Argentina: La lucha continúa
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El ferrocarril es una cuestión nacional
Salvemos a 'El Provincial'
Armando Luchina
Impulsor de la penetración económica inglesa y diseñador de nuestra propia
economía, con una red que en forma de abanico convergía sobre la ciudad puerto
de Buenos Aires, el ferrocarril cumplió la función de convertirnos en el granero
del mundo. Cuando el sueño terminó, comenzó su decadencia. "El Provincial"
aguantó agonizante, mientras las demás líneas iban desapareciendo una a una. El
golpe militar del 76 le dio el "golpe" de gracia. De tanto en tanto surgen voces
pidiendo su reapertura. Aún se ven, por donde fue su recorrido, vestigios del
camino de hierro y puentes que dicen que "El Provincial" no fue un sueño y que
aún podemos salvarlo
El camino de hierro: "Gran Ferrocarril hacia el Sud de Buenos Aires"
En agosto de 1861 el Sr. Eduardo Lumb solicitó a la legislatura de Buenos Aires
autorización para construir un camino de hierro desde esta ciudad a Chascomús.
Por ley del 27 de marzo de 1862 quedó autorizado el P.E. para celebrar un
convenio para la construcción de un ferro-carril al sud de la ciudad. La
designación que la compañía adoptó fue "Gran Ferrocarril hacia el Sud de Buenos
Aires".
El documento estaba suscripto por el General D. Bartolomé Mitre gobernador de la
Provincia de Buenos Aires, que el 12 de octubre del mismo año asumió como
presidente de la Nación.
En el artículo 8° se convenía que "los terrenos necesarios para la vía,
estaciones y demás construcciones indispensables... serán cedidas a la empresa
siendo de propiedad pública" de la provincia de Buenos Aires.
En el art. 15 se establecía que en cualquier tiempo, la empresa podría construir
ramales a dicho camino y en cualquier dirección y por el 16 se obligaba a
continuarlo hasta Dolores u otro punto conveniente.
La empresa recibió como premio o subvención la cantidad de 500 libras esterlinas
"por cada milla de camino que construya y libre al tráfico".
Buenos Aires era entonces la capital de la Provincia. Recién en 1880 concluiría
la llamada "Conquista del Desierto", y sería vencida la sublevación de Carlos
Tejedor y se produciría la federalización de Buenos Aires.
Apeadero Lanús
Anacarsis Lanusse (apellido que la familia cambió por uno más fácil de
pronunciar: Lanús), era uno de los comerciantes más importantes del Río de La
Plata. Financista, banquero, con Belisario Roldán vende los primeros molinos de
viento en el país, y abastece de uniformes y botas al ejército de la Triple
Alianza. Fue además, miembro del directorio del diario "La Nación" de Mitre,
Subjefe de la Policía Bonaerense, diputado y senador provincial.Dueño de las
tierras que luego constituirían el pueblo de Lanús, cedió al Ferrocarril del Sud
en 1867, tierras para un apeadero, pues al no existir todavía una gran población
no se podía instalar una estación como parada para el ferrocarril. La población
se incrementa notablemente debido a las epidemias de cólera (1868) y fiebre
amarilla (1871). Y recién en 1873 se crea en razón de un loteoel barrio "El Edén
Argentino" más antiguo del actual Partido de Lanús (la zona pertenecía entonces
a la jurisdicción de Lomas de Zamora) se crea realizado recién en el año 1873.
La cesión de tierras del Sr. Lanusse, no era sólo un acto de desprendimiento
personal, basta leer al cónsul británico en Rosario, Thomas Hutchinson, citado
en el libro "Argentinos" de Lanata, para comprender los beneficios que se
desprendían de esas entregas de tierra: "El Sr. Alcorta compró a pequeña
distancia de la estación Moreno una fracción de tierra de dos leguas y media que
pagó de cinco a seis libras por cuadra. Después que la estación fue erigida en
su propiedad dividió la tierra en lotes, realizándola de 275 a 315 libras por
cuadra. (...) En Morón, un molinero progresista, M. De la Roche compró, en 1855,
treinta cuadras de tierra por 16.000 pesos papel. Donó a la Compañía del Oeste
tres cuadras para el edificio de la estación y toda la zona ocupada por la vía,
para que la línea pasara por su campo. Después de la inauguración dividió la
superficie en lotes y vendió en facilidades. Muchas cuadras fueron liquidadas a
100.000 pesos y algunos lotes a 2.000 pesos por yarda". Realmente muchas veces
donar tierras era un verdadero negocio.
En 1897 la empresa Ferrocarril del Sud compra una fracción de terrenos, donde se
construye una estación y la planta de talleres, inaugurados el 26 de octubre de
1901 . El lugar era límite entre los partidos de Avellaneda y Lomas de Zamora.
Esta estación intermedia entre Lanús y Banfield se bautizó Talleres.
La línea férrea partía de Constitución, parando en Barracas (Avellaneda), luego
en Lomas de de Zamora y en Glew, continuando viaje hasta Jeppener, constituyendo
la actual línea Roca.
Al demorarse la empresa "Gran Ferrocarril hacia el Sud de Buenos Aires" o
"Ferrocarril del Sud", en continuar las obras para prolongar el recorrido, vino
en auxilio de los vecinos de la zona el antiguo Ferrocarril Provincial, luego
llamado "Ferrocarril Oeste".
El Ferrocarril Provincial, de trocha media, era cabeza de un sistema –luego
conocido como FF.CC. del Estado- que cubría Buenos Aires, Santa Fe, la cuña sur
del Chaco, Córdoba y el NOA. Lugares olvidados por las grandes líneas de trocha
ancha (FF.CC. Sud, Gran Oeste, Central Argentino, Pacífico).
El Ferrocarril Provincial de trocha ancha, había sido fundado en 1854, siendo el
primero que funcionó en el país. En el viaje inaugural, las más altas
autoridades viajaron en sus dos cómodos vagones que eran arrastrados por la
máquina de vapor "La Porteña".
Perteneció 28 años a la provincia de Buenos Aires y en 1890 se vendió a la
empresa "The Buenos Ayres Western Railway Ltd." de Londres, que se constituyó
más tarde como el Ferrocarril Oeste.
A causa de la renegociación de la deuda externa argentina con la banca
francobritánica (el famoso empréstito Baring Brothers de Rivadavia), en 1899,
pasó a manos de la provincia de Buenos Aires a cambio de avales del Banco
Provincia.
El Ferrocarril Provincial
A pesar de que nosotros conocemos como el ferrocarril El Provincial solamente el
tramo de La Plata-Avellaneda, su construcción comenzó como Ferrocarril
Provincial de La Plata al Meridiano V° y se debió a la ley provincial del 14 de
octubre de 1907. Sus objetivos eran, fomentar la zona de su recorrido, controlar
a través de la competencia las tarifas de las empresas particulares, en su
mayoría inglesas que comúnmente se asociaban y actuaban monopólicamente, y
aumentar el volumen de operaciones del puerto de La Plata.
Otto Bemberg y los franceses
El directorio de la nueva empresa se compondría de seis miembros, tres
representando a los concesionarios y tres por el poder Ejecutivo. El grupo
formado por el banquero Otto Bemberg, las constructoras Dirks & Dates en
representación de la "Societe Anonime Franco-Argentine de Travaux Publics",
obtiene la concesión y decide adoptar la trocha angosta para el tendido de las
vías por su menor costo de construcción. Esta línea era una de las pocas que no
pertenecía a capitales ingleses.
En el año 1909 comenzó la construcción de la línea. El 12 de marzo de 1912, se
firmó el contrato de explotación con la empresa argentina que recibió la
denominación de "Sociedad Ferrocarril Provincial de La Plata al Meridiano V°
S.A.". La línea férrea alcanzó los 553 km. Con 31 estaciones. Saladillo,
Durañona, 9 de julio, Etcheverry, Loma Verde, Gobernador Udaondo, Beguerie,
Fortín Olavaria y Mira Pampa eran algunos de los pueblos que recorría el nuevo
ferrocarril.
Algunos investigadores de la historia del ferrocarril dicen que a pesar de
antiguo Ferrocarril provincia de Buenos Aires (F.C.P.B.A, zona sur) conocido
popularmente como "El Provincial" comenzó en 1912, y el ramal La
Plata-Avellaneda se inauguró el 18 de abril de 1926, ya existía, como empalme,
desde 1888, entre Casa Amarilla, Isla Maciel, Pueblo Alsina y la playa Solá.
En septiembre de 1913 la cámara de diputados provincial apoyó un proyecto de
ley, modificando el artículo 1° de la ley fundacional del ferrocarril provincial
de octubre de 1907, autorizando al poder Ejecutivo para construir cuatro mil
kilómetros de líneas y ramales en la provincia de Buenos Aires. entre esos
ramales a construir se hallaba el de La Plata-Avellaneda y Mercado de Frutos.
El ferrocarril pasa a la Provincia
El 31 de agosto de 1916 la Sociedad que explotaba el ferrocarril dejó de
hacerlo, pasando el estado provincial a hacerse cargo del mismo. En 1918 se
continuaba insistiendo en la necesidad de la prolongación de la línea a
Avellaneda.
Mediante decreto provincial del 14 de noviembre de 1924 se cambió el nombre del
Ferrocarril por el de "Ferrocarril Provincial de Buenos Aires". Se construyen
los grandes talleres del ferrocarril en La Plata (Gambier). Para la construcción
del ramal a Avellaneda se utilizó zonas no servidas por otras líneas. Los
cálculos fueron hechos para el establecimiento de una doble vía, aunque sólo se
construyó una. El largo total del ramal era de 50,9 km. y las primeras
estaciones fueron seis. Luego se fueron agregando nuevos galpones de locomotoras
en Avellaneda, Beguerie, Pedro Gamen, Azul y Olavaria.
El Provincial que conocemos: Ramal La Plata-Avellaneda
El ramal La Plata-Avellaneda se construyó como una conexión directa entre el
gran Mercado de Hacienda de Avellaneda y los grandes frigoríficos que se
hallaban en las cercanías de su recorrido. Partía del ex mercado de ovinos de
Avellaneda, donde hoy se levanta el Shopping Avellaneda, y terminaba en el
"dock" de Ensenada, en la Plata, uniendo las localidades de Avellaneda, Lanús,
Lomas de Zamora, Almirante Brown, Florencia Varela y Berazategui y otras zonas
de la provincia, internándose con otros ramales (un empalme con el ferrocarril
Meridiano Quinto) hasta Santa Rosa, La Pampa.
A su vera fueron surgiendo los pueblos de Monte Chingolo, Pasco, San Francisco
Solano, Gobernador Monteverde, Km. 40, Seguí, La Carolina, Ingeniero Allan,
Gambier, entre otras.
La estación Monte Chingolo, que originalmente se llamó "4 de Febrero" y luego "6
de Septiembre", fue declarada el 3 de abril de 1998 Monumento Histórico
Municipal
En nuestro sector del Barrio de Villa Higueritas, Centenario Uruguayo y
Pitágoras, se estableció una parada conocida como apeadero Angel Fernández.
En su recorrido, operaba con pasajeros, animales en pie y carga de media
distancia.
La nacionalización de "El Provincial"
El 31 de diciembre de 1951 se produce la transferencia a la Nación del
Ferrocarril Provincial y en el año 1953 es incorporada a la línea Gral.
Belgrano. El 1 de enero de 1954 se creó el octavo ferrocarril nacional con las
líneas del ex Midland, ex Compañía General y ex Provincial de Buenos Aires, que
integraban el Gral. Belgrano, fusionándolas en el Ferrocarril Nacional provincia
de Buenos Aires (F.N.P.B.A.), ya no más "provincial", sino "nacional".
Con el golpe militar de septiembre de 1955, se produce un nuevo cambio en la
administración de estos ferrocarriles, que vuelven, a partir de 1957, a integrar
el Ferrocarril Gral. Belgrano.
La decadencia
En 1960, durante el gobierno de Frondizi, fue elaborado el "Plan de Largo
Alcance" del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento para racionalizar
el transporte en el país, más conocido como el "Plan Larkin", que le dio su
golpe de gracia.
En 1961 se clausuró el tramo desde Etcheverry hasta Mira Pampa y el ramal de
Beguerie hasta Azul y Olavaria con sus respectivos ramales.
En 1964 se reabre sólo para el tráfico de la cementera Loma Negra y las piedras
de las canteras de la cárcel de Sierra Chica que eran utilizadas por la
Dirección de Hidráulica para la construcción de puentes y caminos.
En 1969 se construía un enlace entre el Midland, el Provincial y el puerto de
Bs. As. Uniendo Intercambio Midland con Avellaneda por el mercado de lanares y
desde Empalme Ribera a Retiro por el tercer riel del Puerto de Bs. As. De ese
modo ingresaban los trenes cerealeros del Roca a Sasetru, los del Midland a
Molinos Río de la Plata y trenes con leña procedentes del Norte que pasando por
Retiro llagaban a estaciones del Provincial.
Un tren sin pasajeros
En 1971, un decreto clausuraba la línea de La Plata a Avellaneda, pero no se
llegó a aplicar. Recién en julio de 1977, durante el gobierno militar, se
clausuró definitivamente para pasajeros el ramal Avellaneda-La Plata. La
dictadura militar dedicó su apoyó al transporte automotor y a la construcción de
autopistas y caminos y el cerco se cerró sobre el ferrocarril.
Según los comentarios que circulaban, una empresa de la zona (se mencionaba una
fábrica Aceitera de la familia Alzogaray, que luego fue utilizada por la empresa
Gualtieri como depósito y cementera durante la construcción del entubamiento del
arroyo Galíndez-Sarandí), habría hecho gestiones para que se erradicara una
villa que se hallaba muy próxima, por lo que el hermano del ingeniero Alvaro
Alsogaray, quien pertenecía al comando de Ingenieros del Ejército, habría
llevado a cabo la tarea. De ese modo la empresa tomó esos terrenos, y hasta
cerró calles, y utilizaba las vías para transportar sus mercaderías.
Sin embargo el Provincial continuó su actividad entre Avellaneda y Monteverde
unas dos veces por semana y en otras ocasiones un sola vez por mes.
El escritor Jorge Waddel en la Revista Todo Trenes recuerda que en diciembre de
1989 un tren descarriló cerca de la estación Monte Chingolo. El tramo de vías
rotos y el que se había levantado para el encarrilamiento afectó unos 80 metros
de la traza. Recién hacía fines de 1990 fue reparada y se restableció el
servicio entre Intercambio Midland, Avellaneda y Monteverde.
Sin embargo la empresa Gral. Belgrano separó el ramal de su servicio que quedó a
disposición del Ministerio de Economía.
Palabras, palabras, palabras
En 1992 la provincia anunció la reapertura del tramo entre Avellaneda y
Monteverde, y el 13 de diciembre, confirmando la reapertura, el entonces
gobernador Duhalde recorrió en un tren especial el trayecto. La reapertura nunca
se produjo, y ese tren fue el último, a pesar de la promesa.
Algunas topadoras en Lanús se apresuraron a tapar la vía, según los vecinos, con
tierra contaminada de plomo sacada del tramo de la calle Gral. Rodríguez entre
Centenario Uruguayo y San Lorenzo, que se estaba pavimentando para evitar la
terrible contaminación de plomo que sufrían los pobladores del lugar.
En Avellaneda el supermercado Wall Mart para extender su playa de
estacionamiento, dispuso el levantamiento de gran parte de la vía que era el
acceso del ferrocarril Roca a la ex planta de Sasetru y que unía al Provincial
con el resto de la trocha angosta.
La reapertura que no fue
En 1984 El diputado radical Osvaldo Baqueiro y el senador Manuel Moure
presentaron ante la cámara de diputados de la provincia de Buenos Aires, un
proyecto para la reapertura de la línea del Ferrocarril Belgrano, conocido
popularmente como "ferrocarril provincial"
En esos momentos la Jefatura de la línea Belgrano reconocía que la misma contaba
con un juego de veinte coches y cinco máquinas para habilitar el servicio entre
Avellaneda y Monte Verde, partido de Florencio Varela", señalando además que el
servicio "puede transportar por día la cantidad de veinticinco mil personas,
teniendo el servicio una frecuencia de cuarenta minutos".
Durante enero de 1987, informaba el diario Clarín, técnicos italianos y
sociólogos argentinos recorrieron los ramales del antiguo Ferrocarril Provincia
de Buenos Aires "el Provincial" y el tramo Bartolomé Mitre-Delta, que el
gobierno estudiaba para su reactivación.
El estudio mencionado indicaba "que los casi 75 kilómetros del Ferrocarril
Provincial (F.C.P.B.A), que ya se llamaba F.C. General Belgrano, conservan sus
vías usables, 12 de las 19 estaciones en pie y traza sin ocupación permanente",
y que su reactivación "parece moderadamente rentable y mejoraría el nivel de
urbanización, calidad de vida y servicios civiles para unos 750.000 habitantes".
El informe técnicamente era impecable, pero demasiado frío. No reflejaba la
esperanza destruida de cientos de miles de personas: simples trabajadores,
jornaleros que utilizaban el servicio para trasladarse a sus trabajos,
empresarios, comerciantes y chacareros, que vieron hundirse sus sueños de
progreso. Pueblos enteros languidecieron hasta transformarse en fantasmas de lo
que fueron.
Las estaciones, garitas, puentes, tramos de vías, son espectros de un sueño que
aún no termina y que todavía se puede salvar... si salvamos a "El Provincial".
Bibliografía:
- Diarios: Clarín, Diario Popular suplemento "El Sureño"
- Revista "Todo Trenes". Autores de las notas: Sergio García,Jorge
Waddel,Richard Campbell
- Documentación de "Ideco Sur" Instituto para el desarrollo del Conurbano Sur.
- Expediente "Ferrocarril del Sud contra provincia de Buenos Aires. Fiscalía de
Estado de la provincia de Buenos Aires.
- Historia de la Ciudad de Avellaneda.
- Lanús y su historia. Roberto Herrera.
Armando Luchina es presidente de la Sociedad de Fomento "Villa Higueritas".