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Formosa

De un verdadero "desastre" calificó el productor agropecuario Eugenio Mongelós lo acontecido con sus 150 hectáreas de algodón que estaban listas para ser cosechadas, ya que resultaron literalmente aniquiladas por los efectos tóxicos de un poderoso herbicida que se utiliza sobre plantaciones de soja.

El episodio se registró en la zona de Marca M, departamento Pilcomayo, y el hecho fue denunciado en la comisaría de Laguna Naineck, a partir de lo que se dio intervención al Juzgado de la Segunda Circunscripción Judicial con asiento en Clorinda. Según trascendió, durante la jornada de ayer tomó cartas en el asunto la Secretaría de la Producción de la Provincia a cargo del ingeniero Enrique Saita.

La plantación de algodón de Mongelós linda a escasos metros de otra de soja transgénica RR de la firma Nidera SA (americana), quienes según testigos oculares, exactamente el miércoles 18 de enero, realizaron una fumigación en altura con un herbicida desfoliante y sumamente tóxico.

El producto herbicida utilizado sería el 2,4 D (ácido diclorofenoxiacetico) o similar (Ester o Amina de dicho ácido), cuya utilización está prohibida por la legislación en Buenos Aires, pero nuestra provincia no tiene una postura tomada al respecto.

Explicó Mongelós que "es muy conocido el efecto tóxico de ese herbicida, que por derivar con el viento, produce devastadores efectos en otras plantaciones, inclusive a grandes distancias, cosa que sucedió con algodonales y bananales próximos a esta plantación de soja transgénica RR".