Argentina: La lucha continúa
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Carta de los presos chilenos en la Argentina
Freddy Fuentevilla Saa y Marcelo Villarroel Sepúlveda, compañeros
chilenos, perseguidos en su país y presos en la provincia de Neuquén, acusados
de portación ilegal de armas de guerra, difundieron un comunicado público en el
que denuncian la detención de la compañera Andrea Urzúa Cid y el montaje
mediático armado para incriminarla.
Agencia Rodolfo Walsh
Buenos Aires, 26 de setiembre de 2008 (Coordinadora por la libertad de los
presos políticos).-
Comunicado público
A todas las redes de apoyo en Chile, Argentina y diferentes partes del mundo
A toda la gente conciente que lucha por una nueva vida
A nuestros familiares, amigxs y compañerxs
A los medios de contrainformación:
1. A través de estas letras, queremos denunciar una nueva maniobra del estado
policial chileno. Como antaño, hoy se vuelve a confirmar la vigencia y
continuidad del plan Cóndor, el mismo que en los años 70' hizo presa a miles de
militantes de organizaciones revolucionarias en América Latina. Ayer fueron los
militares y sus dictaduras, hoy son las llamadas democracias y sus estados de
derecho (que no son más que la continuidad de las anteriores) los que en
concomitancia y coludidos a través de sus poderes políticos, judiciales y
policiales, le dan marcha por vía de la cooperación de los servicios de
inteligencia y las policías de Chile y Argentina, a la planificación y ejecución
de burdos montajes que permitan reprimir, encarcelar e intercambiar prisioneros.
Es en este contexto en el cual nuestra compañera, Andrea Urzúa Cid, ha sido
involucrada por la policía argentina, al igual que nosotros en Chile, en un
montaje más, lleno de irregularidades policiales y judiciales, donde su único
delito es el porte ilegal de solidaridad rebelde, compañerismo revolucionario y
la anarquía de compartir y repartir su vida llena de sueños revolucionarios con
los que luchan, dentro y fuera de las cárceles.
2. Andrea comienza su viaje el lunes 16 de septiembre desde Chile, bajo un
estricto seguimiento por parte de agentes de la policía chilena hasta Neuquén,
Argentina. Arribó el martes 17 con los esbirros tras ella. Nos visita el
miércoles 18 y nos comunica el seguimiento que sufre desde que se bajó del bus,
pero estaba alegre y tranquila pese a esto, a estar en otro país y bajo estas
circunstancias. Quedamos de vernos al día siguiente en una nueva visita, pero
esta nunca llegó a concretarse y nosotros comenzamos a ser objeto de constantes
requisas, primero con perros y luego con personal de antimotines (en menos de 24
horas sufrimos tres requisas, de donde se llevaron el aceite para cocinar,
fideos y porotos).
Es el viernes 20 que nos enteramos que a nuestra compañera se le había negado el
ingreso el día anterior porque, según la policía penitenciaria, trató de
ingresar una "sustancia", la que de forma increíble sufre tres mutaciones:
primero indican que serían pastillas, luego droga, para finalmente concluir de
la forma más descarada diciendo que eran explosivos. A nuestra compañera no se
le encuentra nada. Se le obliga a firmar un papel pero no se le permite leerlo,
siendo presionada por alrededor de 8 antimotines y oficiales, sin presencia de
juez, defensor ni fiscal. Así, se le niega el ingreso y es obligada a irse del
recinto. Al irse continúa el seguimiento a todas partes y es allanada la casa
donde tenía estadía. Andrea se comunica con abogados de DDHH y se le informa que
no tiene orden de detención y captura, por lo que el día viernes por la tarde
decide emprender su regreso a Chile. Sin embargo, es detenida en la frontera por
personal policial y de gendarmería argentina, y es desde ese momento que, fuera
de todo procedimiento policial y judicial, comienza su secuestro. Se niega
información de ella a sus familiares, amigos y compañeros y es paseada de un
lugar a otro (unidades policiales y diferentes ciudades) como una forma de
dificultar su ubicación.
Es el propio juez Lavate (juez federal que llevará su caso) el que comunica vía
telefónica y desde su juzgado, el día miércoles 24/9, a Mauricio Villarroel que
tenía en su poder a su novia Andrea Urzúa, dando así término al secuestro al que
fue sometida y a la búsqueda por varias unidades y ciudades, como así también
por hospitales donde fue llevada por sus raptores-aprehensores.
3. Para nosotros no existen dudas, Andrea está siendo involucrada en un burdo
montaje por parte de la policía argentina, alentada y auspiciada por la policía
chilena que, una vez más, demuestra a través de la presión y su injerencia en
otros países que no en vano es llamada la Israel de América Latina y, avalada
por el imperio yanki, ocupa sus mismos métodos.
Los hechos narrados son concretos: Andrea fue seguida constantemente, se allanó
la residencia donde estaba sin una orden de detención, la prensa "informa" que
la policía habla de porte de explosivos y recién después de 48 horas se le
detiene en la frontera, esto con el fin de hacer de este montaje un show donde
se indica que trataba de fugarse cruzando la frontera ¿por un paso legal? ¿a
Chile? Chile no dudaría en entregarla si se lo pidiesen.
4. Esto sólo es parte de los esfuerzos del estado chileno para presionar a sus
pares argentinos, con el fin de lograr nuestra pronta expulsión a territorio
chileno. Hoy que estamos por ser condenados en Argentina por portación ilegal de
armas de guerra, con esto se aleja la posibilidad para el estado chileno de ser
enviados de forma rápida para ser sometidos a una prisión infinita al otro lado
de la cordillera. Cuando estamos prontos a un juicio por expulsión, cuando las
redes de solidaridad han crecido y están fuertes en Chile, Argentina, América y
Europa, lo único que se busca es crear acontecimientos que permitan a los
diferentes poderes fácticos de este lado tener los argumentos políticos que les
permitan expulsarnos, ya que judicialmente no los tienen. Y es desde esta misma
forma con la que en definitiva se está atacando a las organizaciones populares y
revolucionarias, tanto de Chile como de Argentina y demás países de nuestra
América morena.
5. Hoy desde esta prisión y sus muros que pretenden callarnos y sepultarnos,
nuestro grito saluda a todas y todos lo que luchas, desde dentro y fuera de las
prisiones. Un abrazo fraterno y acá nada termina, seguimos de pie, jamás
mendigando ni arrodillados. Atacar a nuestro entorno más íntimo y cercano sólo
es parte de la guerra sucia en esta guerra social y de clases.
SÓLO LA LUCHA NOS HACE LIBRES
SALUD Y ANARQUÍA
MIENTRAS EXISTA MISERIA HABRÁ REBELIÓN
Freddy Fuentevilla Saa
Marcelo Villarroel Sepúlveda
Prisioneros políticos de origen chileno
Miristas y libertarios
Viernes 26 de septiembre de 2008
Unidad de detención provincial Nº11
Neuquén, patagonia argentina