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Venezuela, en el punto de mira de Washington
Salim Lamrani
Rebelión
La hostilidad de los Estados Unidos hacia el gobierno del presidente Chávez toma
un giro cada vez más inquietante. En un reciente documento, el Pentágono
calificó el "resurgimiento de los movimientos autoritarios y populistas en
algunos países como Venezuela [de] fuente de inestabilidad política y económica".
Esta declaración es tanto más preocupante en cuanto que el Departamento de
Defensa casi nunca cita países en su estudio estratégico (Quarterly Defense
Review) publicado cada cuatro años, sino que se limita a tendencias
generales.1
Algunos días antes, el ministro de Defensa estadounidense, Donald Rumsfeld,
había comparado a Hugo Chávez con Hitler ante el Nacional Press Club de
Washington: "En Venezuela, tenemos a Chávez que tiene mucho dinero del
petróleo. Fue elegido legalmente, como Adolfo Hitler. Luego ha consolidado su
poder y ahora trabaja con Fidel Castro, el señor Morales y otros", subrayó.2
"Hemos visto a algunos líderes populistas atraer a las masas populares en
estos países. Y elecciones que tuvieron lugar, como la de Evo Morales en
Bolivia, que son claramente preocupantes", concluyó.3
La respuesta venezolana no se hizo esperar. El Vicepresidente de la República,
José Vicente Rangel, condenó firmemente las palabras agresivas de Rumsfeld:
"No estamos dispuestos a aceptar pasivamente que el gobierno nacional [...] sea
agredido impunemente por personas totalmente descalificadas desde el punto de
vista político, moral y ético, como la pandilla que acompaña al ‘Hitler
norteamericano’ George Bush".4
En el mismo sentido, el director de los servicios de inteligencia, John
Negroponte, acusó a Venezuela de "lanzar una política exterior militante en
América Latina que incluye proporcionar petróleo a tarifas preferentes a cambio
de aliados". Al mismo tiempo estigmatizó la cadena internacional de
televisión Telesur, cuyo papel es romper la hegemonía de CNN en el
continente. Afirmó ante una comisión del Senado que "Venezuela es el
principal desafío a la seguridad del hemisferio" y que la prioridad de
Washington es impedir a cualquier precio la reelección de Hugo Chávez en
diciembre de 2006. Por fin, amenazó a Bolivia que "continúa emitiendo señales
ambiguas sobre sus intenciones".5
"La política exterior militante" evocada por John Negroponte se refiere a
la cooperación solidaria elaborada por Venezuela, que permite a numerosas
naciones pobres de la región adquirir combustible a tarifas preferentes. Keith
Mitchell, Primer ministro de Grenada, firmó un acuerdo de cooperación energética
con el presidente Chávez que prevé el suministro de 1 000 barriles de petróleo
diarios con un descuento del 50% sobre el precio del mercado. Venezuela ha
enviado también un grupo de militares e ingenieros civiles a Grenada para
reparar las escuelas deterioradas por los diversos huracanes. El modelo de
integración que preconiza la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA),
completamente opuesto al ultraliberalismo destructor del Área de Libre Cambio
Américas (ALCA), ha irritado fuertemente a la Casa Blanca.6
Frente a las amenazas explícitas que lanza la administración Bush, Venezuela ha
decidido reforzar su defensa comprando aviones de caza a España. Pero,
Washington ha prohibido al gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero proporcionar
aviones militares dotados de tecnología estadounidense a la República
Bolivariana, pues la venta de un monto total de dos mil millones de dólares
podría "contribuir a la desestabilización de América Latina", según Sean
McCormack, portavoz del Departamento de Estado.7 También en este sentido, Brasil
rechazó la prohibición estadounidense, afirmando que procedería a la venta de 20
aviones a Venezuela.8
Según Washington, la venta de armas a Venezuela correría el riesgo de
desestabilizar la región. McCormark explica que las "inquietudes se centran
en lo que consideramos que es una militarización exagerada en Venezuela".9
Ahora bien, la empresa estadounidense Lockheed Martin acaba de librar
varios aviones de caza F16 a Chile, y prevé proporcionar otros ocho durante el
año 2006. Chile dispone ahora de la flota aérea más moderna de América Latina,
sin que ello plantee problema alguno a la administración Bush, únicamente
obsesionada con las reformas progresistas emprendidas por Caracas.10
Además de la importante adquisición de armamento indispensable para la defensa
de la nación (100 000 fusiles y 15 helicópteros comprados a Rusia), el
presidente Chávez ha decidido crear un ejército de un millón de voluntarios para
hacer frente a una eventual invasión militar del país por las tropas
estadounidenses. El gobierno bolivariano ha escogido seguir el ejemplo de Cuba
en materia de preparación de la defensa. "¿Por qué los gringos invadieron
medio mundo y nunca invadieron Cuba? En Cuba es todo el pueblo [quien está]
entrenado para defender palmo a palmo el territorio y la Revolución cubana",
apuntó Chávez.11
Los Estados Unidos han emprendido también una labor de espionaje y de fomento de
la subversión interna mediante su embajada en Caracas, con el fin de
desestabilizar el país cada vez más conquistado por los avances sociales
logrados por el gobierno. "Algunos oficiales de bajo rango proporcionaban
informaciones al Pentágono", declaró el Vicepresidente venezolano. Un
agregado militar estadounidense, John Correa, quien había tomado contacto con
dichos oficiales, con el fin de conspirar contra las autoridades, fue expulsado
del país.12 En cuanto a los militares venezolanos, fueron enjuiciados por
colaboración con una potencia extranjera.13
En represalia, Washington declaró a Jenny Figueredo Frías, jefa del gabinete del
embajador venezolano Bernado Álvarez en Washington, persona non grata,
admitiendo al mismo tiempo que se trataba de una medida arbitraria: "Esta
decisión es una respuesta a la expulsión por el gobierno venezolano del
comandante John Correa, agregado naval de la embajada de los Estados Unidos en
Caracas", afirmó el portavoz del Departamento de Estado.14
Anthony Blair, fiel e incondicional servidor de la administración Bush, dio
muestras de su total subordinación para con Washington, durante una sesión
semanal del Parlamento británico. El diputado laborista Colin Burgon interpeló
al Primer ministro: "Estoy seguro de que usted comparte la satisfacción de
muchos diputados laboristas por el giro a la izquierda que se ha registrado en
América Latina [con la llegada al poder de] gobiernos que luchan por los
intereses de la mayoría, y no de unos pocos". Luego, preguntándole, siguió:
"Pero estaría usted de acuerdo en que sería muy malo para todos si permitimos
que nuestras políticas hacia esos países, especialmente naciones como Venezuela,
sean definidas por la agenda derechista republicana del gobierno estadounidense".15
De manera sorprendente, Anthony Blair contestó: "Hasta cierto punto",
intentando justificar sus palabras afirmado que era "importante que el
gobierno de Venezuela comprenda que si quiere ser respetado por la comunidad
internacional, debe cumplir con las reglas de la comunidad internacional".
Evidentemente, por "comunidad internacional", hay que entender aquí "los
Estados Unidos", cuyas "reglas" deben aplicarse sin discusión. Para el
Primer ministro británico, la soberanía de Inglaterra termina donde empiezan los
intereses estadounidenses.16
Las preocupaciones de Washington se centran actualmente en Hugo Chávez, pues
simboliza la renovación política en América Latina, destinando los recursos
nacionales a las capas populares más desfavorecidas. El gobierno venezolano
acaba de aprobar un impresionante aumento de los salarios de los funcionarios
que va de +34% a +61,8%, lo que equivale a un incremento de un 47% como
promedio. También revisó al alza de un 15% el salario mínimo de los empleados
del sector privado. Desde el año 2000, el salario mínimo en Venezuela ha sido
incrementado cada año de un 20% a un 30%. Toda la población se ha beneficiado
ampliamente con los ingresos procedentes del crecimiento económico, que se elevó
a un 9,4% en 2005.17
En comparación, en Francia, quinta potencia mundial, cuyo modelo social se alaba
tanto, el salario de los funcionarios sólo fue incrementado en un 1% en 2005. En
cuanto a los salarios del sector privado, registraron un aumento de un 0,6% en
términos reales (alza del 2,8% menos el 2,2% de inflación). El "socialismo
del siglo XXI", preconizado por el presidente Chávez, no va aplicarse de
pronto en Francia, donde el gobierno lleva una política antisocial despiadada
desde 2002.18
De la misma forma, mil millones de bolívares se otorgaron a la misión "Barrio
Adentro III", sistema de cobertura médica universal y gratuita creada por el
gobierno. Esta suma permitirá adquirir 30 932 equipos de salud (ambulancias,
ecosonógrafos digitales, etc...). Los fondos procedentes de los exedentos
petroleros se invierten así directamente en el sector social.19
El sistema único de salud creado en Venezuela gracias, entre otros, a la ayuda
de 15 000 médicos cubanos, ha permitido la realización de 163 millones de
consultas, o sea 8 consultas por habitante. La misión "Barrio Adentro I" ha
salvado la vida a 31 186 personas, gracias a la creación de 1 012 consultorios
populares en las zonas más pobres, a los cuales se agregarán otros 20 359
centros del mismo tipo. La misión "Barrio Adentro II" ha creado 100 centros de
diagnóstico integral (CDI) capaces de proporcionar una atención médica completa,
y se están construyendo otros 500 en todo el país. Por fin, con la "Misión
Milagro" realizada por Cuba, más de 176 000 venezolanos que habían perdido la
vista por problemas de cataratas, fueron operados gratuitamente por los
profesionales de la Isla.20
En cuanto al desempleo, no ha dejado de disminuir pasando de un 13,2% en junio
de 2005 a un 11,4% en diciembre de 2005. La política eficaz del gobierno ha
permitido a 367 199 personas encontrar un trabajo.21
La Unesco quiso subrayar los espectaculares logros sociales de la Revolución
bolivariana otorgando a Hugo Chávez el Premio Internacional José Martí. Esta
distinción recompensa los esfuerzos del presidente a favor de la unidad y de la
integración de los países de América Latina y el Caribe, así como la
conservación de sus identidades, tradiciones y culturas.22 En efecto, Venezuela
proporciona petróleo a tarifas preferentes a sus vecinos del continente, pero
también a algunas zonas norteamericanas como Vermont, Maine o Rhode Island. Los
habitantes de estas regiones, abandonados por la administración Bush, podrán así
comprar combustible con tarifas subvencionadas al 40% por la filial petrolera
venezolana Citgo. "Esto significará un ahorro de varios millones de dólares
para el pueblo de Vermont", indicó Erin Campbell, portavoz de Vermont.23
El 6 de febrero, el gobierno Bush hizo público su proyecto de presupuesto para
el año 2007, que incluye un aumento importante de las sumas destinadas a la
defensa, a la seguridad interior y a las relaciones exteriores. El presupuesto
de defensa supera todos los récords con un monto de 439,3 mil millones de
dólares, o sea un alza del 6,9% con respecto al año anterior. Al mismo tiempo,
los presupuestos de salud, justicia y educación, entre otros, sufrieron una
dismunición drástica. Por ejemplo, 141 programas sociales van a ser reducidos o
suprimidos. Está prevista una reducción de 65 mil millones en el programa
Medicare que concierne a la atención médica para las personas mayores o
minusválidas. También las coberturas de jubilación se ven muy afectadas. Entre
Caracas y Washington, dos modelos de sociedad, diametralmente antinómicos, se
enfrentan. De un lado, el bienestar del ciudadano se ubica en el centro del
proyecto nacional, mientras que del otro, la satisfacción del complejo
industrial o militar sigue siendo la prioridad absoluta.24
Así, mientras el gobierno Bush está dispuesto a todo para impedir un nuevo
triunfo electoral ineluctable de Hugo Chávez el 3 de diciembre de 2006,
Venezuela sigue emprendiendo reformas destinadas a mejorar el nivel de vida de
su población. Su prestigio en el resto del continente es proporcional al ocaso
de la influencia estadounidense. La razón es sencilla: mientras que Venezuela ha
concedido 28 mil millones de dólares como ayuda exterior a sus vecinos en siete
años – un promedio anual de 3,6 mil millones de dólares –, los Estados Unidos
han previsto una disminución masiva de su aporte para el año 2007, con una baja
de un 28,5% de la ayuda al desarrollo para América Latina y el Caribe, una baja
de un 10% para la ayuda médica, y una reducción de un 11% de su financiación de
la Organización de los Estados Americanos (OEA). Aquí también dos mensajes se
oponen: Caracas otorga 3,6 mil millones de dólares de ayuda anual a América
Latina, y Washington prevé disminuir su apoyo económico de 1,2 mil millones de
dólares.25
El gobierno bolivariano desafía con éxito la doctrina neoliberal, insostenible
desde un punto de vista político, económico y social, lo que explica la ira de
la Casa Blanca. A pesar de las diversas agresiones y amenazas procedentes del
Norte, el presidente Chávez dio muestras de su apertura para con Washington:
"Si ellos cambian esa actitud, responderemos igual. Todo es mejorable [...] si
demuestran respeto a nuestra soberanía, respeto a nuestras decisiones".
Pero, es poco probable que la razón y el diálogo primen en el seno de la
belicosa administración Bush.26
Notas
1 Pablo Bachelet, « El Pentágono califica a Chávez de desafío a la seguridad de
EE.UU. », El Nuevo Herald, 11 de febrero de 2006.
2 Agence France Presse, « Donald Rumsfeld compare le président vénézuelien
Chávez à Hitler », 2 de febrero de 2006.
3 El Nuevo Herald, « Rumsfeld compara a Chávez con Hitler », 3 de febrero
de 2006.
4 El Nuevo Herald, « Vicepresidente venezolano dice que Bush es el
‘Hitler de EEUU », 3 de febrero de 2006.
5 Marie Delcas, « Le président Hugo Chávez expulse un attaché militaire
américain à Caracas », Le Monde, 4 de febrero de 2006 ; El Nuevo
Herald, « Negroponte acusa a Chávez de injerencia en otros países », 2 de
febrero de 2006.
6 El Nuevo Herald, « Venezuela enviará 1.000 barriles diarios de petróleo
a Grenada », 17 de febrero de 2006.
7 Phil Gunson & Pablo Bachelet, « Spain’s Planes for Chávez Can’t Use U.S.
Components », The Miami Herald, 14 de enero de 2006.
8 El Nuevo Herald, « Embraer venderá aviones a Venezuela pese a la
oposición de EE.UU. », 20 de enero de 2006.
9 Nestor Ikeda, « EEUU : Venezuela quiere milicia de un millón de civiles »,
El Nuevo Herald, 20 de enero de 2006.
10 El Nuevo Herald, « La nueva flota chilena recibe potentes aviones de
caza F16 », 1 de febrero de 2006.
11 El Nuevo Herald, « Chávez dice que seguirá ejemplo cubano con EEUU »,
17 de enero de 2006.
12 Associated Press, « Officers Accused of U.S. Contact », 26 de enero de 2006.
13 BBC Mundo, « Chávez : ‘los tenemos infiltrados’ », 31 de enero de
2006.
14 El Nuevo Herald, « Se agrava la crisis entre Caracas y Washington », 4
de febrero de 2006.
15 El Nuevo Herald, « Chávez acusa a Blair de ‘inmoral’ », 9 de febrero
de 2006.
16 Ibid.
17 El Nuevo Herald, « Incrementan salarios de empleados públicos en
Venezuela », 13 de febrero de 2006.
18 INSEE Conjoncture, « Salaires de base dans le secteur privé et dans la
fonction publique d’Etat, troisième trimestre 2005 », 10 de enero de 2006, n°14.
19 Agencia Bolivariana de Noticias, « Presidente aprueba casi Bs. 1
millardo para Barrio Adentro III », 5 de febrero de 2006.
20 Agencia Bolivariana de Noticias, « Chávez: Barrio Adentro consolida
Sistema Único Nacional de Salud », 5 de febrero de 2006.
21 El Nuevo Herald, « Baja desempleo en Venezuela », 10 de febrero de
2006.
22 Granma, « Recibe Hugo Chávez en La Habana Premio Internacional
otorgado por la UNESCO », 3 de febrero de 2006.
www.granma.cu/espanol/2006/febrero/vier3/recibe-e.html (sitio
consultado el 4 de febrero de 2006).
23 El Nuevo Herald, « Vermont se apresta a comprar petróleo barato a
Venezuela », 19 de enero de 2006.
24 Le Monde, « Budget 2007 : George Bush veut réduire les dépenses
sociales au profit de la défense », 6 de febrero de 2006.
25 Andres Oppenheimer, « Chávez Making Friends While Bush Earning Enmity »,
The Miami Herald, 9 de febrero de 2006.
26 El Nuevo Herald, « Chávez pide respeto para cambiar relación con EEUU
», 10 de febrero de 2006.
Revisado por Caty R.