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Latinoamérica

A 21 años del asesinato todavía no hay justicia:
Inminente fallo de segunda instancia por el asesinato del periodista chileno José Carrasco Tapia

Ernesto Carmona

La novena Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago, presidida por el ministro Jorge Dham Oyarzún, escuchó ayer (martes 4) los alegatos sobre las condenas en primera instancia de los asesinos del periodista chileno José Humberto Carrasco Tapia, dictadas a fines de 2006 por el magistrado Haroldo Brito. Se espera que este tribunal emita un fallo en los próximos días. El castigo a los asesinos de la víctima más emblemática del periodismo chileno continúa empantanado en los tribunales de justicia después de transcurridos 21 años de la comisión de este crimen de lesa humanidad.

Los compañeros, colegas, familiares y amigos del periodista se reunirán este sábado 8 de septiembre, a las 12 del mediodía, en el cementerio Parque del Recuerdo precisamente cuando se cumplen 21 años del asesinato y en el mismo sitio en que se cometió el alevoso homicidio, frente al muro sur del camposanto. Este tributo anual "in situ" a la memoria de Carrasco se ha convertido en una tradición del Colegio de Periodistas de Chile. Un autobús especial, proporcionado por el Consejo Metropolitano de la Orden, partirá rumbo al lugar del homenaje a las 10:45 horas del sábado desde Amunátegui 31, sede del Colegio y del Círculo de Periodistas.

Lentitud judicial

Los tres magistrados de la novena Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago escucharon durante 4 horas del martes 4 de septiembre los alegatos de todas las partes involucradas por la condena de primera instancia de los asesinos del periodista, dictadas en los últimos días de diciembre 2006 por el magistrado Haroldo Brito.

Las condenas que afectan a los asesinos de Carrasco recaen contra Julio Federico Corbalán Castilla, Iván Raúl Belarmino Quiroz Ruiz, Jorge Octavio Vargas Bories y Carlos Guillermo Fachinetti López en calidad de autores de los delitos de secuestro y homicidios del periodista. Esa misma noche del 8 de septiembre de 1986, ese mismo grupo que dio muerte a Carrasco Tapia participó con otros sujetos en el asesinato de otros tres disidentes de la dictadura de Augusto Pinochet Ugarte.

En los otros crímenes, los mismos esbirros que mataron a Carrasco también colaboraron en los homicidios de Gastón Vidaurrázaga Manríquez, Abraham Muskatblit Eidelstein y Felipe Rivera Fajardo, asesinados con participación de otros ocho sujetos condenados en esta misma causa. Probablemente, el fallo de la Corte de Apelaciones se de a conocer en los próximos días, en coincidencia con el 21º aniversario de estos asesinatos.

Los alegatos

El magistrado Jorge Dahm y sus dos colegas de la novena sala escucharon durante 4 horas los alegatos de los abogados de la defensa del grupo de criminales, las tesis del representante del Consejo de Defensa del Estado –quien pretende eliminar las indemnizaciones del Estado a los familiares de las víctimas– y las argumentaciones de los juristas acusadores Nelson Caucotto y Héctor Salazar. También intervino un abogado del Colegio de Periodistas que reclama una indemnización institucional.

Al alegato asistieron los familiares de todas las víctimas asesinadas el 8 de septiembre de 1986, en venganza por un fallido atentado contra el dictador Augusto Pinochet. La viuda de José Carrasco, Olivia Mora Campos, quien estuvo presente en la audiencia de 4 horas, informó que los asesinos confesos se comportaron como "inocentes palomas" aduciendo –a través de sus abogados– que esa noche fatídica habían cumplido órdenes de sus superiores de la Junta de Gobierno para detener a las cuatro víctimas, ignorando que deberían darles muerte.

La defensa de los criminales afirmaron que la culpabilidad primaria recaía en los jefes del régimen militar y sus servicios de inteligencia, También alegaron prescripción, alegando que la primera diligencia en los tribunales se verificó en 1998, 12 años después de cometido el crimen, desestimando que bajo la dictadura de 17 años (1973-2000) los tribunales de justicia ignoraron permanentemente la violación sistemática de los derechos humanos acaecida en Chile.

Los acusadores Caucoto y Salazar argumentaron que los cuatro crímenes constituyen delitos de "lesa humanidad", que por lo tanto no tienen prescripción, según los tratados internacionales de derechos humanos suscritos por el Estado de Chile. También señalaron que la banda constituyó una asociación ilícita que participó además en numerosos otros asesinatos colectivos, como la llamada Operación Albania.

Respecto a las pretensiones del Consejo de Defensa del Estado de eliminar las indemnizaciones a las víctimas de los crímenes cometidos precisamente por agentes del Estado, los abogados Caucoto y Salazar reclamaron por que se cumplan los conceptos de Verdad, Justicia y Reparación, tres preceptos clave del espíritu de la legislación chilena y de los tratados internacionales.

Las condenas

El fallo en primera instancia condenó al ex jefe operativo de la Central Nacional de Informaciones (CNI) Álvaro Corbalán, a 18 años de prisión por su participación en los cuatro asesinatos. En total hay otros 13 sujetos involucrados en las cuatro muertes.

El ex capitán de ejército Jorge Vargas Bories y el mayor retirado de Carabineros Iván Quiroz Ruiz fueron sentenciados a 13 años por dos crímenes. Como coautores de asesinato están condenados a 8 años de prisión Pedro Javier Guzmán Olivares, Gonzalo Fernando Mass del Valle, Kranz Bauer, Jorge Enrique Jofré Rojas y Juan Alejandro Jorquera, en tanto otros seis ex agentes fueron sentenciados a 5 años y un día: Víctor Hugo Lara Cataldo, René Armando Valdovinos Morales, Víctor Manuel Muñoz Orellana, Eduardo Martín Chávez Baeza, Guillermo Fachinetti López y José Ramón Meneses Arcauz.      

Fuente: lafogata.org