El gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) comienza a sentir las consecuencias de su pragmatismo electoral en Cochabamba. En el 2004 "invitó" a "personalidades" de la clase media más reaccionaria como Gonzalo Lema, ex presidente de Corte Departamental Electoral, quien, carente de un real compromiso con el proceso de cambio desde la perspectiva indígena, se convirtió en el principal encubridor de la corrupción municipal durante la desgastada gestión de Chaly Terceros. Hoy se pone al lado del prefecto Manfred Reyes Villa despotricando contra el Referéndum Revocatorio y atacando a la Corte Nacional Electoral. Ya hace algunos meses atrás, este concejal "invitado" del MAS calificó al vicepresidente Álvaro García Linera como "terrorista" y "criminal". No era de extrañar. En la década de los noventa, siendo militante del MIR, Gonzalo Lema hizo abierta campaña a favor del ex dictador Hugo Banzer Suárez.
 
Durante las dos últimas semanas transcurridas, el concejal del MAS en el municipio de Cochabamba, Gonzalo Lema Vargas -quien a la sazón fue Presidente de la Corte Departamental Electoral durante los gobiernos neoliberales de Banzer Suárez y Sánchez de Lozada-, se presentó en varios medios televisivos para desacreditar el Referéndum Revocatorio que impulsa el gobierno de Evo Morales, denunciando este proceso como ilegal y criticando al actual presidente del Corte Nacional Electoral, José Luis Exeni, exactamente con los mismos argumentos que esgrimen los abogados el prefecto Manfred Reyes Villa en su estrategia para evitar aquel comicio.
Los ataques de Lema contra la consulta impulsada por los movimientos sociales afines al Gobierno comenzaron el pasado lunes 14 de julio cuando, a través de una entrevista con el periodista Javier Hurtado de la Red Uno , el Concejal afirmó que entre Podemos y el MAS se esta formando un "circuito político-partidario" orientado a "quebrantar la institucionalidad" con la intención de derrocar a los prefectos.
En franco apoyo a Reyes Villa, Lema sostiene que la ilegalidad e inconstitucionalidad del Referéndum Revocatorio convocado por el Congreso Nacional radica en los porcentajes "inequitativos" que se han prescrito en la Ley de Convocatoria para alcanzar la ratificación especialmente en los cargos prefecturales. Sostiene que más bien "se debería dejar trabajar a los prefectos y restituirles el IDH".
Posteriormente, el jueves 17 de julio, en una entrevista matinal con Univalle Televisión, Lema advirtió que el apoyo que otorgarán técnicos venezolanos y nicaragüenses a la Corte Nacional Electoral para supervisar el proceso es "una decisión desacertada y una intromisión en la intimidad electoral del país". Criticó al presidente de la CNE , José Luis Exeni, por promover un padrón electoral que "nos conducirá a la desorganización de la sociedad" y elogió a las cortes departamentales, enfrentadas con Exeni, afirmando que "son cortes conformadas por gente joven pero con sana experiencia en el manejo electoral".
Luego, al día siguiente de la emisión del decreto "recordatorio" por la magistrada Silvia Salame que exige la suspensión del referéndum mientras el Tribunal Constitucional no se pronuncie sobre la licitud del proceso, en una rueda con varios medios televisivos el concejal Gonzalo Lema dio la razón a la magistrada de quien dijo: "obró como corresponde ya que ella no es la portera del Tribunal".
 
Estigmatizando a García Linera

En los hechos, Gonzalo Lema nunca fue seguidor del presidente Evo Morales y mucho menos comulga con el proceso de cambio que el actual Gobierno pretende desarrollar a partir de la perspectiva indígena.
Lema fue "invitado" por el MAS para atraer votos de la clase media de esta ciudad a iniciativa de Jorge Alvarado y Alex Contreras, los "capos" de esta partidocracia en Cochabamba que plagaron el masismo de personajes racistas y tradicionalmente derechistas con conocida filiación en organizaciones como el MNR, MIR, ADN, NFR y UCS (en el municipio de Quillacollo, Alvarado y Contreras llevaron como Alcalde a un acaudalado ex-médico forense que recibía órdenes de Sánchez Berzaín).
En noviembre del pasado año 2007 el concejal Lema no pudo ocultar sus orígenes miristas (en el 2001 se declaró públicamente admirador y amigo personal de Jaime Paz Zamora). Durante un panel organizado por el Itinerario de la Coyuntura Política Boliviana (ICOBA), en su afán de apuntalarse como un líder de "centro democrático" en este municipio, Lema sorprendió al auditorio acusando al actual Vicepresidente de la República (y a Carlos Dabdoud en Unidad Nacional) de ser, desde el MAS, un factor de "extremismo" dentro este proceso iniciado en las elecciones generales del 2005:
"Evo Morales anunció como acompañante suyo a un viejo militante (aunque joven él) de ideas extremas y ‘acciones peligrosas', cuando no criminales, y lo lanzó a la pelea con mucho de desafío: Álvaro García Linera".
El Concejal vinculó al Vicepresidente con la muerte de dos campesinos durante alguna acción directa que habría realizado el Ejército Guerrillero Tupac Katari (EGTK, organización de la que AGL fue integrante) a fines de los años ochenta. "Sus antecedentes indicaban un juicio penal seguido por el Estado en su contra debido a la explosión de una bomba y la caída posterior de una torre de energía eléctrica, con la muerte, además, de dos campesinos. Esto, entre otros hechos. García Linera estuvo recluido años en la cárcel, mientras se lo procesaba, y se dice que allí estudió Ciencia Política", afirmó Lema con su habitual y "sutil" tono insidioso.
 
Un banzerista en el MAS

El concejal Lema pretende erigirse en una opción de "centro democrático" a costa desprestigiar al vicepresidente García Linera con el estigma de "extremista" y "criminal".
Pero recordemos que cuando Álvaro García Linera, su hermano Raúl, Felipe Quispe y otros militantes del EGTK eran sometidos a torturas estando presos en las cárceles de San Sebastián, San Pedro y Chonchocoro por sus ideas políticas, el famoso escritor Gonzalo Lema hacía una abierta campaña a favor del general Hugo Banzer Suárez, formando el corifeo de miristas que justificaban la decisión de Jaime Paz Zamora para "tender puentes sobre los ríos de sangre", es decir olvidarse del septenio negro y compartir el poder con el ex dictador genocida a nombre de un pretendido "centro democrático".
"Yo soy uno de esos bolivianos que en 1989 votó a favor del MIR" -escribió Lema en un artículo publicado por la revista Facetas de Los Tiempos el 30 de mayo de 1993-. "Lo hice convencido de algunos deberes de conciencia, como por ejemplo frenar la fuerte arremetida de las huestes del general Banzer, porque siempre me dolerá lo sucedido en los setentas". No obstante semejante congoja literaria, en ese mismo artículo, el escritor confesó sentirse "seducido" por la línea claudicante de Paz Zamora: el general Banzer era entonces "la única opción para enterrar el pasado desde el centro democrático".
"Votar por Banzer funcionará como el necesario acto del marinero de levar anclas y poder zarpar", dijo el diletante, y concluyó con esta arenga: "Me importa única y sencillamente despedir a Banzer de las elecciones, gane o pierda, con mi voto personal a favor suyo. Es, en realidad, un voto por la democracia y un fino rozón al envoltorio del pasado. Él (Banzer, nr) simboliza a ambos y ambos se lo merecen".
Finalmente -a pesar de que Banzer ganó las elecciones de 1993 aliado con Paz Zamora dentro el "Acuerdo Patriótico"-, Gonzalo Sánchez de Lozada asumió la Presidencia de la República mediante un "pacto de gobernabilidad" con los propios miristas y banzeristas. A las pocas semanas Gonzalo Lema era posesionado como Presidente de la Corte Electoral de Cochabamba, para años después (bajo el régimen de su "joven amigo personal" Tuto Quiroga y con apoyo de la NFR del actual prefecto Reyes Villa) llegar a La Paz como vocal de la Corte Nacional Electoral a cuya Presidencia también aspiró a pesar de que Sánchez de Lozada prefirió confiar en Jorge Lazarte. Entretanto, los hermanos García Linera seguían soportando las torturas físicas y sicológicas que se les infringían en su condición de presos políticos.
 
Pactando con la corrupción municipal