Latinoamérica
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Respuesta de Narciso Isa Conde a una hábil modalidad del terrorismo mediático peruano
En defensa de Roque Gonzáles, Damaris Velasco Huiza, Melisa Patiño
Hinostroza, Guadalupe, Hilario Rivas, Armita Valladares Jara, Maria Gabriel
Segura, Carmen Asparren Rivero, Apresados y acusados por la dirección contra el
Terrorismo (Discorte) del Perú
Aquí les presento la reseñe la publicada por el diario La República del Perú en
relación con el apresamiento de Roque Gonzáles y demás compañeros integrantes
del Capitulo Peruano de la Coordinadora Continental Bolivariana (CCB):
Dirigente ‘‘bolivariano'' Roque Gonzales tenía contacto con promotor de las FARC
También estaba vinculado con
Alejandro Astorga Valdez, chileno de las ‘Fuerzas Especiales" del MRTA. Ángel Páez/Doris Aguirre. Unidad de Investigación.
La policía antiterrorista fotografió en varias ocasiones al dirigente de
la Coordinadora Continental Bolivariana-Capítulo Perú (CCB-CP), Roque
Gonzales La Rosa, en compañía del intelectual comunista dominicano Narciso
Isa Conde, quien mantiene estrechos vínculos con las Fuerzas Armadas de
Colombia (FARC).
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Señor director del diario La República:
En ejercicio del derecho a réplica, aspiro a que el diario que usted dirige acoja estos comentarios, aclaraciones y precisiones sobre el reportaje publicado en su edición del 22 de marzo del 2008, bajo el título: "Dirigente "bolivariano" Roque Gonzáles tenía contacto con promotor de las FARC"
Es claro para mí que la estructura y el contenido de esa publicación, en momentos en que Roque Gonzáles esta preso junto a otras seis jóvenes peruanas, con la manifiesta intención de acusarlo y acusarlas de "terroristas", persigue fundamentalmente nutrir la pretendida criminalización de su práctica política legal y de su participación en el Capítulo Peruano de la Coordinadora Continental Bolivariana (CCB), después de haber participado abiertamente, sin violar ley alguna, durantes los días 23, 24, 25, 26 y 27 de febrero pasado, en el Seminario Internacional y en el II Congreso de este espacio de confluencia de diversas corrientes políticas de izquierda, organizaciones populares, movimiento sociales y personalidades del continente.
Este propósito puede apreciarse tan pronto se pone entre comillas el "bolivariano" y se me describe como "promotor" de las FARC-EP, acompañados esos dos falsos puntos de partida de un persistente esfuerzo periodístico por trasladar hacia mi persona, hacia la CCB y sus diversos componentes, el estigma construido durante décadas por Estados y centros terroristas (como el de los EEUU, Colombia y el Perú de Fujimori), contra la organización político-militar que responde al nombre de Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo.
De todas maneras las FARC-EP son una cosa y la Nueva Izquierda-Círculos Caamañistas y las organizaciones, espacios, medios y fuerzas sociales dominicanas que representó en la CCB, otras.
Igual acontece con la gran diversidad de componentes sociales y políticos peruanos, chilenos, argentinos, bolivianos, venezolanos, ecuatorianos, colombianos, mexicanos, cubanos, brasileños, uruguayos, estadounidense, puertorriqueños… que forman parte de esta coordinación continental, entre la cual, precisamente porque no discriminamos por formas de lucha, porque incluimos la diversidad democrática, antiimperialista, anti-neoliberal y pro-socialista, están incluida las FARC y puede ser incluida cualquier fuerza revolucionaria insurgente que concuerde con nuestra plataforma común y nuestra ética revolucionaria.
El todo, claro está, no se define por una o algunas de su partes; amén de nuestro respecto individual y colectivo hacia quienes asumen por obligación impuesta por las crueles características de la dominación oligárquica-imperialista vigentes en sus respectivos países - con definidos ideales y principios bolivarianos, patriótico y socialistas- la insurgencia armada. Coincidir en ideales y metas no significa ser la misma cosa. La diversidad revolucionaria es sumamente rica
Las calumnias y los estigmas, por demás, no nos quitan el sueño. A Tupac Amaru, a Bolívar, a Manuelita, a Fidel, al Ché, a Camilo Torres y a sus compañeros(as) de de lucha…tambien se les calificó en sus tiempos de "subversivos", "terroristas" y cosas peores.
Esos calificativos -procedente de quienes defienden a los asesinos de las motosierras, a los continuadores del político-delincuente Alberto Fujimori, a los promotores de las guerras imperialistas contra los pueblos palestinos, iraquí y afgano- son además inservibles como armas de chantaje contra nosotros(as).
Cuando en el año 2006 visité Lima, lo hice de manera legal, abierta, transparente. Llevé mis libros, conversé públicamente, dicté conferencias, participé en paneles y en actividades no prohibidas, aunque evidentemente y lamentablemente espiadas para luego ser manipuladas.
Roque Gonzáles y los organizadores de esas actividades sociales, políticas y académicas, actuaron a plena luz del sol, ejerciendo derechos conquistados. Y así lo hicieron cuando viajaron al Ecuador y durante toda su trayectoria vinculada a la CCB.
A ninguna delegación concurrente al II Congreso de la CCB en Quito -con excepción de este caso- se le ha apresado al retornar a sus respectivas patrias. A nadie, fuera de esta ominosa situación que afecta a Roque y a otras 6 valiosas jóvenes peruanas – inequívoca señal de que el andamiaje terrorista de Estado de la época de Fujimori, lejos de ser desmontado, se ha reactivado- se le ha acusado de algo ilegal.
Traer a colación mis vínculos públicos de amistad y solidaridad con las FARC, de larga data por demás, para instrumentar expedientes de esa calaña, me parece francamente ridículo y por eso invito al diario La República a desistir de esa ha hábil pero mentirosa modalidad de "terrorismo mediático".
La tristemente célebre Dirección Nacional Contra el Terrorismo (Dircote) "no obtuvo imágenes de Narciso Isa Conde vistiendo de uniforme de campaña de las FARC"
Esas fotos la publiqué yo y están incluidas, junto a tres entrevistas sobre la situación continental, en una edición que puse a circular en la Biblioteca República Dominicana de la ciudad de Santo Domingo en noviembre del 2006, la cual ha sido distribuida internacionalmente en forma impresa y vía Internet.
En la presentación de estas tres entrevistas me ocupé de explicar el carácter de esas visitas a ese y otros campamentos de las FARC, versión que entiendo útil resumir en esta carta.
Mis primeros encuentros con los comandantes de las FARC-EP en territorio colombiano se realizaron a raíz del inicio de los diálogos de paz en las proximidades de San Vicente del Caguán. Antes conocí a algunos de ellos en los países socialistas y en algunos eventos internacionales.
En ocasión de los encuentros en el Caguán conocí el camarada Manuel Marulanda y con él sostuve una larga conversación. De aquella visita escribí a mi retorno a República Dominicana y un extenso reportaje sobre ella fue publicado por el diario Hoy.
Fui invitado en otras ocasiones a Colombia, entre ellas a participar en aquel acto de liberación por las FARC de un numeroso grupo de prisioneros de guerra, y entonces el gobierno colombiano me negó la visa y no pude viajar.
Tiempo después, un Presidente de la República Dominicana –cuyo nombre me reservaré en esta oportunidad- me hizo saber a través de un alto dirigente de su partido, que el Presidente Álvaro Uribe le había comentado de mi viaje y de mis posiciones y le había comunicado que de parte de ciertos enclaves del poder colombiano existía la determinación se asesinarme si me encontraban mal puesto por allá.
Por otra parte, en el periodo posterior a la ruptura de los diálogos, los gobiernos colombianos, sus cuerpos de inteligencia y la propia CIA, se dispusieron a impedir toda presencia de delegaciones de las FARC en el exterior. Esto incluyó los eventos internacionales.
Con la colaboración o inhibición de sectores de otros gobiernos, las FARC han sido sometidas a un intenso proceso de persecución, apresamientos y secuestros, llegando a escenificarse casos tan escandalosos como los secuestros del comandante Simón Trinidad En el Ecuador) y la guerrillera Sonia (en Colombia) y de Rodrigo Granda (en Venezuela).
Este último, por cierto, nos visitó dos veces aquí y fue entrevistado junto a otros militantes de las FARC en Tiro al Blanco (programa de TV-Radio que dirijo y coordino personalmente), en el espacio Al Día de destacado periodista dominicano Huchi Lora, en la popular Revista 110 de Julio Hazím y en otros programas de radio y televisión del país.
En mi país también estuvo Raúl Reyes, miembro del Secretariado y vocero de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (víctima reciente de una masacre planeada por los gobiernos de EEUU y de Colombia), quien entonces intercambió con las principales fuerzas políticas de mi país, incluido el entonces presidente electo Hipólito Mejía, y nadie lo trató como "narcoterrorista" e incluso sectores de derecha lo trataron con mucho respeto.
Tales posibilidades de conversaciones directas, las cuales ayudaban a buscarle una salida política al conflicto armado colombiano, sin embargo, fueron drásticamente bloqueadas después de desatada la referida persecución.
Nuestra irrenunciable actitud de solidaridad se mantuvo y esto ha determinado el interés de los dirigentes de las FARC de continuar los intercambios de ideas, de conocer en detalle mis puntos vistas, de entrevistarme en sus medios de prensa e informarme a la vez de su proceso. Algo absolutamente justo y legítimo.
De ahí las nuevas propuestas de encontrarnos, respondiendo al interés de ambas partes.
Y como a l@s dirigentes de las FARC les resulta imposible venir de nuevo a mi país y a otros países de la región y del mundo, como están impedidos de participar en los eventos en que antes participaban, no me quedó más remedio –grato remedio en fin de cuentas- que ir donde ellos están. Esos intercambios me permitieron conocer más de cerca esa realidad y escribir con más propiedad sobre el proceso colombiano en su relación con el continente y el mundo actual.
A esto se debe lo de llegar por las "trochas de la clandestinidad" a las hermosas montañas colombianas. Y lo del uniforme y el arma, tiene que ver con necesarias medidas de seguridad para ingresar a las zonas controladas por las FARC-EP, además de que como buen caribeño, soy buen jodedor.
En varias oportunidades pude complacer sus invitaciones, entre ellas en las que dieron lugar a las tres entrevistas que me hiciera la Cadena Radial Bolivariana (sistema de comunicación y propaganda de las FARC) y que incluimos en la referida publicación. Otra anterior a éstas fue incluida en mi libro: En el Siglo XX: ¿Cuál Democracia? ¿Cuál Socialismo?, distribuido tambien el Lima.
Si el enemigo nos quiere separar por la fuerza, hay que ingeniársela para frustrarle sus propósitos. Y por esa determinación he tenido la agradable experiencia de conocer y hacerme amigo de verdad de los comandantes Iván Márquez, Rodrigo Granda (Ricardo) Jesús Santrich y Lucía, seres humanos de excepcionales condiciones humanas, combatientes ejemplares, artistas, poetas, dibujantes…junto a una hermosa y alegre guerrillerada. Sin que nunca faltara la singular y muy apreciada por todos(as) figura de Todoterreno, ni la linda Monita, ni la Motita blanca.
Las FARC por su heroísmo, por sus ideales, por su persistencia, son merecedoras de esta modesta solidaridad; sin necesidad, por razones obvias, de ser parte de su membresía. Más en un periodo en que han querido no solo exterminarlas físicamente mediante el Plan Colombia (y su derivada el Plan Patriota) dirigido por el Pentágono, sino también aniquilarlas moralmente con la acusación de "narcoterrorismo" puesta en marcha por la infernal maquinaria propagandística del imperialismo más terrorista y más perverso de la historia humana.
Los lectores de esas entrevistas, que procuraré hacérsela llegar a "La Republica", han podido valorar la calidad de los temas que ocupan estos intercambios e interrogarse si acaso hay algo de delito en todo lo que contienen de rebeldía justiciera y de subversión por la conquista del pan, la autodeterminación, la felicidad y alegría para nuestros pueblos.
Por otra parte, si un inmenso sentido de solidaridad humana e identidad revolucionaria, más allá de las diferentes conceptualizaciones, vías y métodos de lucha que cada quien pueda sustentar, nos llevó a compartir orgullosamente la inclusión en la Presidencia Colectiva de la CCB al comandante del MRTA Víctor Polay, preso en la cárcel tumba del Callao durante 15 años, vergüenza debe darle al presidente Alan García, amigo de juventud de Polay, mantenerlo en prisión mientras innumerables "asesinos y ladrones de Estado" disfrutan en el Perú de la más absoluta impunidad y de enormes fortunas.
Ningún terrorista, ningún delincuente político o político-delincuente, actúa de esa manera. Ni siquiera las insurgencias justas y las conspiraciones necesarias se organizan de esa forma.
Lamento muchísimo que ustedes, o los que están detrás de ustedes, no lo puedan o no lo quieran entender así.
Atentamente,
Narciso Isa Conde
P/D ¡Ah¡, olvidaba que la referida publicación y las fotos con los comandantes Iván Márquez, Jesús Santrich y Lucía pueden descolgarse de numerosos periódico digitales, entre ellos Kaosenlared, Rebelión, La Haine, Clave Digital y Barriga Verde. Y fueron ampliamente difundidas hace más de un año por TeleAmazona de Ecuador y varios medios colombianos, que me presentaron como "representante" de las FARC de "origen cubano" y nacionalidad dominicana, haciéndose eco de declaraciones dadas por el presidente Álvaro Uribe y el vicepresidente Francisco Santos. La Dircote peruana está como descubriendo el "hilo en bollito".
Narciso Isa Conde, residencia legal en la Calle Arzobispo Meriño 108, Zona Colonial, Santo Domingo, República Dominicana.
Tels. 809-687-6487 / 809-777-3939
Correo electrónico: narsoisa@gmail.com
Fuente: lafogata.org