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El Pacto del Palacio Quemado
Roger Ortiz Mercado
Introducción
Antes de encontrar explicaciones (si es que son posibles), sobre el Pacto del
Palacio Quemado ("Pacto Constitucional Congresal") señalo que constituye un
hecho insólito, en el nuevo escenario democrático que el pueblo boliviano,
comenzó a construir, aún en el momento "estelar" de lo se denominó la democracia
pactada.
La dirigencia neoliberal, hacía todos los "muñecos" posibles para demostrar que
la democracia sin el pueblo, era la mejor alternativa y sobre todo, se empeñaba
en asegurar de que el éxito económico del país, provenía en especial del proceso
de Capitalización (en el vital y estratégico sector de los hidrocarburos).
La obstinada inconsecuencia de las dirigencias nacionales (que a su turno,
buscan explicar lo que no se puede explicar), decían que 18% es mayor que 50%
(participación en la tributación). Este hecho, ocurrió también, en el Código
Davenport y la nacionalización de la Gulf Oil Company, debió corregir la ciega
actitud de las dirigencias antinacionales. (Ver mi artículo La Política en
Octubre).
¿Porqué sostengo que el pacto congresal es insólito? Los acontecimientos en el
Congreso Nacional (junto a sus preámbulos) traen a memoria el retorno a la
democracia y los vicios de la democracia pactada que hasta hoy, parece no poder
superar la clase dirigencial: la tentación sistemática de olvidar los
compromisos asumidos, conocidos también como ofertas electorales,
desnaturalizando así la política y generando politiquería.
Otorgando legalidad a la ilegalidad
Manteniendo la línea de pensamiento, es pertinente insistir que se bastardizó el
retorno democrático, lo que generó resultados de carácter catastrófico en la
conducta política, alterando el genoma político nacional y por lo tanto, la
conciencia de la dirigencia, que sin ningún problema, violenta los propósitos
del pueblo. En este sentido, se manejan los conceptos de legitimidad y legalidad
como mejor convenga a sus intereses personales y no a los permanentes intereses
del pueblo.
El retorno democrático, fue violado y viciado sistemáticamente, por la falta de
inteligencia política, en este sentido sólo anoto algunos : 1.- reposicionar un
congreso luego de dos años (la realidad había cambiado) y dar por válidas
elecciones caducas, 2.- acortamiento del mandato presidencial, 3.- permitir la
reelección del Vicepresidente, 4.- proceder al proceso de capitalización
violentando los preceptos constitucionales de los artículos 136 al 139 y
declarar estado de sitio, para llevarlo a cabo. 5.- la permanente sordera a las
demandas de descentralización administrativa que reclamaba el pueblo.
A los reclamos de participación popular, se respondió con una reforma
constitucional (Gonzalo Sánchez de Losada) que sacó las normas que permitían la
formación de los Gobiernos Departamentales, su elegibilidad y por tanto,
establecer un régimen de descentralización administrativa (artículos 109 y 110).
Mantener los vicios del retorno a la democracia, es peligroso para la vida
nacional, no sólo porque se crea y se recrea un clima de hostilidad política,
sino, porque el tejido social se debilita por la falta de credibilidad en la
clase dirigencial, sea política o cívica. Por otra parte, la patria como
sentimiento nacional, se fragiliza, el concepto de estado nación, se gelatiniza,
y el respeto interno y externo pierde capacidad y seriedad, con lo cual, aumenta
el grado de injerencia externa insana, es decir aquella que se oculta o se
considera no injerente, sino solidaria.
El momento presente
En torno al difícil momento político de nuestro país, alguien con relativa
experiencia diría que no es nada nuevo, otro podría decir que lo que acontece
era previsible, pero creo que no es muy cierto. Los bolivianos (todos o casi
todos) sosteníamos (y sostenemos) que el país tenía (y tiene) su gran
oportunidad, para salir de su crónica o sistemática frustración; resultado del
insistente desconocimiento del otro, de la exclusión y la falta de una sincera
voluntad política (colectiva) de formar un estado nacional que acepte nuestra
multiculturalidad y por lo tanto, respete los derechos culturales de nuestra
realidad étnica.
Creo, que se puede recuperar el horizonte, pero no en el fácil expediente de lo
obvio. Creer que en el país, no ha pasado nada, sería una aberración o una
evasión de responsabilidades compartidas.
Se han profundizado las confrontaciones étnicas y regionales, por la verborragia
en medios de comunicación vía programas y publicidades, de los periodistas, de
los opinólogos y de los actores directos (políticos, cívicos y los movimientos
sociales), ocultar esta realidad, es negar nuestra frágil realidad política.
Por las razones que voy comentando anoto lo siguiente: a) el 15 de diciembre de
2005, el pueblo doblegó los contubernios de la democracia pactada, b) La lucha
popular tenía el objetivo (entre otros) de transparentar la democracia
(democracia radical) de ahí, la demanda por una Asamblea Constituyente y su
producto natural: una nueva Constitución, emanada de un poder constituyente.
(Objetivo no alcanzado), c) construir un país incluyente porque reconoce sus
necesidades y sus limitaciones concretas que desafía su proceso de
transformación, por la escasa capacidad de generación de excedente económico, y
d) reconoce el déficit de capital y tecnologías, pero sabe de la capacidad de
trabajo de su gente y de la existencia suficiente de recursos naturales.
De lo anotado precedentemente corresponde preguntar ¿fue suficiente un triunfo
electoral para desmontar el aparato político construido durante los últimos 20
años? Los acontecimientos son contundentes, no. ¿Por qué? por la capacidad de
reciclaje de quienes usufructuaron de la democracia pactada y no poder terminar
con el modelo neoliberal.
Antecedentes de la Asamblea Constituyente
Otra practica, que no se puede erradicar, es la distorsión de la realidad y de
la historia .Alguien dijo que el desconocimiento de los hechos, hace que se
vuelvan a repetir los errores y en nuestro caso desorientar el proceso social.
En este sentido, Raúl Prada Alcoreza en el libro Horizontes de la Asamblea
Constituyente -2006-(Pág. 19) formula la pregunta ¿Cuándo comenzó el proceso
constituyente? Y dice" (…) arranca con la primera guerra del agua (abril del
2000) y se desplaza hasta la segunda guerra del gas (mayo y junio del 2005)".
Pongamos cuales son los antecedentes, los hechos reales y los históricos que
desembocaron en la realización de la Asamblea Constituyente: a) la primera fue
en 1990, de la Coordinadora de Pueblos Étnicos de Santa Cruz (CPESC). "Marcha
por el Territorio y la Dignidad" por iniciativa del pueblo Mojeño, en Trinidad,
llegó a La Paz, esta marcha obtuvo, la aprobación de un Decreto Supremo que
reconocía la existencia de los primeros territorios indígenas y el
reconocimiento nacional e internacional de la existencia de los pueblos
indígenas de las tierras bajas, b) la segunda, en 1996 fue la "Marcha por el
Territorio, el Desarrollo y la Participación Política de los Pueblos Indígenas"
de todos los pueblos miembros de la Confederación de Pueblos Indígenas del
Oriente Boliviano (CIDOB) y comenzó en Samaipata (provincia Florida, Santa Cruz)
con dos logros: a) Promulgación de la Ley INRA y el reconocimiento de 33 Tierras
Comunitarias de Origen (TCOs). c) la tercera, año 2000, denominada "Marcha por
la Tierra, el Territorio y los Recursos Naturales" organizada por CPESC, el
pueblo Mojeño del Beni y otros pueblos de la amazonía, comenzó en Montero
(provincia Obispo Santiestevan, Santa Cruz) logró la modificación de la Ley INRA
y un Decreto que reconocía oficialmente las lenguas de los pueblos indígenas de
las tierras bajas y d), mayo de 2002 la "Marcha por la Soberanía Popular, el
Territorio y los Recursos Naturales" fue una larga caminata, en la que se
combinaron los movimientos campesinos e indígenas con más de 50 organizaciones
sociales; partió de Santa Cruz y llegó hasta La Paz. Como resultado el gobierno
y los partidos políticos con representación parlamentaria, se comprometieron
viabilizar la Asamblea Nacional Constituyente, (se promulgó un decreto) como
mecanismo de reforma a la Constitución Política del Estado de forma parcial o
total.
La política del espectáculo
La política del espectáculo no podía dejar pasar el espectáculo.
La nueva Constitución Política del Estado, no podía resultar de un esfuerzo
popular, como era la asamblea reunida en Sucre, dejar pasar la ocasión era
entender y comprender los errores originales en la convocatoria, era asumir con
humildad los errores. Por tanto, debía reconocerse que la matemática electoral
fallo para configurar las mayorías y minorías, para dar fluidez al debate
parlamentario.
En relación a lo anotado precedentemente invito a realizar un cálculo que el
MAS, ni logrando el 100% de los votos alcanzaba los dos tercios, señalados por
la ley de convocatoria a la Asamblea Constituyente.
Ante este escenario político que se caldeaba como resultado de los caprichos y
la falta de patriotismo de los pasillos del Palacio Quemado, de los partidos con
representación parlamentaria en el congreso y por la territorialización política
en las regiones por los prefectos y los movimientos cívicos y empresariales, se
dejo que la espiral de violencia verbal que luego pasó a violencia física y con
la innecesaria muerte de bolivianos, los cuales tristemente son contado como
meras victimas de accidentes de transito. Difícil de aceptar esto ultimo, pero
una verdad lacerante, para ello, basta leer, escuchar y ver a los medios de
comunicación, contando los muertos como simples expresiones numéricas.
Los preámbulos al Pacto del Palacio Quemado se pueden sintetizar en : reuniones
en la Vicepresidencia de la República, reuniones con Prefectos, observadores
extranjeros (esto amerita un posterior análisis en próximos comentarios), cercos
de movimientos sociales, vigilias, y todo un menú bastante amplio para atrapar
al pueblo en un desiderátum lejos del sentimiento popular, dado que desde
diciembre del 2005, el pueblo sabe qué, cómo y por quién debe votar, se acabó el
voto prebendalista, y en esto hay que reconocer la pedagógica política del
actual Presidente Don Evo Morales Ayma.
¿Era necesario haber creado un clima de tensión? Creo que no, con diálogo
político y reposicionando la Asamblea Constituyente, se haya logrado manejar en
causes de racionalidad. No pretendo decir que la tensión haya sido igual a cero,
pero con valores manejables. Tampoco inquietar a nuestros vecinos y por lo
tanto, evitar su acto de presencia (con ribetes de intromisión).
El tensión llego a su mayor valor, cuando se decide violar la Asamblea
Constituyente, quitándole sus propios fines y objetivos: consensuar, debatir y
obtener una constitución, como era el propósito primigenio, y que nunca había
sucedido en nuestra patria, con elecciones de constituyentes por voluntad
popular (las urnas), consensuando (recordemos las palabras del Presidente Evo
Morales Ayma, en el 2006 "si no somos capaces de consensuar, en la
constituyente, no somos capaces de refundar Bolivia") y por último entregar el
producto del poder constituyente: la nueva Constitución y refrendado por el voto
popular.
Esta sociedad del espectáculo y el mismo espectáculo político tiene varias
formas para mentir o para distorsionar un mensaje en la intervención de los
actores políticos, en propaganda o en la publicidad, en este sentido según
Durandín se destacan tres formas: a) supresiones o hacer creer que cosas que
existen no existe. b) adiciones o hacer creer en cosas que no existen. Y c)
deformaciones o deformar algo que existe.
Anotemos bien que las explicaciones, sólo confirmaron el adagio, que el que se
explica se complica. El Vicepresidente Álvaro García Linera, dice que el poder
lo tiene el congreso Nacional y por lo tanto, se obtiene la legitimidad y la
legalidad de modificar la constitución aprobada en Oruro, porque el Congreso
Nacional lanzó la convocatoria a la Asamblea Constituyente, porque el Congreso
Nacional amplió el plazo de funcionamiento y porque el Congreso Nacional
convocará al referendo de aprobación.
Como resultado de lo anterior, se cambia las bases del derecho constitucional
hasta ahora aceptado, y es que una Asamblea constituyente como lo indica su
nombre es poder Constituyente y es quien, elabora y aprueba la constitución y el
congreso nacional es un poder constituido que sólo puede hacer reformas
parciales cuando se ha completado a plenitud el poder constituyente, cualquier
otra explicación es trucha.
En este contexto se desato todo una nueva pasarela política, los medios
comenzaron de vuelta con un renovado espectáculo, había quedado atrás el drama
nacional, los muertos como dice el Chueco Céspedes en Sangre de Mestizos "Es
cuestión de estadística" Así, aparecen (TVB) Vásquez Villamor y Guillermo
(Cacho) Richter, el primero diciendo que la Constitución Política del Estado de
1967, fue aprobada por el Congreso Nacional, hay que recordar que el Proyectista
de la constitución es el Dr. Ciro Félix Trigo. La Junta Militar de Gobierno,
convocó a una Asamblea Constituyente, otorgando a los parlamentarios a elegirse,
junto al Presidente y Vicepresidente de la República en 1966 la facultad
constituyente para que, durante "los primeros sesenta días, sesionen con el
único y exclusivo objeto de sancionar las necesarias reformas a la Constitución
vigente y concluido dicho mandato, continúen sus funciones legislativas
ordinarias", por lo que se concluye que desinformo el Parlamentario Vázquez
Villamor ( recordar los que dice Durandín, en cuanto a la distorsión del
mensaje).
El constituyente Richter, en ese mismo programa validó el Pacto del Palacio
Quemado, señalando entre múltiples conceptos, que se había dado mayor seguridad
jurídica, en este sentido dijo que se había cambiado el término de
autodeterminación, por libre determinación y eso era profundo, porque permitía
con el nuevo concepto que Bolivia no corra los riesgos de la desintegración,
lamentable comentario. Según el artículo 55 de la carta de las Naciones Unidas
es libre determinación y una lectura sencilla que no distorsionada, se colige
que es lo mismo decir libre determinación o autodeterminación. En Wikipedia "El
derecho de libre determinación de los pueblos o derecho de autodeterminación es
el derecho de un pueblo a decidir sus propias formas de gobierno, perseguir su
desarrollo económico, social y cultural y estructurarse libremente, sin
injerencias externas y de acuerdo con el principio de igualdad (...)"
A modo de concluir
Se hace necesario desterrar la estrategia vigente (por la Oposición y elo
gobierno), basada en el miedo y la división entre los bolivianos, que hace
recordar los momentos del gobierno de Ovando –Torres, donde los elementos (de la
entonces guerra fría),determinaban el discurso antinacional y antipopular,
negando así, el futuro de la patria: unos hablaban que se venía el comunismo y
que nos quitaran todo y otros, hablaban de socialismo, cuando esta es una etapa
del desarrollo social que necesita previamente del desarrollo capitalista para
la distribución de la riqueza.
Podría seguir con una serie de "justificaciones" que de vuelta están resintiendo
al pueblo; con temas como la doble dotación de tierras artículo 395, inciso II
"Se prohíbe, las dobles dotaciones", tema que resiente la economía campesina ,
que aporta la casi totalidad de la alimentación de todos y cada uno de los
bolivianos; por lo que surge la pregunta ¿y la agricultura andina que requiere
distintos pisos ecológicos, para asegurar la subsistencia primero y luego
obtener excedentes, desaparece? ¿Cómo entonces potenciaremos la agricultura
andina, de tanto valor en lo social, económico y geopolítico, para asegurar
dominio de nuestra geografía y la soberanía alimentaria?
1.-Andrés Soliz Rada, en valioso comentario, titulado Bolivia: Constitución e
Hidrocarburos, muestra las falencias conceptuales y metodológicas que incurre el
Pacto del Palacio Quemado, en su nuevo proyecto constitucional, en el sector que
debe generar el mayor excedente económico a corto y mediano plazo para el
desarrollo nacional.
2- La constituyente Loyola Guzmán, en el programa Debate, de que se emite en TVB
(televisión boliviana), el día 28 de octubre de 2008, examinó con profundo
conocimiento y conciencia revolucionaria, los pormenores del proceso
constituyente. En este sentido, indicó como el proceso no respetó los informes
de minoría y tampoco los de mayoría. El debate debió reflejar el sentimiento
constituyente del pacto social.
La analogía formulada por la constituyente Loyola Guzmán, entre la primer
constitución nacional de 1826 y la aprobada por el Pacto del Palacio Quemado
(Octubre 2008), tienen la similitud de ser aprobada por pocas personas; este
hecho quita legitimidad a la futura constitución. Otro de los múltiples aspectos
que analizó, fue el poco tiempo otorgado a la Asamblea, lo que no permitió que
se haya concertado y cumplido con el propósito Constituyente: redactar, debatir,
concertar y consensuar, a fin de proponer la nueva constitución en su seno.
3.- Llamo Pacto del Palacio Quemado, por el Pacto de La Rosada y el Pacto de
Olivo, (Menen y Alfonsín) dado que guardan curiosa similitud con el
procedimiento de la democracia sin el pueblo, y se materializó (en la República
Argentina) en el "núcleo de coincidencias básicas".
En nuestro país, el conjunto de normas modificados por la vice Presidencia, las
reuniones de Cochabamba, y las reuniones de los elegidos de los elegidos que
posteriormente son oleada y sacramenta por el Congreso Nacional, constituyen "el
núcleo de coincidencias básicas".
La aprobación de este "núcleo de coincidencias básicas" está provocando no sólo
una impugnación política, por parte de los sectores sociales, sino también está
motivando el más importante debate jurídico – político constitucional, dado que
"un proceso interpretativo" del Congreso Nacional, determina lo indeterminable.
Concluyo este comentario, con conceptos de John Holloway:"Este comentario no
tiene final. (…) Es una pregunta, una invitación a discutir"