Argentina: La lucha continúa
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General Rodríguez: Aumento salarial y posiciones clasistas fuertes
El municipio de General Rodríguez se ha convertido en escenario de lucha
de los obreros municipales por lograr reivindicaciones laborales largamente
postergadas. En lo que fuera un hecho casi inédito, los días 7 y 8 de junio los
trabajadores municipales iniciaron paros progresivos en reclamo de aumento
salarial, pago de horas extras adeudadas, ropas de trabajo y recategorización.
Frente al alto índice de acatamiento a la medida de fuerza, el Intendente
Marcelo Coronel convocó a una mesa negociadora, cuya primera jornada fue el día
21/06.
Intersindical Clasista
(AW)
En un principio, la reunión estaba "preparada" para que participara sólo un
pequeño grupo digitado por el STM (CGT). Sin embargo, la movilización de las
bases hizo que en la misma debieran incluirse a gran cantidad de sus propios
afiliados, a compañeros de ATE-Víctor Choque y a un grupo de municipales "autoconvocados",
logrando abrir el juego y asegurar la defensa de los intereses de clase en la
negociación.
Sin dar lugar a maniobras dilatorias o divisionistas, la unidad reflejada por
los trabajadores consiguió un primer éxito: 200 $ de aumento a partir del mes de
julio y el compromiso de continuar las tratativas el día 30/06.
En ese lapso la patronal utilizó todo tipo de artilugios tendientes a
desmovilizar y "meter" miedo a los trabajadores. Así, circularon los rumores de
pedidos de sumario y persecución para aquellos que habían participado en la
negociación, amenazas veladas, y pedido de listas de contratados. Objetivamente
no hubo sanciones, sólo se reforzaron por medio notas internas las
reglamentaciones que se encuentran vigentes.
Esta pseudo ofensiva, lejos de amedrentar a los trabajadores más combativos,
fortaleció su unión en la necesidad de pensar estrategias de clase para
contrarrestar posibles represalias. La consigna espontánea era: ¡un ataque a
cualquiera de nosotros es un ataque a todos!
Quedaba claro, y así se difundió entre los empleados, que las torpes y groseras
amenazas contra los "cabecillas" del reclamo, vertidas por el Intendente en su
reunión de gabinete semanal, dejaba al desnudo su miedo e impotencia ante los
trabajadores organizados y en lucha. No en vano había otorgado $ 200 en la
primera reunión, cuando su verdadera intención era posponer las negociaciones
dilatando en una seguidilla de reuniones el cumplimiento de los reclamos.
Así, entre reuniones y con los trabajadores en estado de alerta, transcurrió la
semana previa a la reunión del día 30/06.
Ese día, la mesa negociadora se mostró inflexible ante los intentos del
ejecutivo por escalonar el aumento según las categorías y antigüedad, iniciando
con 150 $ para las más bajas. Según dijo, esto respondía a la presión que
recibía de los empleados con mayor antigüedad por el achatamiento de su salario.
La negativa fue unánime, ninguno de los allí presentes estaba dispuesto a volver
atrás en lo conseguido y traicionar lo comunicado a los compañeros.
Finalmente los puntos acordados en esa reunión fueron:
Aumento de $200 para todo el personal, que progresivamente serian incorporados
al básico desde la fecha hasta diciembre; recategorizaciones a partir de julio;
ningún tipo de represalias contra los trabajadores, y mantener las reuniones
durante todo este mes.
Indudablemente, y más allá de la ostensible mejora en el salario de todos los
empleados (en aquellos , con categoría mas baja se superó el 35% de aumento), es
necesario destacar que hubo un crecimiento cualitativo en la conciencia de los
trabajadores, se instaló por primera vez la discusión gremial en el Municipio,
así como la necesidad de formar parte de los sindicatos para garantizar la lucha
por los verdaderos intereses de clase.
Asimismo quedó en evidencia la falta de desarrollo de la Rama Municipal de ATE
Gral. Rodríguez, con una dirigencia desbordada por los acontecimientos, sin
capacidad de convocatoria, ni para con sus propios delegados, muchos de los
cuales se sumaron al espacio que conforma la oposición a la actual dirigencia,
expresada en la lista opositora Víctor Choque; una dirigencia totalmente
desdibujada e imposibilitada de dar respuesta al reclamo de sus propios
afiliados. Por su parte, el STM, si bien puso a sus dirigentes a la cabeza del
reclamo, tal actitud lejos de ser planificada estratégicamente como parte de la
lucha gremial, fue obligada por la presión de las bases, de los trabajadores que
en el momento de auge de la lucha de clases asumen el rol protagónico arrasando
a aquellos que se interponen en el logro de sus intereses. Hábilmente los
dirigentes de este sindicato capitalizaron parte del conflicto en su favor.
Sin duda, queda mucho camino por recorrer, la década del 90 arrasó con casi
todas las conquistas obreras, por ello es impostergable la tarea que debemos
darnos los activistas respecto de potenciar la unidad de los trabajadores, la
preparación para la lucha, y la formación de posibles nuevos dirigentes
combativos. Propiciar la solidaridad de la clase proletaria y la conformación de
un frente único cuya fortaleza resida en evitar el aislamiento y desgaste de la
lucha obrera, fragmentada por sectores o gremios, facilitando con ello la
dominación burguesa.
Por eso, es necesario destacar que esta experiencia nos deja una organización
"de autoconvocados" que trabaja en pos de darse una identidad propia, capaz de
conformarse como oposición a una dirigencia sindical burocrática y aliada con el
poder; abriendo, después de un largo y oscuro periodo la posibilidad de que sean
los obreros quienes tomen en sus manos a las organizaciones sindicales
garantizando la defensa de sus intereses. Sin dudas esta pequeña organización
fue capaz de marcar la diferencia en el conflicto, dar dirección a los hechos.
Sin esta presencia no hay dudas que el STM no hubiera incluido en su reclamo por
ropas de trabajo y horas extras adeudadas el pedido de aumento salarial, esta
reivindicación les fue impuesta por las bases a instancia de los compañeros
autoconvocados.
Sin lugar a dudas se les pateó el tablero, cuando se impidió la conformación de
una Mesa de Negociación reducida que facilitara los acuerdos de cúpulas. El
activismo de los compañeros resaltó la pasividad de la Rama de ATE, que
difícilmente vuelva a ser la misma.
Para los compañeros de la Corriente Socialista El Militante en la lista Víctor
Choque-ATE municipales, los "autoconvocados" no es un movimiento que se
justifica en sí mismo, explicamos que debe ser un puente hacia la articulación
de una alternativa clasista dentro de los sindicatos, comenzando por ATE. Así lo
están entendiendo los compañeros con el paso dado por una decena de trabajadores
"autoconvocados" de afiliarse a ATE e integrar la oposición encarnada por la
lista Víctor Choque.
Es impostergable militar en la necesidad de recuperar la herramienta sindical a
favor de los intereses proletarios. Para ello, la alternativa, aprovechando el
auge de la lucha, es hacer visible la importancia del instrumento que representa
el sindicato si está en las manos correctas.
Los trabajadores organizados en sindicatos pueden negociar, no es una cuestión
individual. Por esto se debe sumar a quienes hasta el momento se muestran ajenos
a involucrarse en la defensa de sus propios intereses, sea porque descreen de la
política sindical o buscan la salida individual, unos y otros deben unirse a la
lucha. Solo así será posible alcanzar el triunfo.
Entre tanto, es necesario sostener el estado de alerta y seguir presionando a la
dirigencia poniendo en evidencia cualquier accionar contra las bases.
Daniela Sáenz: Trabajadora municipal de Gral. Rodríguez, integrante de la
lista Víctor Choque-ATE municipales y miembro de la Mesa negociadora.