Latinoamérica
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La crisis del imperialismo y la lucha de los pueblos hoy
Alejandro Martínez
El terrorismo imperialista con sus guerras económicas, políticas y militares y sus rol de superpotencia está en crisis; su viejo y nuevo orden hegemónico y de invencibilidad son relativos pese a que los "amos del mundo" persisten en sembrar el desconcierto, el terrorismo y la impotencia entre los trabajadores y los pueblos del mundo.
El "fin de las ideologías", la "globalización imperial", "la mundialización e internacionalización" y sus capitales especulativos terminaran por sepultar al imperio que ya sin "maquillaje" es el viejo y obsoleto sistema capitalista sustentado en el ¡ post-modernismo¡ con sus crímenes contra la humanidad y sus monopolios que creían ciegamente en la universalización del mercado y en la repartición - sin resistencias sociales claro- de la "aldea global".
Las grandes contradicciones continuarán pues un "`puñado" de países imperialistas y sus monopolios se enriquecen hace centurias con la explotación y el saqueo de los trabajadores y sus naciones a quienes someten a la guerra, al analfabetismo y la desnutrición; mientras un cuarto de la población mundial que vive en los países altamente industrializados usufructúa el 80% de las riquezas, de los servicios y de la energía producidos en el mundo; en tanto el 75% de la población de los países dependientes "utiliza" del 15 al 20%.
En realidad el sistema imperialista y sus títeres "Bushianos" están sumidos en una gran crisis provocada por la naturaleza misma del sistema Esta se acerca a una crisis que conmoverá los cimientos del decadente capitalismo.
Sin embargo y frente a este escenario, los trabajadores y los pueblos se recuperan de la dispersión política y organizativa, de la confusión ideológica; avanzan y buscan alternativas unitarias; jamás se aniquilaron pues son dueños de cualidades propias, de su espíritu práctico y solidario; hoy de mejor capacidad organizativa pues además posee una importante experiencia de lucha que recupera y la pone al servicio de la libertad, la revolución la paz y el socialismo.
Hoy crecen el mundo más trincheras revolucionarias, continuará el combate contra el capital; no se terminará la utopía, ella renace cada día en la organización y la lucha de los trabajadores que mantendremos nuestro ímpetu revolucionario, por la liberación integral de hombres y mujeres, por su dignificación y la autodeterminación de los pueblos y naciones, por la soberanía e independencia nacionales, contra el chovinismo y la opresión nacional.
Sin duda alguna los pueblos triunfarán, será derrotada la subversión
capitalista, continuará en ascenso el curso de la lucha revolucionaria con sus
dificultades, virtudes y retos para alcanzar la victoria de los pueblos como
obra de los revolucionarios, por la acción de las masas y su unidad; defendiendo
y construyendo la democracia, el poder popular, la revolución y el Socialismo!