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Latinoamérica
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Colombia.
Alianzas sociales y políticas hacia el Poder Popular.
Alejandro Martínez.
Continúa la vigorosa participación y la lucha de los movimientos sociales en América Latina en la ruta decisiva de constituirse en opciones políticas ; pero desde las profundas e históricas raíces populares y revolucionarias, que expresan además la gran resistencia y reserva de los pueblos, que se encaminan de manera determinante a la emancipación cívica, social, cultural y política, de identidades y dignidad; que como tendencias clasistas rompen efectivamente con el burocratismo, dando paso a sectores en el que juegan un rol central otras luchas, con otros sectores populares y movimientos sociales organizados o en esa vía, que también incluyen el rescate y un nuevo perfil de la lucha obrera, fundamental hoy en tanto actividad sindical clasista y amplia.
Desarrollar desde las experimentadas y consecuentes fuerzas socialistas y revolucionarias, una organización ágil y sólida de las masas trabajadoras en su pluralidad, riqueza y diversidad sin perder la independencia de clase, es una manera de superar en unidad de acción el peligro de mayor fragmentación del movimiento popular y la frustrante realidad de las "izquierdas oficiales" como su fracasado espectro, que canceló la confrontación con el enemigo histórico de los pueblos .
Estimular entonces un amplio debate político- estratégico y de movilización social , que permita el diálogo y la convergencia de las fuerzas sociales y políticas en el terreno popular; y de respeto a la autonomía, es una gran responsabilidad de esta etapa y desde luego conducirá a crear la confianza mutua desde el liderazgo social, para encarar en mejores condiciones la táctica y el futuro.
Las reivindicaciones de la clase popular deben pasar indudablemente por acuerdos de convergencia para la acción, que respeten el poder de decisión del pueblo y las fuerzas que representan en realidad a las masas trabajadoras, involucrados hoy en movimientos políticos más amplios y en una fase de la lucha de clases en la que son indispensables la construcción del poder popular y de la consolidación de la izquierda revolucionaria.
Conjugar unas eficaces capacidades de acción en las luchas de
los movimientos populares, la solidaridad internacionalista - por lo menos
continental-,y los intereses y necesidades de las masas trabajadoras, por encima
de cualquier aparato grande o pequeño, son una perspectiva para intensificarse y
cualificarse; y que en el caso particular de Colombia no son la excepción, pues
se requiere de romper nada más ni nada menos, que con el plan de guerra asignado
por el imperialismo gringo a AUV-AUC y su reelección, que no se reduce a nuestro
país; sino, que se extiende a los procesos democráticos y populares en el
continente, en defensa de la política yanqui, las clases dominantes ,y las
multinacionales, que de nuevo sueñan con destruir a la insurgencia y al pueblo
hoy en la tarea de fortalecer los procesos de unidad, de resistencia
democrático-revolucionaria, en los que el tema del poder popular, la alternativa
democrática y su plataforma definen hoy un gobierno para la PAZ.
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