Medio Oriente - Asia - Africa
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Pasó el rey de Marruecos y dejó una estela de sangre saharaui
Otra vez Smara
Salka Embarek (Olmy)*
Altercom*
Adolescente torturado en su casa por tropas facistas del reyMohamed
Más de ciento treinta personas, ciudadanos saharauis, han sido detenidos y
torturados en sus casas, en la calle y en la comisaría. Avergonzaron a las
mujeres arrancándoles la melfa y dejándolas semidesnudas ante la indignación de
un pueblo que las cubrió de pudor.
Todos querían agasajar a Otmani El-Lud Emman, que llegaba a casa después de ser
liberado tras el indulto concedido por el representante de Dios en la Tierra, el
rey de Marruecos, Mohamed VI. Salieron a la calle en manifestación para cubrirlo
de banderas saharauis y aliviar así el sufrimiento padecido todo este tiempo en
la cárcel por defender los derechos de su pueblo, pero apenas llegó a su hogar
entre abrazos y besos, las fuerzas de seguridad marroquíes asaltaron su casa, lo
golpearon hasta hacerlo perder el conocimiento y lo maniataron arrojándolo a la
calle. Su madre estaba desesperada, sus ojos se anegaron de lágrimas y corrió a
protegerlo del dolor, soportando en su espalda los golpes que dirigían hacia él.
Quedó exhausta, junto a su hijo, en un baño de sangre.
Muchos años, mucha sangre. Más tarde supimos que otros cuatro hogares más fueron
asaltados y destrozados.
Qué lentas pasaron las horas en la madrugada del lunes. El ejército y la
gendarmería recibieron la felicitación del rey por su campaña de represión. Este
es el precio que deben pagar los activistas saharauis de Derechos Humanos por
ser incluidos en el tan anunciado indulto a 216 presos supuestamente saharauis,
de los que sólo han sido liberados unos 30 presos políticos, el resto son presos
comunes marroquíes y la mayoría traficantes de droga que han comprado su
libertad a los funcionarios de la cárcel.
La decepción y el enfado popular por el engaño, no se ha hecho esperar.
Siguen en prisión 35 presos políticos saharauis y las revueltas en cárceles como
Nador (al norte de Marruecos), la cárcel Negra de El Aaiún, cárcel de Tiznit, de
Ait Mel-loul y la cárcel de Inzegan, traspasan ya los muros de la prisión en las
que también los presos comunes saharauis están organizando sentadas y rechazan
la comida como señal de protesta ante la burlona farsa del rey.
En Inzegan, los reclusos han iniciado ayer una huelga de hambre de 48 horas como
antesala a otras acciones reivindicativas. Otros dos presos comunes saharauis,
en la cárcel de Nador, han entrado en huelga de hambre abierta en protesta por
su exclusión y como denuncia ante la gran mentira que el régimen marroquí
pretende hacernos creer.
El rey se fue, pero antes de dar la espalda soltó a los perros y bajó el pulgar.
Otra vez Smara.
«Deprisa, deprisa, avisa a la prensa, esto es una masacre», minutos más
tarde ya no volvimos a hablar con él.
Ha amanecido y el sol escuece en las miles de heridas abiertas anoche, ayer y
siempre, en Smara, en El Aaiún, en Dajla, en Bojador... y en todas las ciudades
asfixiadas por tantas heridas a uno y otro lado del muro.
El rey se fue, lo repito para que lo escuchen las familias saharauis a las que
les fueron confiscados sus hogares, sí, ya podéis volver a casa.
Se marchó y no habló ni siquiera de su ridícula autonomía, que por otro lado,
jamás aceptaremos puesto que exigimos nuestra independencia a través de un
referéndum justo y democrático con las directrices establecidas por la ONU.
No habló de nada, se limitó a pasearse vestido de Armani por las calles de un
territorio que le da miedo. Sus lamentables comentarios, lanzados sin argumentos
sólidos, desorientan a la prensa internacional que tiene que desmentir a diario
sus palabras...
Mohamed VI fue al Sáhara por lana y salió trasquilado, su visita supuso un
acto despótico e insultante para las resoluciones de la ONU y una provocación
para todos los ciudadanos saharauis que, a pesar del tupido despliegue policial,
desafiaron pacíficamente su poder lanzándose a las calles conscientes de su
desprotección pero seguros de su lucha.
Hace unos días levantó el pulgar y liberó a unos pocos presos políticos
saharauis que su régimen condenó en juicios sumarios, encarceló y torturó con la
naturalidad que lo hacen los gobiernos autoritarios y despóticos.
El domingo bajó el pulgar y arrasó Smara.
Habrá que cortarle la mano a este emperador romano.
Altercom
Agencia de Prensa de Ecuador. Comunicación para la Libertad.
Salka Embarek (Olmy)
Escritora y poeta saharaui