Claro que no es que el estado plantee una lucha pluralista y democrática, lo que ocurre es que éste requiere de oxígeno para la guerra de exterminio contra el pueblo y sus organizaciones que hoy plantean un nivel de lucha política y social amplio con la candidatura de Carlos Gaviria Días , que estimularía la lucha política de masas, como una de las principales formas de lucha de nuestro pueblo, y que por lo tanto no puede carecer de las mejores consideraciones sobre el momento, lugar y evolución de esa forma soberana y suya, violenta y pacífica, y que definirá en buena medida el carácter Popular y Democrático de la Nueva Colombia.

En este escenario, el de la búsqueda de la paz, los Colombian@s seguimos sufriendo una intensa guerra antipopular, frente a la cual nuestro pueblo da respuestas a distinto nivel y con propósitos antiimperialistas , pero teniendo como contrapartida el combate y la movilización popular por la liberación nacional.

Tal valoración requiere que las izquierdas y los sectores democráticos y patrióticos incrementen la presencia en el pueblo, en las masas, con una movilización más efectiva, unitaria, de mayor coordinación, es decir hay que ligarse, indisolublemente a ellas, participar en la conducción de sus luchas; " ser con ellas," cohesionarlas y proyectarlas en su autonomía estratégicamente, hacia la posibilidad de nuevos ascensos en la lucha de masas, que exigen un verdadero cambio en la acción de la izquierda, mejor disposición y una acción más eficaz.

Es muy importante que la izquierda consulte la realidades de hoy, las perspectivas tácticas y estratégicas, así como las factores desencadenantes de diverso tipo que no manejamos voluntariamente, tanto en el campo internacional como nacional, que hacen referencia a la conjunción de los factores internos y externos y a la forma dinámica en que se interrelacionan, la necesidad de la recuperación del acumulado ideológico, político y organizativo de estos años del movimiento popular que hoy giran en razón de la paz, la democracia, el intercambio humanitario, la Convención Nacional, la lucha contra el ALCA, entre otros .

La tarea es pues, desatrancar y potenciar la unidad y la lucha de masas, que seguramente nos lleva a unir la explosividad de las barriadas urbanas – movimientos cívicos- en las grandes ciudades, con la fuerza de los movimientos regionales, para que confluyan en la exigencia de la NO REELECCION de AUV-AUC; como a vertebrar las diversas vertientes del movimiento y la lucha y proyectarlas en la perspectiva del poder popular.