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"Un dictador más muere en la absoluta impunidad"
Murió el ex dictador paraguayo Alfredo Stroessner
Efe
La diputada socialista Isabel Allende afirmó que la muerte del ex dictador
paraguayo Alfredo Stroessner, ocurrida hoy en Brasil, "no produce tristeza" y
que lo mismo ocurrirá cuando fallezca Augusto Pinochet.
"La muerte de una persona siempre será un dolor para su familia, pero para el
resto Stroessner siempre será el violador de los derechos humanos y alguien que
no respetó el derecho a la vida", precisó la parlamentaria, hija del fallecido
presidente chileno Salvador Allende.
"Para quienes han sido dictadores, su muerte no puede producir tristeza en sus
pueblos y otro tanto va a ocurrir acá el día que muera Augusto Pinochet",
subrayó en conversación con la agencia EFE.
Agregó que la participación de Stroessner en la Operación Cóndor "fue una de las
más siniestras que se haya conocido para asesinar y hacer desaparecer a
opositores de izquierda".
La "Operación Cóndor" consistió en la coordinación de los servicios de
inteligencia de las dictaduras del Cono Sur en los años 70 y 80 para la
persecución y exterminio de opositores en Argentina, Bolivia, Brasil, Chile,
Paraguay y Uruguay.
"Yo espero que ese triste récord nunca más se repita y creo que esa es la gran
lección que nos deja, que nunca más haya operaciones Cóndor y nunca más haya
desaparición de personas", recalcó Isabel Allende. "Afortunadamente el respeto
al Estado de derecho y a las personas es lo que se ha ido imponiendo en los
últimos años", concluyó.
Por su parte, Viviana Díaz, secretaria de la Agrupación de Familiares de
Detenidos Desaparecidos (AFDD), recalcó que Stroessner, que gobernó Paraguay
durante 35 años, fue "un violador sistemático" de los derechos humanos.
"Es el responsable de crímenes de lesa humanidad contra el hermano pueblo
paraguayo y pudo después vivir tranquilamente en Brasil, donde nunca fue
juzgado, procesado y condenado", señaló a Efe Viviana Díaz.
"Stroessner, junto a Augusto Pinochet, Rafael Videla y Hugo Banzer, entre otros
ex dictadores, son los responsables del siniestro plan Cóndor que permitió a las
dictaduras del Cono Sur de manera coordinada y sistemática eliminar a militantes
de la izquierda", recordó.
"Sabemos que él nunca se arrepintió de los crímenes que ordenó cometer, así que
nos solidarizamos con los familiares de sus víctimas en Paraguay y les enviamos
un saludo fraterno", agregó la dirigente.
Lamentó que el ex dictador paraguayo haya muerto "tranquilo, en su cama, sin
haber sido juzgado, procesado y condenado por tanto paraguayo que fue asesinado
cruelmente durante todo su período dictatorial".
"Al igual que en Paraguay, los chilenos seguimos buscando que Pinochet algún día
responda por sus crímenes, pero sentimos que va a pasar el tiempo y va a morir
en su cama o en una clínica como murió Stroessner, sin que haya habido ni
siquiera un castigo para él", se lamentó Viviana Díaz.
Pinochet está imputado como autor intelectual de nueve secuestros y un asesinato
dentro de la investigación sobre los crímenes cometidos durante la "Operación
Cóndor".
En un tono similar se expresó, el abogado de derechos humanos Hugo Gutiérrez
lamentó que la muerte de Stroessner haya dejado a todo un pueblo sin poder
juzgarlo.
"Lo siento tanto por el pueblo paraguayo que no pudo ver consumada sus ansias de
justicia", dijo el jurista a la misma agencia al compartir con Allende que
Stroessner fue uno de los principales promotores de la Operación Cóndor.
Los acusadores han reiterado que Chile fue "el nido del Cóndor" y que en
procesos en Argentina y Paraguay se constató que la primera reunión de los
aparatos de seguridad de las dictaduras del cono sur tuvo lugar en 1975 en
Santiago.