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Latinoamérica

James Petras, Fidel Castro y las FARC-EP

Dax Toscano Segovia
trocasluar@yahoo.com

El concepto de hegemonía, desarrollado principalmente por Antonio Gramsci, hace referencia a los procesos de dominación política, cultural e ideológica de la burguesía con el propósito de que la gente, en general, interiorice los valores de la clase dominante como suyos, para así construir un sujeto domesticado. Chomsky señala que los grupos de poder en la sociedad capitalista tienen como objetivo lograr la fabricación del consenso entre la población, para lo cual necesitan mantener al rebaño domesticado. Para lograr esto han desarrollado un sinnúmero de mecanismos entre los cuales se destaca la propaganda que difunden especialmente a través de los medios de (in)comunicación, sutil o abiertamente.

Es en este campo en el que el imperialismo yanqui y la oligarquía colombiana, comandada por los narcoparafascistas de Uribe Vélez y Juan Manuel Santos, han obtenido victorias significativas, gracias a lo cual han logrado que los estereotipos que han fabricado sobre las FARC-EP y sus métodos de lucha sean aceptados en amplios sectores de la población mundial.

Esto tuvo mayor impacto tras la publicación de las fotografías que las propias FARC-EP entregaron como prueba de vida de los prisioneros en su poder en las que se veía a una Ingrid Betancourt demacrada y débil, lo cual permitió a falsimedia lanzar una espectacular campaña a favor de su inmediata liberación y la condena de las FARC-EP. Muchas personas lloraron, otras se indignaron, otras lanzaron improperios contra los captores de Ingrid Betancourt.

Tras la operación mediático-militar perpetrada por el ejército colombiano y sus aparatos de inteligencia, bajo las órdenes y asesoramiento de las fuerzas militares estadounidenses y asesores israelitas, que permitió la "liberación" de la ex candidata presidencial colombiana, tres mercenarios norteamericanos y once soldados, una vez más se acudió a las instancias a-reflexivas y pre-reflexivas de las personas para lograr una reacción profundamente emotiva que imposibilite un análisis profundo sobre el conflicto colombiano.

La condena contra las FARC-EP y contra sus métodos de lucha se ha presentado como unánime por falsimedia. "El mundo marcha contra las FARC", "No más FARC es el clamor mundial" dicen los titulares, editoriales y noticias en los diversos medios de América y Europa fundamentalmente.

A ello han contribuido las declaraciones del presidente venezolano Hugo Chávez y la del Comandante Fidel Castro quien en sus reflexiones: La historia real y el desafío de los periodistas cubanos y La paz romana, criticó la política del secuestro y pidió a las FARC-EP que dejen de lado esos métodos.

Esto ha sido canalizado en forma maniquea por falsimedia para favorecer las acciones del imperialismo yanqui, la oligarquía colombiana y su ejército asesino.

Sin ser el propósito de Chávez y Fidel, ambos líderes con sus afirmaciones han dado armas al enemigo para continuar denigrando y descalificando a las FARC-EP.

Esto ha conllevado a que varios intelectuales de izquierda, progresistas así como diversas organizaciones sociales, revolucionarias planteen un sinnúmero de criterios sobre el conflicto colombiano y la lucha armada en ese país que, lamentablemente, no han permitido que se lleguen a establecer puntos en común que permitan hacer frente a la política genocida del águila del norte y del Estado fascista colombiano, así como llevar a cabo acciones concretas de solidaridad con los revolucionarios colombianos. Por el contrario, se ha llegado al punto incluso de emitir opiniones que lo que hacen es dividir, ya que son el resultado de posiciones que reflejan pasiones, que expresan resentimientos o afectos y desafectos desmedidos y no análisis profundos y críticos.

A continuación se expondrán algunas consideraciones necesarias para el debate tomando en cuenta fundamentalmente las reflexiones hechas por Fidel y el artículo de James Petras: Fidel Castro y las FARC, publicado en Rebelión el 12 de julio de 2008:

1.      Fidel ha señalado en distintas ocasiones que hay que tener mucho cuidado con las declaraciones que se hacen porque el enemigo puede convertirlas en armas para combatir a los procesos revolucionarios y a sus líderes. ¿Por qué entonces en las reflexiones indicadas expresó en forma tan directa su posición crítica sobre la tenencia de prisioneros civiles y militares en manos de las FARC-EP, sobre todo en una coyuntura en la cual ésta organización ha recibido los golpes más certeros a nivel político-militar y mediático a lo largo de su existencia? Fidel ha expresado con sinceridad que esa es su postura y su visión sobre ese punto en particular. De igual manera es indudable el profundo sentimiento humano que hay en sus palabras. El problema está en que Fidel se refiere a los métodos de lucha utilizados por una de las partes en conflicto; pero omite denunciar con el mismo énfasis los crímenes perpetrados por el estado colombiano en su enfrentamiento contra las organizaciones revolucionarias.
2.      Fidel pecó de omisión, porque si bien él puede tener conocimiento de las atrocidades cometidas por el ejército colombiano y los paramilitares, leer de su pluma una denuncia sobre esto hubiera sido vital para comprender mejor la dimensión del conflicto colombiano. En este sentido no es adecuada la apreciación de José Mercader cuando señala que está por demás la clasesita que Petras le da a Fidel sobre lo que sucede en Colombia. Es obvio que el líder cubano conoce todo eso, pero muchos de sus lectores, inclusive algunas y algunos cubanos, no saben con precisión qué mismo pasa allí y hacer una reflexión sobre ello hubiera abierto los ojos a quienes lo leen.
3.      Del mismo modo que Fidel hizo referencia a Ingrid y al resto de liberados y los otros cautivos que están en poder de las FARC-EP, también debió expresar su posición respecto a los prisioneros que se encuentran en cárceles colombianas así como a los que están en manos del imperio como Sonia y Simón Trinidad. Hubiera sido una buena oportunidad para denunciar la intromisión gringa en los asuntos internos de Colombia. Se pudo establecer una interrelación con el caso de los cinco luchadores cubanos contra el terrorismo, los mismos que permanecen secuestrados en cárceles estadounidenses debido a las decisiones adoptadas por la corrupta y prostituida justicia gringa que protege a terroristas como Posada Carriles. Hay que señalar que a Simón Trinidad ese aparato de justicia injusto, no ha podido comprobarle ninguno de los delitos por los que se le acusa. En ese sentido Fidel se equivocó. Decir esto no es estigmatizar negativamente a un hombre que ha luchado a lo largo de toda su vida en defensa de la causa del socialismo. No es pertinente la postura de Norelis Morales Aguilera en su artículo: La agudeza y la finura de James Petras cuando señala que "si Petras dice que Fidel se equivocó es porque se equivocó" dando a entender que nadie está en la capacidad de señalar objetivamente que el Comandante puede cometer algún error porque por su condición política, su liderazgo indiscutible, su formación es infalible. Fidel se equivocó y se ha equivocado muchas veces. No es un dios, es un ser humano. No reconocer eso significa dejar de lado la aplicación de la dialéctica como un arma crítica para el combate revolucionario. No es solamente una cuestión subjetiva expresar esto, sino también una cuestión objetiva: los hechos así lo demuestran. Esto no hace menos a Fidel. Eso solo lo pueden pensar quienes lo siguen como a un mesías y no lo ven en su dimensión histórica y humana.
4.      Fidel ha sugerido a las FARC-EP que liberen a los prisioneros en su poder. Sin embargo Fidel debió señalar también la voluntad política de las FARC-EP de liberar a los prisioneros, lo cual se ha demostrado con la puesta en libertad en forma unilateral de varios de ellos y ellas como Luis Eladio Pérez y Clara Rojas, mientras que el régimen uribista ha puesto toda serie de obstáculos para llevar adelante un acuerdo humanitario que posibilite el intercambio de prisioneros. Por otro lado hablar de la crueldad del cautiverio está bien, siempre y cuando se analicen también las condiciones en las que se hallan los combatientes de las FARC-EP capturados y presos en las cárceles colombianas. Otro elemento importante es el que tiene que ver con la manipulación propagandística-mediática que se hace sobre la situación real de los prisioneros en manos de las FARC-EP: la inteligencia colombiana y falsimedia decían que Ingrid estaba al borde la muerte. Luego de los chequeos realizados por los médicos franceses se determinó que ella estaba en perfectas condiciones. Los mercenarios gringos que hoy fabrican historias sobre su vida como prisioneros de las FARC-EP, gozan de buena salud y ninguno presenta rasgos de maltrato alguno. Lo cruel es la realidad misma colombiana impuesta por una oligarquía corrupta, vende patria, al servicio del imperialismo yanqui que ha sumido en la pobreza a la mayoría de la población de ese hermano país.
5.      Cuba y su dirigencia revolucionaria han sido consecuentes con las causas revolucionarias en el mundo entero. El Che, Manuel Piñeiro, Fidel llevaron adelante una política internacionalista consecuente. Hoy, los mecanismos de solidaridad y apoyo son distintos. Cuba ha dado una ayuda impresionante a los pueblos del mundo en el campo de salud y la educación por ejemplo. Sin embargo hay que señalar algo objetivamente real: muchas veces se ha dado prioridad a las relaciones políticas a nivel de Estado y de gobierno y no con las organizaciones revolucionarias. El Partido Comunista Cubano no mantiene una línea independiente respecto a las políticas del Estado. Eso trae como resultado que dirigentes del partido, que a su vez son del Estado, en sus declaraciones públicas prioricen esas relaciones y no las otras, actuando con moderación o siendo políticamente correctos. Dentro del cuerpo diplomático cubano se ha formado una casta burocrática cuyo objetivo primordial es el de mantener sus posiciones en el aparato de poder y gozar de ciertos privilegios, al igual que muchos funcionarios del partido lo que les ha hecho mantener una distancia prudencial sobre diversos procesos revolucionarios en el mundo como el colombiano por ejemplo.
6.      No se conocen las razones ciertas por las cuales Cuba se alejó de las FARC-EP. Lo cierto es que lo expuesto por Fidel no ha hecho sino fortalecer la postura del enemigo. Fidel sabe perfectamente que no hay formas de lucha puras e inmaculadas. Los propios revolucionarios cubanos secuestraron a Juan Manuel Fangio. Otros movimientos en el mundo lo hicieron igual. Otros aplicaron la justicia revolucionaria contra torturadores y enemigos del pueblo como los revolucionarios que ajusticiaron al dictador Somoza. En ocasiones ciertos actos de terror son necesarios para enfrentarse a los enemigos de clase, como lo ha hecho ETA contra los estados represivos español y francés. Nadie, desde la óptica revolucionaria debería condenar estos hechos. Los que los condenan como terroristas y crueles son los opresores que, además, gozan de toda la tecnología necesaria para enfrentarse a los pueblos que con escasos recursos luchan contra ese poder. Cuba conoce perfectamente las críticas que desde diversos sectores se han emitido contra algunas de sus políticas justas y necesarias que ha debido tomar en ciertos momentos. Desde el inicio de la Revolución ésta tuvo que enfrentarse contra las acusaciones que la propaganda yanqui y los contrarrevolucionarios realizaron contra los juicios y sanciones aplicadas a los criminales de la dictadura batistiana. Igual sucede hoy. Cuando Cuba tomó medidas legales contra los mercenarios llamados por falsimedia como disidentes en el año 2003 y cuando condenó a pena de muerte a los secuestradores de un ferri en la bahía de La Habana, recibió el ataque brutal de falsimedia, los moralistas burgueses e incluso de "comunistas hormonales" como José Saramago que en una de sus tantas declaraciones se distanció públicamente de la Revolución Cubana. Fidel y la revolución recibieron el respaldo justo frente a la campaña sucia montada en su contra. Esos son los elementos que debía tomar en cuenta Fidel al momento de escribir su reflexión.
7.      No son los revolucionarios los que plantean las formas de lucha, son los opresores. Y, nos guste o no, hay que señalar que la violencia es la partera de la historia. Como señala Iñaki Gil de San Vicente "la violencia ha jugado un papel cualitativamente superior al pacifismo tanto en la superación histórica de la explotación como en la mejora de las condiciones de la explotación". El pensador y revolucionario vasco señala que: "Es por esto que resulta, además de imposible, también anticientífico y contrarrevolucionario negar la permanencia del choque entre el derecho burgués a su violencia, y el derecho proletario a la suya, el choque entre la ética capitalista y la ética comunista, entre la democracia burguesa y la democracia socialista. Por tanto, no queda otra opción que optar por el capital o por la humanidad trabajadora, no existen alternativas intermedias, equidistantes, neutrales. La postura pretendidamente intermedia de "condenar la violencia venga de donde venga", de oponer a "toda violencia", repite todos los errores aquí expuestos. Quiere situarse por encima de los conflictos sociales pero refuerza ¿sin quererlo? los intereses de la opresión. En realidad, es la postura más cobarde, egoísta y ruin que pueda alguien imaginarse porque quiere quedar bien ante el opresor y los y las oprimidas, sin enemistarse con nadie, sin mirar a la realidad cara a cara, dejando que el fuerte aplaste al débil, para mantener una imagen de pureza ética absoluta. Son sepulcros blanqueados."
8.      La respuesta de James Petras a las reflexiones de Fidel contiene algunas cosas importantes y ciertas. Lo negativo es que del análisis sereno, donde se toma en cuenta el momento histórico y el contexto social, Petras pasa al ataque pasional. Es por demás injusto acusar a Fidel de no permitir el debate y la crítica en el seno de las organizaciones revolucionarias cubanas. No hay que dejar de señalar que una cosa es Fidel y otra el aparato burocrático donde se desenvuelve Fidel. Tal vez esa distinción debió haber hecho Petras. Si es verdad que dentro de ese aparato ciertas cosas no son bien vistas, ciertas ideas cuestionadas, atacadas y hasta censuradas. El aparato se cree intocable, pero de ahí a decir que Fidel es responsable de ello es injusto. Fidel es un hombre reflexivo y con una apertura muy amplia para debatir y conversar sobre muchas cosas.
9.      Parece que James Petras por su reacción emocional ha obviado hacer un análisis profundo sobre el "foquismo" guerrillero. Su postura es tan absurda como la que en su momento defendió Regis Debray. La lucha que llevó adelante el Che, Fidel y otros revolucionarios fue una lucha de masas en la que el ejército guerrillero se constituyó como la vanguardia político-armada del pueblo explotado. Por otro lado, la referencia que hace Petras sobre las derrotas de las guerrillas "castristas" carece de un análisis dialéctico que permita comprender y establecer las relaciones de causa-efecto, las contradicciones internas y externas, etc. que hicieron que esos movimientos sean derrotados. Al mismo tiempo la validez de un proceso no se mide solamente por las victorias alcanzadas en la lucha, eso conllevaría a un pragmatismo extremo. En ese sentido el capitalismo sería el verdadero triunfador.
10.  Tal vez Fidel resaltó unos rasgos de Marulanda y obvio otros, eso puede haber producido la confusión de Petras para hacerle creer que Fidel estaba denigrando al extinto líder de las FARC-EP. Fidel jamás despreciaría a un hombre de la talla de Manuel. Su error está en solo haber señalado su nivel escolar, su origen y no indicar otras características de este líder histórico, gran estratega y revolucionario inclaudicable que fue "Tirofijo".
11.  Finalmente parece totalmente fuera de foco la forma como finaliza su trabajo James Petras cuando dice que la historia no absolverá a Fidel por las críticas expuestas en su artículo contra el líder cubano. Craso error y terrible injusticia. Fidel fue absuelto por la historia y por los pueblos del mundo hace ya mucho tiempo por su ética, su solidaridad, su entrega, su lucha, su ejemplo revolucionario. James Petras no debería caer en lo que critica: manchar la imagen de un revolucionario, dudar de sus capacidades y su trayectoria de lucha.

Quito, 18 de julio de 2008

Fuente: lafogata.org