Latinoamérica
|
La revolución Mexicana Permanente
Fernando Buen Abad Domínguez
Rebelión/Fundación Federico Engels
Vista con lo ojos de los que luchan la Revolución Mexicana es un proceso largo que celebra fechas nuevas al calor de las insurrecciones continuas que hemos visto, vemos y veremos durante mucho tiempo. Dice la "versión oficial" que la revolución "terminó", que se trata de una "celebración del pasado", dicen los enterradores de las luchas que todo esta ok y que contamos con "instituciones revolucionarias sólidas"… pero lo cierto es que México vive hoy un alboroto de esperanzas y un revoloteo de ideas revolucionarias con un ¡Ya basta! amplificado con millones de urgencias agudizadas por ensanchar y profundizar la Revolución Permanente. Zapata estaría Feliz... Villa también.
México vive el ascenso de su Revolución Permanente que retoma fuerza para escapar del secuestro verborréico, criminal y demagógico de quienes hablan en nombre de la Revolución sólo para traicionarla saqueando las riquezas y degradando a los trabajadores con humillaciones infinitas… México vive el ascenso de una etapa nueva en su Revolución Permanente luego de la andanada asesina del neoliberalismo, del asalto criminal del TLC de la mucha sangre, la represión incontable y la maldición de gobiernos traidores uno tras otro.
México tiene a estas horas el mejor reflejo de los mejores luchadores históricos que se hacen presentes, de un modo u otro, en cada asamblea de Oaxaca, del D.F., de Michoacán, de Chiapas, de Tijuana de los Ángeles, Houston…. México actualiza en nosotros el reflejo del pasado, para dejarnos ver la página del presente y del futuro en la que está explicado el socialismo como la imaginación concreta de una revolución plena, permanente, impregnada de amor loco revolucionario y mundial. Que no nos roben el futuro.
México está impregnado de lenguajes revolucionarios, de poesía de lucha unida en el tiempo por el espíritu de un pueblo luchador y amigote que se baña donde brotan las palabras más rebeldes tal cual lo vimos en el Zócalo, en la Convención Nacional Democrática, tal cual lo probó la lucha contra el fraude, tal cual lo vemos en la APPO, tal cual lo vemos ahora que la oligarquía se apresta, a punta de bombazos y mass media, a justificar una represión degenerada que deje a Calderón asumir su cargo espurio "en paz"… pero la Revolución está de vuelta, la Revolución Mexicana Permanente, no la de los museos, no la que yace petrificada en los libros de algunos historiadores, no la que huele a camposanto… esta de vuelta la Revolución secuestrada, la que se persigue a fuego y picana como en Atenco, la que agita corazones, la que da identidad a México por encima de cualquier otra cosa. Única identidad verdadera.
México celebra la Revolución Permanente a su modo y desde abajo, con su fiesta propia de poeta rebelde con reloj propio que no le teme a su dialéctica. Nadie impedirá que la Revolución Mexicana Permanente se clave en la eternidad para alumbrar con su fulgor la suerte venidera. Nadie impedirá que florezca en nuestra carne y pensamientos y repique desbordada esa pasión que invadirá al orbe del futuro. Revolución Permanente que se ocupa y se ocupará constantemente de reproducir este momento en que la humanidad da sus saltos cuantitativos y cualitativos con un mirar de vértigos. Revolución para tomar el cielo por asalto con ejércitos de luz y millones de obreros y campesinos que levantan al cielo sus banderas de aurora, nuestra esperanza, única esperanza contra el hambre eterna y el descorazonamiento, contra la angustia que cuelga de los pechos. Contra la angustia tantos siglos acumulada como lágrima inmensa. Contra la muerte de pesadilla y fatalidad negocio de algún idiota.
Revolución Permanente como flor retoñada en las manos de muchedumbres rebeldes para romper los candados con su fuerza de sirena en la tempestad ardiente en nuestros programas revolucionarios. Revolución Mexicana Permanente está aquí ¿Se escucha? Está detrás de todos los calendario pasados, presentes y futuros y abrirá la puerta del alma con un suspiro de huracán magnifico que sopla sus vientos a nuestro favor. No se aceptan sectarios. No se aceptan timoratos. Prohibida la entrada con piolet.
Fernando Buen Abad Domínguez