La revista de la Federación Argentina de Cooperativas de Trabajadores Autogestionados (Facta), mensualmente da cuenta de los procesos organizativos y productivos de 32 empresas recuperadas del país. Una importante herramienta de comunicación y de articulación de la clase trabajadora.

Cada día millones de noticias circulan por los medios de comunicación, arrasadas por el poderoso caudal informativo, se tapan entre sí, invaden las pantallas, los servicios informativos y los celulares con actualizaciones permanentes. Fenómeno que no garantiza que estemos informados, o que tengamos una mirada crítica sobre aquello que se nos muestra del mundo. Por su parte, la prensa gráfica aún conserva el tiempo de la reflexión, o al menos, de la lectura con un ritmo propio.
El mundo de los trabajadores autogestionados tiene su espacio de comunicación en papel todos los meses a través de la revista de Facta, una herramienta expresión y de articulación de sus luchas. La Federación está integrada por 30 cooperativas y dos movimientos, el Mocafor (Movimiento campesino de Formosa) y la Corriente el Pueblo (Jujuy).
La vida y la dinámica de las recuperadas llena de contenido cada página de la publicación, con historias de resistencia, en el camino de una economía más justa y solidaria. Al ritmo del cuarteto, la publicación se imprime en Villa María, provincia de Córdoba, en los talleres de "El diario del Centro del País", un medio recuperado impulsado por la cooperativa Comunicar. Los contenidos van produciéndose de manera colaborativa con materiales enviados por cooperativas de distintos puntos de la Argentina. Se diagrama en Buenos Aires y es coordinada por el equipo editorial.
El medio gráfico funciona como herramienta de articulación al interior del movimiento autogestionado, ya que permite que los trabajadores sepan en qué andan las recuperadas colegas; como hacia fuera, para instalar el tema en términos económicos, políticos y sociales en el conjunto de la comunidad. "Los que estamos haciendo la revista, que somos un grupo de 8 compañeros, tenemos idea de formar una cooperativa de trabajadores de prensa Nuestra Prensa, ya estamos haciendo trámites ante el Inaes", expresa Manolo Robles, en diálogo con enREDando.

De las ideas al papel
"Anter (Agencia de Noticias de los Trabajadores de las Empresas Recuperadas) aparece como una iniciativa del Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas (MNER), al tiempo de estar funcionando, la mayoría de los compañeros resuelve generar una herramienta organizativa más sólida, desde el punto de vista jurídico y orgánico, y se crea Facta", sostiene Robles. "Una de las ideas es generar instancias de unidad entre el conjunto de empresas recuperadas. Desde el arranque, los trabajadores de Facta se consideran parte de la clase trabajadora en su conjunto, por eso la revista tiene la idea de convocatoria a la unidad o de apertura de espacios a compañeros que no pertenecen a Facta", continua.

Hojeando la revista
En cada edición se desarrolla la historia de una empresa recuperada, la que actualmente está en la calle cuenta la experiencia de la fábrica de tractores Panny Zanello, actual cooperativa de trabajo Las Varillas, ubicada en el pueblo homónimo. También hay notas con información más coyuntural (vinculada a las recuperadas), así como aportes de colaboradores, por ejemplo, del economista Eduardo Lucita. "En esta edición Lucita hace una nota sobre el Che Guevara y la autogestión. También hay un artículo del Laboratorio Análisis Institucional de Rosario, que es un grupo que viene haciendo un taller con presidentes de las cooperativas y empresas recuperadas", explica Manolo. "El eje es la información de recuperadas con distintas miradas, no solo desde adentro, sino con gente que se acerca a colaborar. La idea es ir contando cosas propias de cada recuperada; como la compra de un autoelevador que servirá para mejorar el proceso de producción, o el plan de vivienda que los compañeros de Jujuy están haciendo con las Madres de Plaza de Mayo".
Más allá de las particularidades, las mismas necesidades atraviesan a las recuperadas, entre ellas, la Ley Nacional de Expropiación y contar con un fondo específico de financiamiento (a las cooperativas y recuperadas les resulta muy difícil acceder al crédito por el sistema financiero tradicional). "La idea es tomar los reclamos en conjunto, independientemente de la construcción que cada uno esté llevando adelante. También está el tema de las leyes sociales, hay que generar un régimen especial de jubilación, pensar en la inserción en obras sociales", referencia Robles.

Hacia adelante
"Esto tiene que ver con un proceso, hay un grupo de autogestionadas que ya lleva unos diez años funcionando, están más consolidadas organizativa y económicamente, tienen tiempo para pensar en cosas que antes no aparecían como necesarias y fundamentales. Hay una necesidad de seguir creciendo y a la vez sigue habiendo ataques contra el trabajo autogestionado, conflictos, cuestiones judiciales, ordenes de desalojos, amenazas y demás, para contrarrestar eso es fundamental contar con un buen trabajo de prensa. Eso funcionó muy bien en el conflicto del Bahuen, que en horas se armó una red de solidaridad. A partir de estos hechos se ve más clara aún esa necesidad", reflexiona Robles.