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Archivos presuntamente destruidos el presidente tendría que haber ordenado una investigación
Primera Voz de 1410 AM
''La destrucción de los documentos a que hace referencia'' el comandante en jefe
de la Armada, Juan Fernández, ''se adecua a la figura prevista en el artículo
244 del Código Penal'', siendo un ''delito de naturaleza grave, con una pena
importante de acuerdo'' a lo ''que efectivamente se haya destruido'', explicó el
abogado encargado de llevar el caso a la Justicia, Gustavo Salles en el programa
Mundo Cañón de 1410 AM Libre.
El 1º de marzo asumió como principal de la Armada Juan Fernández y realizó unas
declaraciones que ni él mismo se imaginó las consecuencias que tendrían. Las
mismas lo van a llevar ante los magistrados, porque les va a tener que explicar
qué archivos de la dictadura se destruyeron, cómo fue el procedimiento y qué
autoridad gubernamental impartió las órdenes. Él sólo se metió en esa historia
sin imaginar que a un abogado se le podría ocurrir tomar sus palabras y hacer
una denuncia para que explique qué sabe y que amplíe qué fue lo que sucedió, más
allá de que el comandante en jefe de la Armada tenga o no responsabilidad en la
destrucción de esos archivos. El abogado que decidió llevar esto a la Justicia
es Gustavo Salles.
Mundo Cañón- ¿Dónde se encontró con esa información, lo vio por televisión, lo
leyó en la prensa? Gustavo Salles- No, yo estaba mirando el informativo. En el
propio noticiamiento que le doy a los dichos del comandante en jefe digo que fue
en vivo, en vivo naturalmente por los medios televisivos.
MC- ¿La acción que presentó ante la Justicia la pensó en ese momento o dijo la
Justicia tendría que tomar cartas en el asunto? GS- La exclamación fue esa, pa'
mirá la Justicia debe actuar en ese sentido.
No sólo la Justicia, esto fue dicho en presencia del señor presidente de la
República, el señor vicepresidente de la República, la señora ministra de
Defensa, el señor ministro del Interior. Había autoridades nacionales con el
deber jurídico de actuar de inmediato. Lo que se estaba poniendo de manifiesto
por parte del comandante en jefe de la Armada era naturalmente un hecho con
apariencia antijurídica.
MC- ¿Penalmente puede configurar algún delito específico? GS- ¿Respecto a quién?
MC- A los dichos de Fernández. No los dichos, sino los hechos que relata.
GS- Naturalmente el noticiamiento nuestro a la Justicia penal es en función de
entender que de haberse verificado en la práctica la destrucción de los
documentos que hace referencia el señor comandante se adecua a la figura
prevista en el artículo 244 del código penal, supresión, destrucción u
ocultamiento de documentos verdaderos. Es un delito de naturaleza grave, con una
pena importante de acuerdo al tipo de documento que efectivamente se haya
destruido.
MC- ¿En este noticiamiento agregó cintas de audio, video o eso corresponde al
juez corroborarlo? GS- No, no agregué material porque jurídicamente estos hechos
encuadran dentro de lo que se conoce como hechos de notoriedad pública, en la
medida que fueron difundidos por todos los medios de comunicación, televisivos,
radiales y escritos, está por demás evidenciada la realidad, la verificación
empírica de los dichos del señor comandante en jefe.
MC- Le hago esa pregunta porque hay una frase que no pudimos comprobar
basándonos en las grabaciones del propio departamento informativo de la radio y
en las declaraciones transcriptas en la página de Presidencia, en donde se
encuentra el discurso de Fernández y también la conferencia de prensa. Cuando
dice ''fueron sucesivas autoridades y directivas del Poder Ejecutivo'' nosotros
no las pudimos encontrar por ningún lado. Eso no está transcripto en Presidencia
y no tenemos audio que lo corrobore, sí vi recortes de prensa que hacen
referencia a la frase. (*) GS- Naturalmente el material que manejo es el de la
prensa, tanto oral, escrita como televisiva, por lo tanto, en las
transcripciones que yo realizo en el noticiamiento no hago referencia a esa
frase por no haberla encontrado transcripta, pero todo ese tema debe ser
debidamente investigado por la Justicia. Hay una cosa importante, la actuación
nuestra que es sencillamente darle noticia a la Justicia constituye una suerte
de subrogación a la inoperancia, a la desidia que mostraron las autoridades
competentes frente a los graves dichos del señor comandante en jefe. Lo que
hubiese correspondido conforme a derecho es que el presidente de la República,
que escuchó el discurso, o si no escuchó esa parte después tomó contacto a
través de la prensa, hubiera empezado una investigación en el plano
administrativo, de ha ber efectuado la denuncia pertinente a través de los
órganos correspondientes de la fiscalía. Nada de eso aconteció.
MC- ¿Qué lo obliga a hacer eso? GS- Lo obliga los deberes como comandante en
jefe de las Fuerzas Armadas, de las tres fuerzas, su condición de presidente de
la República, lo obliga su condición de primer presidente de una fuerza
progresista que llega al gobierno en función de la muerte, tortura, desaparición
de los militantes históricos de esa fuerza. Lo que quiere decir que no tiene
sólo una obligación jurídica sino ética y moral. Lo obliga la necesidad de
mandar un mensaje a las Fuerzas Armadas, después de los delitos abominables que
cometió durante la época de la represión y nunca pasó por la Justicia. Es
necesario que sepa que no es una fuerza impune. Lo obliga las palabras que él y
sus discursos ha pronunciado, diciendo que no se deja patotear, pero
refiriéndose a los luchadores sociales y medio ambientales y sin embargo sí se
deja patotear por las declaraciones de los militares.
A todo esto yo quiero contextualizar las declaraciones del señor
comandante en jefe de la Armada, con las declaraciones del señor comandante en
jefe del Ejército. Le voy a recordar que el comandante en jefe del Ejército dijo
que no correspondía, más o menos en estos términos, pedir perdón porque entendía
que los delitos que se le endilgaban a las Fuerzas Armadas no estaban probados.
Esto constituyó una verdadera provocación y un insulto al intelecto y al
raciocinio de los uruguayos, que estamos viendo por la televisión como aparecen
los esqueletos, en este caso el del luchador social marxista señor Ubagesner
Chaves. Que el señor comandante en jefe frente a la plena prueba de los
homicidios abominables que cometió la dictadura diga frente a los uruguayos que
no está plenamente probado es una provocación, que entiendo que entra dentro del
calificativo de patotear que utilizó el señor presidente de la República.
MC- ¿También llevaría al comandante en jefe del Ejército ante la Justicia por
esos dichos? GS- No, porque entiendo que la censura para con las declaraciones
del señor comandante en jefe del Ejército son de naturaleza ética y moral.
Estando el señor presidente en conocimiento de esas declaraciones tiene la
responsabilidad política y jurídica de ser él el que encauce los dichos de sus
subalternos, por algo tiene o tenía, no sé a esta altura del partido, un 54% de
la población que le da su apoyo. Yo, Gustavo Salles no soy nadie, no existo, soy
un mero ciudadano de a pie. Aquel que tiene la responsabilidad política aquel
que conquistó la expectativa de toda una masa de gente excluida que está
esperando un cambio en el país fue el doctor Tabaré Vázquez, no fue el doctor
Gustavo Salles, por lo tanto la responsabilidad la tiene el doctor Tabaré
Vázquez.
MC- Le quiero agregar algún elemento a las palabras de Fernández que hablan del
Poder Ejecutivo. Si uno lee textualmente esa frase, ''hace ya más de diez
años'', por ende deja afuera a la segunda presidencia de Sanguinetti y la de
Lacalle si uno se atuviera a eso. Nosotros hablamos con Lacalle que nos contaba
que tuvo una conversación con Fernández de quien dice ser su amigo y tener un
gran conocimiento de la persona. Nos decía que nunca había dicho esas palabras.
GS- ¿Cuál? MC- Las que directivas del Poder Ejecutivo ya hace más de diez años
le ordenaron que saque y se eliminen archivos.
GS- Eso puede ser probable, pero quiero decir algo. Primero, con respecto a los
parámetros cronológicos que manejó el señor comandante en jefe de la Armada
nacional no vinculan para nada, ni obligan para nada la investigación judicial.
La investigación judicial se realizará de aquí en más en función de los
distintos testimonios que se brinden en el expediente presumarial.
Que el señor comandante en jefe haya dicho, quince, veinte o cuarenta años no
interesa. Será el juez que profundizando la investigación y de conformidad con
los testimonios que se vayan incluyendo en el expediente podrá ir conjeturando
una situación del panorama cronológico temporal en el que debe insertar los
pretendidos que se necesitan.
MC- Las palabras que dijo Fernández: ''órdenes del Ejecutivo de destruir
cosas''. ¿Le merece una condena? GS- En absoluto, que quede muy claro. No estoy
denunciando al comandante en jefe de la Armada Nacional, lo que estoy haciendo
es dando noticiamiento de las palabras del señor comandante que hacen referencia
a la pretendida consumación de un delito en el seno de su fuerza. Al contrario,
bienvenidas sean las declaraciones del señor comandante, que permiten que la
Justicia ingrese al seno de las Fuerzas Armadas de nuestro país a investigar
delitos.
Todo lo contrario, no las censuro, ojalá todos los comandantes en jefe de las
distintas fuerzas sean tan diáfanos y espontáneos como lo ha sido el comandante
en jefe de la Armada. Les puedo garantizar que muchos otros elementos de juicio
tendría la población para evaluar y enjuiciar moral y éticamente lo que fue el
proceder de las Fuerzas Armadas institucionalmente a lo largo de la historia del
Uruguay.
MC- ¿Tiene plazo la Justicia para actuar sobre este tema? GS- No, las
investigaciones presumariales no tienen un plazo establecido.
Funcionarán de conformidad con los elementos de prueba que se vayan sustanciando
y diligenciando, con el grado de espíritu de colaboración y esclarecimiento que
muestre cada uno de los operadores que sean llamados a declarar.
(*) Al final del reportaje, la producción del programa Primera Voz de 1410 AM
Libre aportó la grabación de marras (nota de Comcosur)