Argentina: La lucha continúa
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Mendoza: La policía Asesinó a un chico por sacar carbón de un tren para calefaccionar su casa
(AW) Un chico de 14 años, que con otros vecinos juntaba carbón de un tren
de carga, para poder calefaccionar su humilde vivienda, fue asesinado el viernes
pasado, por la policía mendocina. El niño recibió un itakazo en el pecho en
medio de una brutal e indiscriminada represión policial. Un bebé de un año y
medio fue asimismo herido por la policía y su manito resultó fracturada y el
adolescente, Ángel Sosa, de trece año fue baleado por la espalda recibiendo un
impacto en su glúteo. El hecho sucedió en un barrio humilde de Luján de Cuyo,
Provincia de Mendoza.
Agencia Walsh
Como se hizo costumbre, una vez al mes, sobre todo cuando se acerca el
invierno y bajan las temperaturas, el tren que lleva carbón es asaltado por
jóvenes de familias pauperizadas, que intentan tomar algo de combustible para
poder calefaccionar sus viviendas. Pero en la tarde del viernes, cuando algunos
pibes se subieron al tren para aprovisionarse de carbón, dos patrulleros con
seis efectivos policiales aparecieron para dispersarlos a los tiros. Y no con
balas de goma, como dijeron para excusarse.
Los seis policías implicados y que fueran detenidos por disposición del fiscal
de delitos especiales Luis Correa Llano ya fueron liberados hasta que las
pericias determinen si el "disparo salió de una de sus armas reglamentarias".
Según testimonios recogidos por diario "Los Andes" de Mendoza, "todo comenzó
cuando se asomó por el lado sur de las vías una locomotora que tiraba diez
vagones cargados, en la destilería de Luján de Cuyo, con carbón de coque.
A la altura de la estación de Perdriel la formación comenzó a disminuir su
velocidad y se detuvo frente al barrio Cuadro Estación porque los vecinos
habrían colocado un obstáculo.
En ese momento varias decenas de personas se treparon a los vagones y comenzaron
a descargar al suelo las piedras de carbón.
Dos policías que iban en la formación, para evitar el robo de ese material
trataron de evitar en vano que fuera sustraído el combustible.
Al verse desbordados, los efectivos pidieron refuerzos y a los minutos llegaron
dos móviles policiales con seis agentes que comenzaron a reprimir a la gente que
se estaba llevando el carbón.
La versión oficial dice que los uniformados fueron recibidos a piedrazos por la
gente.
Lo concreto es que en el momento en que el tren retomó la marcha los seis
policías que habían llegado avanzaron sobre las personas que juntaban el
combustible, disparando sus armas.
En ese momento cayó herido al lado de la vía Mauro Morán, con un tiro en el
pecho, y el otro chico de trece años también quedó tendido con un perdigonazo en
la pierna.
Una familiar del chico Morán que estaba en el lugar con un bebé en brazos vio
sangre en una mano de su hijo e inmediatamente corrió para esconderse de los
tiros. Luego lo llevó para que lo atendieran en un centro asistencial. Después
se supo que la perdigonada le fracturó tres deditos. El otro niño herido, Ángel
Sosa, de 13 años, fue atendido de una herida de perdigones en una pierna.
Después de la violenta represión la gente del barrio ahuyentó a piedrazos a los
policías, que decidieron abandonar el lugar.
En la causa ya se probó que Mauricio fue muerto por una bala de plomo, lo cual
demuestra la mentira de los represores. El duelo fue generalizado en el barrio
Cuadro Estación, familias enteras fueron hasta el cementerio. "Nadie imaginó que
este robo de pedazos de carbón, que ya era costumbre en los últimos años, podía
terminar con una brutal represión y una muerte", comentaba una mujer.
Fuentes: UADH Rosario - Boletín Correpi Nº 374 – Diario "Los Andes".