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Evo sacude la Cumbre al poner en duda indemnizaciones en Bolivia
El presidente boliviano, Evo Morales, afirmó ayer en Viena que las petroleras extranjeras "tienen todo el derecho a recuperar su inversión" tras la nacionalización de los hidrocarburos en Bolivia, pero advirtió que no habrá "indemnizaciones" y fue bastante duro con la brasileña Petrobras.
"Las empresas tienen todo el derecho de recuperar su inversión y tener
derecho a utilidades, pero no pueden ejercer el derecho de propiedad", sostuvo
Morales en una multitudinaria y extensa conferencia de prensa, poco antes del
inicio de la IV Cumbre Eurolatinoamericana en la capital austríaca.Diez días
después de anunciar la nacionalización del gas y petróleo de Bolivia, medida que
afecta principalmente a la estatal brasileña Petrobras y la española Repsol-YPF,
el jefe de Estado boliviano insistió en que las empresas extranjeras
"recuperarán su inversión".Por lo tanto, "no hay por qué pensar en una
indemnización", sentenció Morales, interrogado casi exclusivamente sobre de qué
forma garantizará la seguridad jurídica, como le exigió el jueves la Unión
Europea (UE). Una delegación del gobierno brasileño y de Petrobras dijo el
miércoles en La Paz, tras una reunión con sus pares bolivianos, que Brasil
acatará el decreto presidencial y acordaron buscar eventuales formas de
compensación. De su lado, la presidencia austríaca de la UE exigió el jueves en
Viena al gobierno boliviano que "tenga en cuenta la cuestión de la confianza, la
seguridad jurídica y la previsibilidad" en el proceso de nacionalización.
Morales, primer indígena y dirigente cocalero que desempeña la presidencia de
Bolivia, segunda reserva gasífera de Sudamérica, respondió que las empresas
petroleras foráneas "son las primeras que no respetan las normas bolivianas", y
recordó las denuncias judiciales que existen contra varias de ellas, como la
española Repsol-YPF, por evasión fiscal y contrabando."Hay muchas denuncias
contra empresas petroleras que no pagan impuestos y son contrabandistas ¿De qué
seguridad jurídica nos pueden hablar si son los primeros en violar la seguridad
jurídica?", sentenció con dureza Morales, con camisa clara y un saco de alpaca
marrón, fiel a su costumbre de no vestir el tradicional traje de saco y corbata.
Interrogado insistentemente por periodistas brasileños, Morales subió el tono
para afirmar "con mucho respeto a todo el mundo" que su gobierno no tenía "por
qué preguntar, consultar o informar sobre políticas que tiene que resolver un
país soberanamente". "Si quiere hablar de los contratos, le voy a demostrar que
son ilegales e inconstitucionales y si quiere saber sobre Petrobras le voy a
informar cómo ilegalmente operaron sin respetar las normas de Bolivia", sostuvo
Morales."Las empresas extranjeras que respeten las leyes bolivianas tendrán
seguridad jurídica", enfatizó Morales, quien recordó que intentó hablar con el
presidente Luiz Inacio Lula da Silva días antes de la nacionalización, pero
"creo que sus colaboradores me bloquearon".Morales decía en que "los compromisos
del gobierno español no se paren por la nacionalización"."Durante la campaña me
encontré con autoridades españolas y me decían que si ganaba iban a doblar la
ayuda a Bolivia, y hasta ahora no me he encontrado nada", dijo Morales con
bastante ironía. Sobre la erradicación de la hoja de coca, como le reclama a La
Paz la UE, Evo Morales abogó por la industrialización para fines benéficos y
subrayó que en su país "no habrá coca cero ni libre cultivo de coca", y que su
propuesta es una "producción racionalizada bajo control campesino".Evo Morales
reiteró su "admiración y respeto" por el gobierno de Cuba y por Fidel Castro y
su rechazo por quienes "mandan gente para matar vidas". "Cuba manda tropas de
médicos para salvar vidas", enfatizó Morales, que criticó la "ayuda condicionada
de Estados Unidos", que en cambio "envía bases militares no solamente en Bolivia
sino en muchos países latinoamericanos".
Malestar de Brasil El ministro de Exteriores de Brasil, Celso Amorim, se declaró
indignado por acusaciones hechas por el presidente boliviano, Evo Morales."Nos
extraña mucho lo que ha ocurrido. Si usted quiere traducir eso por indignación,
no estará equivocado", dijo Amorim en declaraciones reproducidas por medios
brasileños al ser cuestionado sobre los dichos de Morales.El ministro hizo estas
declaraciones en rueda de prensa con los medios brasileños tras su llegada a
Viena, donde acompaña al presidente Luiz Inacio Lula da Silva.
Hasta la fecha el gobierno brasileño había intentado no subir de tono las
reacciones frente a la crisis boliviana."La convicción del presidente (Lula) es
de que (Petrobras) siempre se pautó por normas legales", dijo Amorim..Brasil
resultó fuertemente sorprendido por la nacionalización de los hidrocarburos en
Bolivia, donde Petrobras es la empresa extranjera con más inversiones (1.500
millones de dólares) y de donde los brasileños obtienen el 50% del gas que
consumen.Tras la nacionalización, Brasil comenzó a negociar con Bolivia en qué
situación quedará Petrobras y el abastecimiento brasileño.