Latinoamérica
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Kintto Lucas, un periodista extraño...
"Correa debe cuidarse de burócratas estatales y privados"
Ana Molina
AIN
El escritor y periodista uruguayo, Kintto Lucas, residente en Ecuador desde
hace más de quince años, presentó hace pocas semanas un nuevo libro titulado
Rafael Correa. Un extraño en Carondelet que, como es costumbre con sus obras, ya
está entre los más vendidos de este país andino.
Conocedor de la realidad social, política y económica de América Latina y
Ecuador, en esta ocasión Lucas analiza la realidad que rodea al polémico
presidente ecuatoriano, utilizando fuentes de primera mano y un análisis crítico
de los hechos.
Para conocer un poco más sobre este nuevo libro, asimilar el proceso político
que vive Ecuador y comprender las contradicciones que produce el gobierno
izquierdista, entrevistamos al autor.
- ¿Qué sentido tiene hacer un libro sobre Rafael Correa?
Nadie puede ocultar que América del
Sur vive un período de cambios, que en determinado momentos da la impresión que
se aceleran y en otros van un poco más lento. Hay gobiernos de izquierda, que
responden a características diferentes de acuerdo a la realidad de cada país,
pero que en lo estratégico tienen una mirada bastante común. Yo digo que han
llegado a la presidencia de varios países de América del Sur personajes
"extraños" al poder tradicional. Dentro de esa realidad surge y llega al
gobierno Rafael Correa, a quien muchos todavía no llegan a comprender. Por lo
tanto es importante conocer qué profundidad tiende el proceso en que está
inmerso, y para eso es necesario visualizar el contexto recurriendo a fuentes de
primera mano, dejando de lado las anécdotas secundarias típicas de ciertos
medios de comunicación.
Para Ecuador, y en perspectiva para América del Sur, es un proceso diferente y
muy interesante, que incluso podría sentar bases de transformaciones
estructurales hacia futuro. Por lo tanto, ahí está el sentido de un libro como
éste.
- ¿Cómo analizaría la realidad actual del Ecuador y el comportamiento del
presidente de ese país?
- No hay duda que Ecuador vive un tiempo de cambios, y todo tiempo de cambios
reales profundiza las contradicciones políticas, sociales y económicas. Si no
ocurriese eso, no podríamos hablar de que se vive un tiempo de cambio. Este
tiempo puede tener un momento importante en la Asamblea Constituyente, a partir
de la cuál podremos divisar si el tiempo de cambios se encuadra dentro de un
proceso histórico de transformaciones o se queda a medio camino. No vivimos un
período revolucionario, pero vivimos un período en el que se podrían sentar las
bases para un proceso transformador, tal vez revolucionario, aunque para eso
falta mucho...
- En pocas palabras, ¿quién es Rafael Correa?
- Es una persona preocupada con la realidad social del país, que llegó a esa
preocupación primero a través de la academia y de sus estudios como economista.
Luego se fue comprometiendo con una postura de izquierda y desarrolló cierta
conciencia de la necesidad de transformación social y cambio estructural para
poder modificar esa realidad que había visto en sus estudios. Como señalo en el
libro, creo que está construyendo un camino. Está caminando y aprendiendo a
caminar para poder seguir caminado, y eso es mucho, pero su responsabilidad es
muy grande y en este momento histórico no tiene derecho a fallar...
- En las últimas semanas aumentó los enfrentamientos de Rafael Correa con los
medios de comunicación. ¿No esta en peligro la libertad de expresión en Ecuador?
- En Ecuador no hay libertad de expresión desde hace mucho tiempo. En un país
en el que los grandes medios de comunicación no le dan posibilidades de
expresarse a los distintos sectores que forman parte de la diversidad nacional,
no se puede decir que haya libertad de expresión. Pregúntele a los distintos
movimientos sociales cuál es la libertad que tienen para expresarse en los
grandes medios. Si tenemos en cuenta que esos grandes medios fueron repartidos
entre unos pocos grupos de poder, vemos definitivamente que la libertad de
expresión no está en peligro porque en realidad no existe.
- ¿Y en cuanto a la relación del Presidente con los medios?
- Rafael Correa ha logrado transparentar un tema fundamental de la realidad
ecuatoriana, como es el poder que tiene la Banca y el papel que cumplen ciertos
medios de comunicación en la defensa de ese poder. Como consecuencia, estos
medios, al igual que la Banca y otros sectores de poder, se asumieron como
opositores políticos del gobierno. Ante el quiebre de los partidos políticos
tradicionales que muchas veces representaban los intereses de esos grupos de
poder, en la actualidad algunos medios, la Banca y ciertos clanes empresariales
decidieron transparentarse y representarse a sí mismos sin recurrir ya a los
intermediarios políticos. Algunos fundaron su partido y ya son candidatos a la
Asamblea Constituyente. No es nada difícil, además, que algún "periodista
estrella" de televisión se constituya en un presidenciable con capacidad de
disputarle a Correa las elecciones que vendrán seguramente después de la
Asamblea Constituyente. El hecho de obligar a transparentar esa realidad de los
medios y de la Banca, es en sí un logro del mandatario. Pero además, por primera
vez en muchos años, puso a los diferentes sectores vinculados a la comunicación
a debatir sobre las relaciones de poder en los medios de comunicación, la
"libertad de expresión" en todas sus dimensiones y diversos temas que los
comunicadores parecían haber olvidado. Sin embargo, en este camino ha cometido
varios errores políticos. Aunque el diario La Hora haya utilizado un titular
amarillista como "Vandalismo oficial" en un caso, y en otro "Correa asalta la
Junta Bancaria", el juicio del mandatario a ese periódico es un error político.
Aunque no vaya en contra de un periodista, sino de un empresario, no se puede
estar de acuerdo con la medida porque judicializa la opinión y sienta un mal
precedente ya que abre las puertas a que se puedan multiplicar los juicios por
injurias contra periodistas en un país donde el Poder Judicial es muy
cuestionado. En provincias, donde la mayoría de veces los hechos no cobran
estado público a nivel nacional, puede ocurrir que cualquier alcalde, concejal o
consejero decida enjuiciar a un periodista local por denunciar un abuso o
irregularidad del funcionario, contando fácilmente con el beneplácito de algún
fiscal y algún juez. En los últimos tiempos han ocurrido dos casos que son
ejemplo en Latacunga y Machala. Otro error del Presidente es que, en ciertas
ocasiones, ha personalizado en algunos periodistas la crítica a los medios como
instrumentos de poder, porque además de ser muy injusto con sus apreciaciones,
como en el caso entre otros de llamar "gordita horrorosa" a una periodista de El
Universo, finalmente esas actitudes se van contra él propio mandatario. Pero,
sobre todo, porque distrae la atención del centro nodal del conflicto que es con
la Banca y los medios vinculados a ésta y a otros sectores de poder. Tampoco ha
existido ni existe una verdadera política de comunicación, en parte por
incapacidad de algunos, en parte por la vinculación con los grandes medios de
quien está encargado de decidir en el tema.
- ¿Cómo explicaría usted esta contradicción de un presidente "ecologista" que
abre la puerta a la matanza de tiburones?
- El decreto presidencial sobre la comercialización de aletas de tiburón
pescados incidentalmente no empeora nada, solo da transparencia a algo que
ocurría a escondidas y sin ningún control de nadie. No soluciona el problema de
la pesca ilegal de tiburones, pero tampoco lo empeora. Sin embargo, el gobierno
ha cometido un grave error político, porque con este decreto le ha entregado en
bandeja a los sectores de poder una causa "noble" cuando más la necesitaban...
Creó las condiciones para el ataque masivo de los tiburones de tierra... Hay
errores que no se pueden cometer porque se da armas al enemigo. En el camino
hacia la transformación radical de cualquier país, hay peleas centrales y peleas
secundarias. El gobierno a veces confunde cuáles son las peleas secundarias. En
todo caso, llama la atención que de un momento a otro, la gran mayoría de medios
de comunicación, gran parte de los empresarios y banqueros, representantes de
partidos y movimientos políticos y representantes de ciertas ONGs que ganan
buenos sueldos, se hayan declarado defensores del medio ambiente. Como por arte
de magia, hasta los más conspicuos depredadores de la sociedad se han
transformado en serios guardianes de la ecología ecuatoriana. También, como por
arte de la misma magia, de un momento a otro comenzaron los "grandes" decomisos
de aletas de tiburón. Y allí están todos los canales de televisión mostrando la
maldad de los pescadores y del gobierno... Es mucha casualidad.
Es mucho cuento. Claro que entre ese mar de cuenteros disfrazados, también hay
gente jugada por la naturaleza que el gobierno debe escuchar.
- Al conversar con usted parecería que apoya a Rafael Correa...
- Quienes no somos burócratas estatales o privados del periodismo o la política,
pero tenemos un compromiso de siempre con nuestro tiempo somos más libres para
apoyar y criticar cuando lo juzgamos necesario, entonces podemos dar la voz de
alerta cuando vemos que hay desviaciones, o cuando la burocracia se está
institucionalizando. Pero mi apoyo crítico no es al presidente Correa como
persona, es a un proceso de cambio que se ha venido gestando desde distintas
instancias, desde diversas luchas sociales, desde hace mucho tiempo. En este
momento, la oportunidad histórica colocó a Correa como una pieza relevante
dentro del proceso, y él hasta el momento, con errores y todo, ha sabido estar a
la altura. Por lo tanto hay que apoyarlo, y cuando sea necesario criticarlo,
para que su aporte en este proceso sea verdaderamente trascendente. De la misma
forma que se debe alertar sobre los peligros que le acechan, hay que estar
siempre dispuestos a dar la voz de alerta cuando ciertas figuras nada extrañas
quieren llevarlo por otro camino; cuando quieren ponerle piedras para que
tropiece; cuando -como ocurre en ciertos casos- la incapacidad, el amiguismo o
el nepotismo están minando el proceso, que es mucho más que minar su
credibilidad. Quienes no tienen un compromiso consciente con un proceso y están
atado a determinadas vinculaciones privadas, desde un puesto gubernamental no
harán nada para quebrar esos vínculos, porque mañana al dejar ese trabajito
estatal puede volver a ganar bien en el ámbito privado. Pueden dejar de ser
burócratas estatales para volver a ser burócratas privados. Eso ocurre con
algunos personajes del gobierno que serán los primeros en abandonan el barco si
la situación se pone difícil... Hoy es el gobierno el que paga sus sueldos,
mañana serán los enemigos del gobierno quienes lo hagan. A los burócratas
estatales o privados, que son aquellos a los que se les paga para no pensar, que
se acomodan y acomodan a sus hijos y esposas donde sea siendo periodistas,
ecologistas o cuentistas, que no tienen compromiso con ningún proceso de cambio,
porque su único compromiso es con su bolsillo y con su interés personal, les
cuesta imaginar que haya personas comprometidas desde toda su vida, que no ganan
los sueldos que ellos tienen y que muchas veces son vetados por mantener
posturas dignas, pero que nunca dejarán de lado la coherencia entre lo que dicen
y lo que hacen.
- Para terminar describa para los lectores como definiría este nuevo libro.
- Es un amplio reportaje que contextualiza las acciones de Rafael Correa y los
hechos que rodean esas acciones, desde el momento que despega como sujeto
político hasta que se transforma en el presidente con mayor popularidad del
país. El libro brinda información, presenta escenarios e interpreta el camino
político del Presidente dentro del país y de América del Sur. Para eso analiza
el rumbo de Ecuador y de Correa antes de ser electo, interpreta cómo se gestó su
candidatura, recuerda su gestión como Ministro de Economía y Finanzas, vuelve a
la campaña electoral, y analiza sus primeros 75 días en la presidencia, su
discurso, sus acciones, sus alianzas, las contradicciones internas en su
gobierno, las presiones externas, las influencias políticas, la correlación de
fuerzas a nivel social, político y económico en el país y América del Sur, los
intereses de quienes lo apoyan, entre los cuales hay unos que no son nada
extraños, y los intereses de quienes se oponen a él.
EL ENTREVISTADO (recuadro) Kintto Lucas nació en Salto (Uruguay) y se radicó en
Quito en 1992. Es Premio Latinoamericano de Periodismo José Martí 1990. En
Uruguay fue miembro del Consejo Editorial del Semanario Mate Amargo. En Ecuador
ha sido Editor Cultural y Editorialista del diario Hoy, Editor de la Revista
Chasqui de CIESPAL y Director Editorial de la revista Tintají, además de
colaborador de los diarios El Comercio de Quito y Expreso de Guayaquil.
Actualmente es corresponsal de la Agencia de Noticias Inter Press Service (IPS)
y de la revista Brecha de Montevideo. En 2004 recibió la Pluma de la Dignidad de
la Unión Nacional de Periodistas del Ecuador en reconocimiento a su trayectoria.
Ha sido docente de periodismo en la Pontificia Universidad Católica y en la
Universidad Andina Simón Bolívar; además de conferencista de diversas
universidades y de la Comisión de Control Cívico de la Corrupción. Es un
reconocido analista político, y ha sido asesor de organizaciones indígenas.
Algunos de sus libros son: Rebeliones indígenas y negras en América Latina (Abya
Yala, 1992); Mujeres del siglo XX (Abya Yala, 1997); Apuntes sobre fútbol (Abya
Yala, 1998); La rebelión de los indios (Abya Yala, 2000), traducido al inglés
con el título We Will Not Dance on Our Grandparent's Tombs. Indigenous uprisings
in Ecuador (IICR, Londres 2000); Plan Colombia. La paz armada (Planeta, 2000),
El movimiento indígena y las acrobacias del coronel (Tintají, 2003) y Un país
entrampado (Abya Yala - Tintají 2005). Con sabor a gol. Fútbol y periodismo
(Biblioteca del Fútbol Ecuatoriano, FLACSO, Quito, 2007)