Latinoamérica
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¿Luna de miel…?
Gustavo Espinoza m. (*)
Se anunció ya oficialmente en Lima que el Presidente Alejandro Toledo viajará
próximamente a Washington donde será recibido ostentosamente por el amo del
Imperio, George W. Bush.
El viaje será el miércoles 8 de marzo y dará lugar a una nutrida agenda.
Reuniones con el Banco Mundial y otros organismos financieros, pero también
encuentros con miembros del Senado de los Estados Unidos y de la Cámara de
Representantes, han sido incorporadas al programa que sostendrá el mandatario
peruano que el viernes 10 saldrá rumbo a Chile con una escala en Lima, para
concurrir a la instalación del gobierno de Michelle Bachellet.
Ese día, sin embargo, será decisivo. Toledo será recibido en horas de la mañana
por el mandatario norteamericano en la Casa Blanca y luego será agasajado con un
almuerzo "en privado".
Para que nadie dude del nivel de los encuentros de ese día, las autoridades
subrayaron ya que Alejandro Toledo se hospedará en la Blair House, la Casa de
Huéspedes oficial, que estará por primera vez a su disposición.
¿Por qué tanta deferencia y amabilidad en curso?
Porque los Presidentes de Estados Unidos y el Perú no tendrán en marzo su último
encuentro. Habrá otro, el 6 de abril, para la firma del Tratado de Libre
Comercio entre ambas naciones.
Pero probablemente la agenda en abril sea más rica. Como se sabe, en abril
también se reúne anualmente la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas,
en Ginebra, y allí el gobierno de los Estados Unidos buscará otra vez "condenar
a Cuba". Los condicionamientos, entonces, estarán a la orden del día.
Para anudar todos estos asuntos y no dejar nada a la improvisación, el
Departamento de Estado ajusta los hilos. Y por eso anuncia que el domingo 12 de
marzo estará en Lima Condolezza Rice, quien vendrá de Chile a visitar el Perú
en el marco de una gira "por diversos países de la región", la misma que tendrá
como temática básica "el análisis de la región", es decir, lo que ocurre hoy en
Venezuela, Ecuador, Bolivia y ¡por qué no? también el Perú.
Luna de miel, entonces que deberemos enfrentar los peruanos como corresponde.
Ojalá no se repita esta vez, sin embargo, lo que sucedió en marzo del 2001,
cuando llegó Bush a nuestro suelo: un oportunísimo "atentado terrorista de
Sendero Luminoso" permitió al gobierno suspender las garantías y decretar el
Estado de Emergencia y a la Izquierda oficial a "suspender sus protestas" para
"no hacerle el juego a la subversión".
Han pasado cinco años de estos hechos, y hoy se sabe que el "atentado" -el coche
bomba de la Avenida El Polo ante la embajada de los Estados Unidos- no tiene
culpables –nadie ha sido condenado-; y la "suspensión de las protestas" influye
para que ahora los líderes de esa izquierda sean mal vistos por la ciudadanía,
que ahora es "electorado".
(*) Del Colectivo de Dirección de Nuestra Bandera
Fuente: lafogata.org