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Nicaragua: Grave conflicto con la ESSO Standard Oil Embargadas las instalaciones de Corinto
Giorgio Trucchi
Estación de servicio de la ESSO en Managua (Foto G. Trucchi) A
consecuencia de una demanda presentada por la Dirección General de Aduanas
(DGA), la juez Segundo de Distrito Civil y Laboral de Chinandega, Socorro
Toruño, ha dispuesto el embargo de las instalaciones de la compañia ESSO
en Corinto, una de las más importantes compañías petroleras presentes en el
país.
La demanda tiene que ver con supuestas importaciones no declaradas de petróleo,
a las que se sumaría el pago incorrecto de los Impuestos sobre la Renta (IR) a
la Dirección General de Ingresos (DGI). Según las dos instituciones
nicaragüenses, la ESSO no habría pagado a la DGA acerca de 54 millones de
córdobas (unos 3 millones de dólares) en concepto de Impuestos de Aduana sobre
importaciones, mientras que habría pagado solamente el 25% (en lugar del 30%
previsto por la Ley de Equidad Fiscal) en concepto de IR a la DGI, sobre un
total declarado de 49 millones de córdobas (unos 2.7 millones de dólares).
La juez Toruño dió lugar por lo tanto a la demanda de la DGA y embargó las
instalaciones de almacenaje y distribución de Corinto, principal puerto de
Nicaragua en el océano Océano Pacífico, nombrando como depositario del embargo
al administrador de la DGA de Corinto. Mientras comenzaban las primeras
negociaciones entre la compañía, el Ministro de Energía y Minas, Emilio
Rappaccioli y las instituciones involucradas en la demanda y mientras la
embajada estadounidense tronaba contra la supuesta violación a la propiedad
privada y al libre comercio, abriendo camino a una posible crisis entre los dos
países, la DGA, en calidad de depositaria del embargo, tomaba la decisión de
arrendar por un plazo de seis meses renovables el Plantel Uno con sus siete
tanques de almacenaje a la estatal Empresa Nicaragüense de Petróleo (PETRONIC).
Inmediatamente después de haber acordado el arriendo, decenas de trabajadores y
técnicos de PETRONIC tomaron el control del plantel y comenzaron a almacenar en
los tanques parte del petróleo procedente de Venezuela, petróleo que el gobierno
de Ortega negoció con este país en el marco de los proyectos de cooperación
logrados a través de la participación de Nicaragua a la Alternativa Bolivariana
para las Américas (ALBA).
Pocos días después de haber decretado el embargo a las propiedades de la ESSO y
mientras continuaban las negociaciones entre las partes, la juez Toruño decidió
nombrar como depositario a un nuevo sujeto, en ese caso al señor Gabriel
Cedeño, gerente de la ESSO en Corinto, pero con la obligación de respetar el
arriendo que el depositario de Aduanas suscribió con PETRONIC. Según el asesor
Internacional para Asuntos Gubernamentales de la ESSO, Milton Chávez,
"esta nueva disposición de la juez Toruño no es aceptable, en cuanto las
instalaciones del plantel de la terminal de Corinto siguen tomadas por el
personal de PETRONIC y esto quiere decir que la ESSO no ha retomado todavía el
control de las instalaciones". Es por eso que la compañía norteamericana optó al
final por no recibir su terminal en el puerto de Corinto y no aceptar el
nombramiento en calidad de depositario dispuesto por la juez Toruño. Pocas horas
después, el gerente de Asuntos Públicos e Internacionales de la ESSO, Alfredo
Fernández, anunció que la empresa recurrió de apelación en contra de la
resolución judicial que la obliga a mantener en vigencia el contrato de arriendo
a PETRONIC, firmado por el antiguo depositario del embargo. "Queremos que se
respete la ley -declaró Fernández- y la ley dice que el bien debe ser devuelto
sin gente que no sea de la ESSO adentro. Una vez que se nos regrese podemos
conversar de cualquier cosa, pero así no se puede hacer nada" concluyó el
gerente de Asuntos Públicos e Internacionales de la compañia.
La grave crisis que se ha generado en Nicaragua con la transnacional
norteamericana ha despertado mucha preocupación y fuertes críticas en la
oposición al gobierno de Daniel Ortega y en la empresa privada nicaragüense (COSEP).
Si por un lado parece ser cierto que la ESSO tenga algo que explicar acerca de
sus importaciones de petróleo y de los impuestos que pagó incorrectamente sin
respetar lo que preve la legislación nicaragüense, por el otro no hay duda de
que la creciente crisis energética a la que se está enfrentando el gobierno de
Ortega, faltando 13 meses a las elecciones municipales, haya dado mayor impulso
a la búsqueda de una solución.
Es por lo tanto muy posible que frente a las dificultades en las negociaciones
con la ESSO para que esta compañia arrendara sus tanques donde almacenar el
petróleo venezolano, el gobierno haya decidido cambiar de estrategia y presionar
a la compañia norteamericana de esta forma.
Según Rodolfo Zapata, gerente general de PETRONIC, "no podemos negar que
necesitamos más tanques para almacenar más petróleo de Venezuela. Actualmente
logramos descargar unos 70 mil barriles de crudo en los recipientes de PETRONIC,
pero nos hacen falta tanques para unos 50 mil barriles más. Con los de la ESSO
lograríamos almacenar 20 mil barriles más y estamos negociando con otras
empresas para ver cómo logramos que nos apoyen" concluyó Zapata.
Mientras sigue la querella entre el Estado y la ESSO, a la compañia
norteamericana se le está abriendo otro flanco. Según Eduardo Gaitán,
Director de Recaudación de la Alcaldía de Managua, "las petroleras deben a
nuestra Alcaldía más de 140 millones de córdobas (unos 9,6 millones de dólares)
en concepto de matrícula y la ESSO encabeza esta lista adeudando unos 90
millones de córdobas (4,9 millones de dólares)". Gaitàn explicó que no se trata
de un nuevo impuesto, "en cuanto no estamos gravando las ventas brutas de las
petroleras, ya que el petróleo y sus derivados están exentos de tributos
municipales, sino exigiendo el pago de la matrícula que toda actividad económica
del municipio debe pagar", concluyó Gaitán.
© (Texto y Fotos Giorgio Trucchi - Lista Informativa "Nicaragua y más" -
Asociación Italia-Nicaragua)