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Argentina: La lucha continúa
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Entre Gramsci y el Perro Santillán
Agustín Santella
El "conflicto del campo" ofrece un caso ejemplar, en el que la lucha estratégica
ha sido fuertemente procesada a través de la "información", sobre qué y cómo se
informa
El partido político en Gramsci trasciende los pequeños grupos en que se divide
la representación de cada una de las fuerzas de clase en pugna, y se delimita en
torno a las grandes divisiones de la lucha. Los órganos periodísticos desempeñan
el papel de partido político porque precisamente establecen una relación con el
"público lector" a partir de los grandes temas y las grandes divisiones, y lo
hacen en forma concreta, a través de la información y la orientación explícita o
implícita.
Veamos cómo luchan los medios de comunicación por orientar al público en la
coyuntura inmediata de esta semana.
El envío al Parlamento del proyecto de retenciones ha modificado la situación
política. Continúa entonces la confrontación por las retenciones en la arena
parlamentaria, la cual ha potenciado las contradicciones internas en el bloque
político gobernante.
Este domingo (29 de junio), La Nación resalta como noticia principal la
dificultad que tiene Presidencia para la aprobación sin modificaciones del
proyecto. Página/12 presenta otros datos: las contradicciones que "por
izquierda" le han aparecido a la Federación Agraria. El diario progresista
minimiza el proyecto alternativo de Felipe Solá; en cambio para La Nación
es "el dato" político que muestra el fin de la era K.
Sin proponérselo, el dato lo ha puesto Clarín: 100.000 pesos [25.000
euros] es lo que gana en términos netos por semestre el dirigente ruralista
Alfredo De Angelis [en Argentina los sueldos normales son de 250 euros por mes].
(No sabemos hasta que punto el diario ha querido darle importancia a su ingreso
económico, ya que este dato aparece dentro de una pequeña nota que comenta la
publicación de "El agitador", un libro donde se cuenta la biografía del
chacarero). Es lo que el bloque anti-rural ha denunciado en los más de 100 días
del conflicto. Cuando De Angelis dice "nos meten la mano en el bolsillo", está
hablando en serio.
Como vemos no hay datos "objetivos", sino que los datos forman parte de
estrategias de lucha.
Por otro lado, el examen de la lucha periodística, expresión hegemónica de
fuerzas sociales en acción, resalta la ausencia de una prensa alternativa del
bloque popular.
Con bloque popular nos referimos al de los sectores trabajadores, ocupados y
desocupados, el de los pobres, de las clases medias asalariadas, de los pequeños
campesinos e indígenas que se enfrentan todos los días con los chacareros
explotadores de la Sociedad Rural, de las mujeres trabajadoras que no se
identifican con el feminismo "fashion", de los que pelean por la sustentabilidad
ambiental; el bloque de los trabajadores de la cultura que enseñan e investigan
no solo para ganar un salario digno sino por un intelecto de la emancipación
social.
Pero que no haya una prensa popular que compita al nivel de la prensa burguesa
no debe impedirnos ver cómo los esfuerzos sostenidos desde la base por las
agencias independientes (que suman a miles de lectores semanales), y numerosos
boletines de las agrupaciones populares, van confluyendo en un espacio al calor
de la lucha de clases.
Sin dudas, los cientos de representantes que se reúnen en el Hotel Bauen bajo la
convocatoria de "
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