Latinoamérica
|
Ocho tesis erróneas de Fidel Castro
Fidel Castro y las FARC
James Petras
Traducido por Ulises Juárez Polanco y revisado por Caty R.
Introducción
He apoyado la revolución cubana exactamente durante cincuenta años y reconozco a
Fidel Castro como uno de los grandes líderes revolucionarios de nuestro tiempo.
Pero nunca he sido un apologista sin sentido crítico: en varias ocasiones he
expresado mis discrepancias en medios impresos, en público y en discusiones con
líderes, escritores y militantes cubanos. Los artículos y comentarios de Fidel
Castro sobre los recientes sucesos de Colombia, concretamente su discurso sobre
la liberación por el régimen colombiano de varios prisioneros de las FARC
(incluidos tres agentes de la CIA e Ingrid Betancourt) y sus comentarios
críticos en torno a las políticas, estructura, prácticas, tácticas y estrategias
de las FARC y su reconocido líder, Manuel Marulanda, merecen una seria
reflexión.
Las observaciones de Castro piden un análisis y una refutación, no sólo porque
sus opiniones son ampliamente leídas e influyen en millones de militantes y
admiradores en todo el mundo, especialmente en Cuba y América Latina, sino
también porque hoy pretende brindar una base «moral» para la oposición al
imperialismo. Igual de importante es que las diatribas y críticas desafortunadas
de Castro contra las FARC, Marulanda y el movimiento campesino de guerrillas han
sido bienvenidas, publicadas y transmitidas por todos los medios de comunicación
capitalistas en los cinco continentes. Fidel Castro, con pocas salvedades, se ha
unido dócilmente al coro que condena a las FARC y, como demostraré, sin ninguna
razón o lógica.
Ocho tesis erróneas de Fidel Castro
1. Castro argumenta que con la «liberación» de los prisioneros políticos de las
FARC «se abría un capítulo de paz para Colombia, proceso que Cuba viene apoyando
desde hace más de 20 años como el más conveniente para la unidad y liberación de
los pueblos de nuestra América, utilizando nuevas vías en las complejas y
especiales circunstancias actuales, después del hundimiento de la URSS …»
(Reflexiones del compañero Fidel: