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Paraguay
Los campesinos pidieron más unidad para cambiar el país
María
Angélica Ramos
Un llamado a la unidad y a la movilización como forma de participación para
cambiar el país, fue hecho por los labriegos que protagonizaron ayer una de las
marchas más concurridas de los últimos cinco años sobre la capital del país.
Los integrantes de la Federación Nacional Campesina (FNC), desde el más pequeño
al más adulto, hombres y mujeres, llegaron en forma masiva hasta Asunción para
invitar a la ciudadanía en general a salir a las calles a protestar por la
desidia y la desatención del Estado al sector pobre del país.
"Hace 11 años que vengo, desde muy pequeño, porque soy consciente de que la
única manera en que las autoridades nos hacen caso es demostrándoles la fuerza
que tenemos en la unidad", dijo Isidro Ruiz, de 22 años, proveniente de la zona
de Yrybucuá, San Pedro.
Él, como los demás 10.000 campesinos, vino montado en un camión de carga
alquilado por 2.800.000 guaraníes colectados en actividades sociales y con
colaboraciones de hasta 50.000 guaraníes por persona.
"El que quería venir debía pagar para hacerlo", enfatizó satisfecho de poder
ofrecer su grano de arena para "cambiar el país", donde la política económica no
favorece al pueblo pobre, especialmente del campo.
Pedro Valenzuela, de 26 años y proveniente de Arroyito, Concepción, también
coincidió en la necesidad de aunar esfuerzos para revertir la crisis
transformándola en desarrollo.
La FNC, según el secretario general Odilón Espínola, vino a definir un
"posicionamiento político" de una organización que se revela contra el "concepto
que maneja el presidente Nicanor Duarte Frutos con los oligarcas".
"Nos preguntamos si la seguridad del país pasa por asegurar latifundios o a los
cerca de 2 millones de seres con problemas de trabajo, a los 2.800.000
paraguayos en situación de pobreza o a las 10 millones de cabezas de ganado para
la exportación, las 2 millones de hectáreas de soja o el 70% de analfabetismo
funcional, se preguntó.
La marcha convocó a por lo menos 10.000 personas, que en forma pacífica llegaron
hasta las plazas frente al Congreso. La fila necesitó de 35 minutos para
ingresar desde Azara por Chile, Palma y Alberdi hasta las plazas.
APOYO. Ya en la calle Palma, los manifestantes recibieron la nutrida adhesión de
la Corriente Sindical Clasista y de los médicos de la Federación Nacional de
Trabajadores de la Salud que acompañaron el acto frente al Parlamento.
También estuvieron presentes estudiantes del Instituto Superior de Estudios
Humanísticos Filosóficos, al igual que otros grupos sociales.
Como en años anteriores la concentración se cumplió en el local del ex Seminario
Metropolitano, donde recibieron asistencia alimentaria por parte de la Pastoral
Social de la Iglesia Católica.
Pedidos
Los labriegos llegaron hasta la capital para hacer escuchar su protesta contra
el imperialismo y la política agroexportadora del gobierno. Reivindicaron la
reforma agraria integral y la soberanía nacional.
Los errores del Gobierno bajo la lupa campesina
1) Política agroexportadora:
"Agrede el medio ambiente y va convirtiendo al país en un desierto, por culpa de
la deforestación y el cultivo extensivo de la soja, que arrasan con las
comunidades y los rubros de autoconsumo. Además aumentan la especulación por la
tierra y la propiedad se concentra en unos pocos, la mayoría extranjeros."
2) Latifundio:
"El 80% de la tierra productiva está en manos del 1% de la población. Estanca el
desarrollo de nuestro país, porque rompe con las posibilidades de ampliar la
producción de rubros primarios."
3) Demagogia:
"El Gobierno de Nicanor Duarte Frutos le oculta a mucha gente la realidad",
afirmó Odilón Espínola. "En su discurso habla de caminos y viviendas populares.
Esas obras son importantes, pero no prioritarias; hay otras cosas mucho más
urgentes, como la reforma agraria", apuntó.
4) Represión a dirigentes sociales:
"El Poder Judicial se convirtió en un instrumento represor de la clase pobre y
para defender a sus socios. Se procesa a dirigentes que participan de protestas.
No hay ningún interés hacia los trabajadores y mucho menos hacia el
campesinado."