Belkhadem, denunciaría indignado la exageración en
las cifras de la prensa extranjera. Un día mas tarde, El Watan –del que
mucha prensa internacional tomaría como fuente-, respondería a la denuncia del
jefe de gobierno con un suspicaz articulo que indagaría en años y ocasiones
anteriores, recordando que la discusión de las cifras es un viejo fenómeno
argelino venido de los años de plomo y que el actual líder del partido político
RND –coalición en el gobierno- y antiguo jefe de gobierno, Ahmed Ouyahia, ya en
su momento habría practicado la ocultación de números reales de victimas por
"razones de Estado", razón por la cual estaban en su derecho a desconfiar de las
cifras oficiales. Aunque en la practica la prensa diría que las razones de esa
diferencia estaban en las fuentes. Los servicios hospitalarios dirían una cosa
–mayor cantidad de victimas mortales- y el Ministerio del Interior otra.
Finalmente y según datos oficiales, las victimas serian de 37 personas.
El segundo dato curioso fue el de los kamikazes. Dos hombres. ¡El de Hydra,
Rabah Bechla, tenia 64 años! Un hombre que –según Liberte- padecía una
enfermedad psíquica. ¡Un hombre que en el año de la independencia –1962- tenia
18 años! ¿Cómo es posible? ¡El de Ben Aknoum, Larbi Charef, tenia 30 años y
había sido beneficiado en el 2006 por la política de reconciliación nacional y
las disposiciones de la Carta por la Paz! ¿No son estos datos del todo
increíbles? Un hombre de 64 años, cosa inédita, y otro beneficiado por la
reconciliación nacional, dato que enfureció a mas de un periodista y político
con ánimos de sepultar la política de la reconciliación y con ella al
presidente. Incluso la periodista de Le Soir, Leila Aslaoui, en un
articulo que destilaba furia y rencor, no escatimo en criticas durísimas hacia
el presidente y sus 9 años de gobierno. "Partez!"-vayase-, llegó a
escribir con insistencia.
Lo que llamo poderosamente la atención a los investigadores y a la policía
científica, es que los dos coches bomba tenían ambas puertas soldadas con
barrotes cruzados de hierro, según Liberte. Lo que indicaría que los
kamikazes no cumplían con el típico perfil del clásico mártir que se inmola y al
mismo tiempo habla de manera más despiadada de los autores intelectuales y
reclutadores.
El tercer dato curioso estuvo en las declaraciones del Ministro del Interior
antes y ahora. ¿Qué quiso decir Yazid Zerhouni cuando declaró, al día siguiente
de los atentados del 11 de abril de 2007, que no había que excluir que hubieren
otros intereses que no quieran ver al Estado argelino reponerse, reestructurarse
y funcionar de manera más eficaz"? ¿O cuando ponía en duda las publicaciones por
Internet del GSPC tildándolas de simples documentos que no probaban nada? Y sin
embargo ahora es un convencido absoluto de la autoría por parte de islamistas
kamikazes del GSPC en pos de la ruptura de la paz y la reconciliación alcanzada
por el presidente. Ha llegado a decir en estos días que era fácil poner
explosivos en un coche y hacerlo estallar, lo difícil era evitarlo
securitariamente ya que el 100% de seguridad seria imposible. Estamos de acuerdo
con lo ultimo. ¿Pero de dónde saco el ministro que es fácil tal gestión, con dos
coches bomba cargados de 800 kilos cada uno, en una ciudad y país rodeado de
policías, fuerzas de seguridad e inteligencia y gendarmes en cada rotonda, en
cada salida y entrada a pueblos, ciudades, autopistas y carreteras? ¿Estas
declaraciones brindan seguridad a la población?
¿Y El Watan, cuando decía que el Magreb, sobre todo Argelia, estaría a
punto de ser víctima de las luchas geopolíticas entre los Estados Unidos y
Francia por medio del terrorismo islámico? El artículo terminaba así: "A este
juego solapado parece acomodarse perfectamente la red Al Qaeda que, en realidad,
trabaja, conscientemente o no, por los intereses geopolíticos americanos. Este
miedo sabiamente mantenido por el terrorismo islamista, y sobre todo por la red
Al Qaeda, les permite legitimar la nueva configuración del mundo, sobre todo el
Gran Medio Oriente que ellos acaban de decidir".
¿Sorprendente?
Las ultimas declaraciones del líder del MPS –Movimiento por la paz y la
sociedad, de corte islamista moderado y en coalición con el gobierno- aparecidas
en Le Soir, Aboudjerra Soltani, son claras y tajantes: "detrás del doble
atentado de Argel se esconde una mano extranjera incluso la de los Estados
Unidos".
Si relacionamos todo esto con la revisión de la Ley de Hidrocarburos –que borro
cláusulas que hubiesen privilegiado y beneficiado a empresas extranjeras y sobre
todo americanas-, el rechazo al Africom –una mega base militar en África por
parte de EUA-, la posibilidad de una OPEP del Gas con Rusia y el actual comercio
privilegiado en áreas de tecnología militar, el crecimiento del comercio con
China y el actual partenariado e inversión francés...
"Es ingenio, absurdo e históricamente falso creer que un sistema infernal...
convierte a sus victimas en santos; por el contrario, las degrada, las asimila a
él, y tanto mas cuanto mas vulnerables sean ellas, vacías, privadas de un
esqueleto político y moral. Son muchos los signos que indican que ha llegado la
hora de explorar el espacio intermedio entre las victimas y los perseguidores...
Solo una retórica esquemática puede sostener que tal espacio esta vació: nunca
lo esta, esta constelado de figuras torpes o patéticas que es indispensable
tener en cuenta si queremos conocer a la especie humana", diria Primo Levi.
En definitiva: ¿A quien no le invadió una sensación de pena y tristeza al
contemplar esas dos imágenes de Rabah Bechla y Larbi Chaleb, los "suicidas" de
la concordia?
¿Es real la realidad?